La Siria en manos del r¨¦gimen se prepara para acudir a las urnas
Los colegios electorales abren ma?ana con el presidente El Asad como claro favorito
La campa?a electoral siria cerr¨® este domingo en mitad de la guerra civil que asola el pa¨ªs desde hace m¨¢s de tres a?os. Bachar el Asad, que preside la Rep¨²blica desde que su padre Hafez muri¨® hace catorce a?os, se presenta por primera vez a unos comicios con candidatos alternativos. Se hab¨ªa sometido antes a dos referendos, que en 2000 y en 2007 lo corroboraron en el cargo con cuotas de aprobaci¨®n de casi el 100%. Este martes, los sirios que voten encontrar¨¢n tres nombres en las papeletas: el actual presidente El Asad, el parlamentario y exministro Has¨¢n al Nuri y el parlamentario comunista Maher Hayar.
Nadie, ni siquiera los candidatos alternativos, duda de que el actual presidente se apuntar¨¢ una victoria casi tan amplia como las anteriores. La guerra civil ha destruido buena parte de Siria y ha dejado sin casa a m¨¢s de 6,5 millones de personas dentro del pa¨ªs. Se han superado ya las 160.000 muertes en el conflicto. La enorme mayor¨ªa eran civiles.
Una tercera parte de la poblaci¨®n est¨¢ desplazada o refugiada en el extranjero, mientras la oposici¨®n se reparte entre el exilio y las trincheras. Desde el centro de Damasco se oyen cada poco los ca?onazos del ej¨¦rcito regular contra los reductos que mantienen los rebeldes en los suburbios de la capital. Con este escenario y ante la proximidad ideol¨®gica que aseguran detectar entre los tres candidatos, la oposici¨®n ha llamado al boicoteo de los comicios, que la el Consejo de la Uni¨®n Europea calific¨® en abril de ¡°parodia de la democracia¡±.
Los casi tres millones de sirios que han dejado el pa¨ªs huyendo de los combates fueron llamados a votar la semana pasada. Francia, Alemania y B¨¦lgica denegaron a las embajadas y consulados sirios el permiso para llevar a cabo la consulta, que no consideran v¨¢lida.
Si se obvian las explosiones de fondo que acompa?an a la vida cotidiana del centro de Damasco, un visitante podr¨ªa pensar que el pa¨ªs est¨¢ en calma. Se dir¨ªa que el Gobierno comparte esta impresi¨®n cuando publica los detalles de la cita electoral como si fueran unos comicios cualquiera. El martes, de siete de la ma?ana a siete de la tarde abrir¨¢n los colegios electorales. Pero solo en las zonas de Siria controladas por las tropas leales a El Asad. M¨¢s o menos, dos quintas partes del pa¨ªs que incluyen la capital, las zonas costeras de Latakia y, desde hace escasas semanas, la crucial ciudad de Homs, en el centro de Siria.
La rendici¨®n de Homs signific¨® una victoria importante para El Asad, que en los ¨²ltimos meses ha expresado su convicci¨®n de que le guerra se est¨¢ resolviendo a su favor. Las batallas m¨¢s duras se libran ahora al norte, en los alrededores de Alepo, una vieja metr¨®polis sacudida por los bombardeos y los combates. El domingo llegaban a la capital noticias de decenas de muertos por explosiones en la zona leal a El Asad. Los insurgentes se han propuesto castigar indiscriminadamente a la poblaci¨®n que participe en las elecciones.
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