¡°Ni siquiera en la muerte se respet¨® la dignidad de los inmigrantes¡±

El cementerio Sagrado Coraz¨®n en Falfurrias, Texas, es el lugar de los sin nombre, aquellos que agotaron sus esperanzas tratando de cruzar la frontera con Estados Unidos y murieron en el camino. La historia que dejaron sus cuerpos se ha convertido en el centro de una investigaci¨®n despu¨¦s del hallazgo de restos humanos sin identificar enterrados en al menos 52 tumbas en malas condiciones.

Las puertas del cementerio est¨¢n abiertas para quien quiera desafiar el calor de la tarde en Falfurrias. Sus caminos internos est¨¢n adornados con m¨²ltiples flores e incluso guirnaldas. Nombres, fechas y epitafios hablan del cari?o de quienes mantienen vivos los recuerdos. Pero para aquellos sin nombre, a quienes un peque?o cartel define como ¡°restos desconocidos¡±, solo la generosidad de extra?os permite algunas flores en la tierra.

No est¨¢n ¨²nicamente en un lugar, sino en varios. A simple vista parecen ser solo unas pocas tumbas, pero la clave est¨¢ en el plural: ¡°Restos¡± ?Cu¨¢ntos? Nadie lo sabe. ?C¨®mo est¨¢n enterrados y qui¨¦n trajo los cuerpos? Tampoco est¨¢ claro.

Este mes un grupo de antrop¨®logos y estudiantes liderados por Lori Backer de la Universidad de Baylor exhum¨® 52 tumbas como parte del proyecto Reunificando Familias, que busca identificar a trav¨¦s de pruebas de ADN a los inmigrantes que han fallecido en la zona. Pero lo que encontraron en las tumbas fue mucho m¨¢s all¨¢ del proyecto. Hab¨ªa hasta tres cuerpos apilados en lugar de uno, bolsas de pl¨¢stico y se notaba un completo descuido en la forma en la que fueron sepultados.

¡°Ni siquiera en la muerte se respet¨® la dignidad de los inmigrantes¡±, dice Eddie Canales director de Southern Texas Human Rights Center, una organizaci¨®n que asiste a quienes deciden cruzar la frontera y a personas que buscan a sus familiares desaparecidos. ¡°Ac¨¢ no se siguieron los est¨¢ndares ¨¦ticos, lo que provoc¨® una gran frustraci¨®n en el equipo que exhum¨® los cuerpos. Las funerarias -a quienes las autoridades encargan el entierro de los inmigrantes muertos en el camino- no tienen mapas de d¨®nde est¨¢n¡±, explica Canales.

Para el juez del condado, Ra¨²l Ram¨ªrez, los resultados de esta primera exhumaci¨®n podr¨ªa ser ¡°la punta del iceberg¡± de lo que podr¨ªa aparecer en un futuro si contin¨²an sacando restos.

Entre las bolsas de pl¨¢stico halladas hab¨ªa algunas con el nombre del condado Jim Hogg, aleda?o a Brooks -donde se encontraron los cuerpos-. Seg¨²n el juez, ese es uno de los problemas m¨¢s graves. ¡°?C¨®mo llegaron esos cuerpos ah¨ª? ?Qui¨¦n es responsable? La ley habla de un funeral apropiado con un caj¨®n de madera. Bolsas y varios cuerpos en una tumba no es lo apropiado. Lo que se encontr¨® est¨¢ mal y podr¨ªa rozar lo ilegal¡±, comenta Ram¨ªrez.

28 de los cuerpos exhumados hasta el momento siguen en Falfurrias y esta semana ser¨¢n trasladados a la Universidad de Texas en San Marcos.

Se?ales inequ¨ªvocas

Este mi¨¦rcoles la Corte de Comisionados del Condado de Brooks se reunir¨¢ para decidir qu¨¦ hacer. La mayor¨ªa de las autoridades locales ligadas al tema estar¨¢n presentes, incluyendo el cuerpo especial de seguridad p¨²blica del estado de Texas, conocidos como Texas Rangers.

Es probable que la corte vote para pedirle al fiscal de distrito que abra una ¡°averiguaci¨®n¡± a cargo de los Texas Rangers; una palabra sutil elegida por los funcionarios locales que no quieren hablar del problema bajo el sobrenombre de ¡°investigaci¨®n¡± criminal.

El subdirector de la Oficina del Sheriff en el Condado Brooks, Benny Mart¨ªnez, insisti¨® en que es necesario esperar a que comiencen las averiguaciones para determinar responsabilidades, pero en su opini¨®n las funerarias a cargo del manejo de los cuerpos son en parte responsables.

¡°Habr¨¢ que ir paso a paso y ver cu¨¢ntas veces se les ha pagado y conectar los cuerpos con eso. Nosotros les pagamos por un servicio, pero incluso si fuera un favor, no es correcto tratar a las personas fallecidas de esta forma¡±, dijo.

La averiguaci¨®n local podr¨ªa levantar mucha m¨¢s tierra de la esperada, considerando que el condado se ha enfrentado a diversas crisis por las decenas de cuerpos de inmigrantes que han sido hallados en sus l¨ªmites en los ¨²ltimos cinco a?os.

Consultada por EL PA?S, la compa?¨ªa que administra algunas de las funerarias de la zona, Service Corporation International, asegura que ¡°durante a?os se ha trabajado de cerca con las autoridades locales y federales para manejar la situaci¨®n. Los restos deben ser tratados con dignidad y respeto". Pero no responde a las preguntas sobre el protocolo que se utiliza para sepultarlos

Solo en 2012 se encontraron 129 inmigrantes muertos en Falfurrias, el a?o pasado fueron 87 y en 2014 se han hallado 33. Por delante viene la peor ¨¦poca, ya que el verano es la estaci¨®n m¨¢s dif¨ªcil del a?o para quienes deciden arriesgarse y cruzar la frontera en esta zona agreste y ¨¢rida.

Seg¨²n el juez Ram¨ªrez, encargarse de los cuerpos tiene un costo para el condado de cerca de 2.200 d¨®lares por persona, considerando la autopsia y el entierro, dinero que las autoridades locales han tratado de adjudicar sin ¨¦xito al gobierno federal.

Mientras las discusiones pol¨ªticas sobre inmigraci¨®n contin¨²an en el resto del pa¨ªs, en Falfurrias siguen apareciendo cada semana cad¨¢veres de inmigrantes. A veces se ven aves volando en c¨ªrculos sobre alg¨²n rancho, que alejan la esperanza de aquellos que se acercan con agua a la zona con la ilusi¨®n de encontrar con vida a los que han logrado cruzar la frontera.

Es tierra agreste, una que no perdona, que los sepulta bajo el apelativo de ¡°restos desconocidos¡±, sin memoria y sin futuro.