Detenidos m¨¢s de 60 polic¨ªas turcos acusados de espiar a Erdogan

Al menos 67 oficiales de polic¨ªa, que participaban en una investigaci¨®n sobre presunta corrupci¨®n en el Gobierno, han sido detenidos durante la madrugada y la ma?ana del martes en Turqu¨ªa bajo sospecha de espionaje y de realizar grabaciones ilegales, seg¨²n ha informado la Oficina de la Fiscal¨ªa de Estambul.

La mayor¨ªa de los detenidos este martes son altos cargos, incluidos dos exjefes de la Unidad Antiterrorista de Estambul, y se trata de polic¨ªas que formaban parte del caso de supuesta corrupci¨®n que sali¨® a la luz en diciembre pasado, forz¨® la dimisi¨®n de cuatro ministros y lleg¨® a salpicar al propio jefe de Gobierno, Recep Tayyip Erdogan.

Las redadas de este martes, realizadas en 22 provincias del pa¨ªs, responden a dos casos diferentes lanzados por la fiscal¨ªa. En uno se busca a 76 oficiales, de los que 52 han sido detenidos, por presuntamente inventarse una falsa investigaci¨®n sobre un supuesto grupo terrorista, llamado selam-tevhid, para as¨ª aprovechar y pinchar los tel¨¦fonos de Erdogan, varios ministros y el jefe de los servicios de Inteligencia. En el segundo, otros 39 polic¨ªas est¨¢n acusados de realizar grabaciones ilegales a diputados, periodistas y jueces, entre otras personas, y al menos 15 de estos agentes han sido apresados este martes.

Desde mediados de diciembre y durante varios meses, fueron apareciendo en internet toda una serie de grabaciones que supuestamente involucraban a miembros del Gobierno en casos de sobornos, fraude y operaciones ilegales. En una de estas grabaciones, se pod¨ªa escuchar a Erdogan presuntamente discutiendo con uno de sus hijos c¨®mo ocultar una cantidad que pod¨ªa llegar a 700 millones de euros. Erdogan siempre ha negado que las conversaciones sean reales, y la veracidad de las grabaciones no se ha podido demostrar.

Adem¨¢s, el primer ministro y otros miembros del Gobierno han acusado a la red del cl¨¦rigo islamista Fetul¨¢ Gulen, residente en Estados Unidos desde 1999, de estar detr¨¢s del esc¨¢ndalo de corrupci¨®n con el objetivo de da?ar al Ejecutivo. Gulen es un antiguo aliado de Erdogan pero desde 2011 sus posturas se han ido alejando.

Muchos en Turqu¨ªa creen que los gulenistas ocupan cargos de responsabilidad en las fuerzas de seguridad, en la Judicatura y en los Servicios de Inteligencia. Y, de hecho, desde diciembre el Gobierno ha lanzado toda una serie de purgas mediante las que miles de polic¨ªas, fiscales y jueces, muchos de ellos involucrados en la investigaci¨®n sobre el esc¨¢ndalo, han sido apartados de sus puestos.

Erdogan, que previsiblemente ser¨¢ elegido presidente en las elecciones previstas para el 10 de agosto, se ha referido a la supuesta presencia de seguidores de Gulen en estos cuerpos como a ¡°un Estado paralelo¡± dentro del Estado, algo que el cl¨¦rigo y sus seguidores siempre han negado y que el a¨²n primer ministro se ha propuesto desmantelar.

El pasado domingo, en conversaciones con periodistas en su avi¨®n oficial, Erdogan revel¨® la creaci¨®n de un nuevo puesto en la Judicatura, que la prensa turca ha dado en llamar ¡°s¨²per jueces¡±, para que sean quienes administren el caso legal que se va a lanzar contra la red de Gulen.