Una reuni¨®n con poco que ofrecer

El presidente Barack Obama ha convocado este viernes a sus colegas de El Salvador, Guatemala y Honduras en el Despacho Oval para hablar cara a cara de la crisis creada por las decenas de miles de menores que en los ¨²ltimos meses han llegado, solos, hasta la frontera de Estados Unidos. Obama tambi¨¦n ha involucrado en la b¨²squeda de la soluci¨®n a M¨¦xico, con cuyo presidente, Enrique Pe?a Nieto, mantuvo una conversaci¨®n telef¨®nica este jueves, un d¨ªa antes de la reuni¨®n.

La cita entre Obama y sus colegas centroamericanos se celebra despu¨¦s de insistentes llamamientos de la Casa Blanca a los pa¨ªses de origen para que frenen el flujo de esta emigraci¨®n infantil, plagada de peligros durante el largo periplo y repleta tambi¨¦n de incertidumbres legales a su t¨¦rmino.

Y tiene como antesala la frustraci¨®n expresada por los presidentes visitantes, el salvadore?o Salvador S¨¢nchez Cer¨¦n, el guatemalteco Otto P¨¦rez Molina y el hondure?o Juan Orlando Hern¨¢ndez, por lo que consideran un incumplimiento de promesas de apoyo a la lucha contra el crimen transnacional y por el desarrollo socioecon¨®mico mediante la Iniciativa de Seguridad Regional de Centroam¨¦rica (CARSI).

Como ¡°casi una burla¡±, calific¨® el presidente hondure?o el jueves, el primer d¨ªa de visita oficial a Washington de los mandatarios, la iniciativa que desde 2008 ha comprometido seg¨²n la Casa Blanca 651 millones de d¨®lares, pero que los gobiernos afectados aseguran que no est¨¢n siendo liberados.

¡°Lamentablemente el CARSI no funcion¨®, los recursos comprometidos no llegaron¡±, corrobor¨® P¨¦rez Molina quien, durante su discurso el jueves ante la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA), pidi¨® que ¡°as¨ª como se impuls¨® un Plan Colombia, un Plan M¨¦rida, se pueda lograr tambi¨¦n un impulso para un Plan Centroamericano buscando la paz y la prosperidad de nuestros pa¨ªses¡±.

Pero Obama tiene poco nuevo que ofrecer en materia de respuestas propias a sus colegas centroamericanos este viernes, una cita que la Casa Blanca ha calificado meramente de ¡°seguimiento¡± tras los viajes del vicepresidente Joe Biden en junio a Guatemala, los del secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, al mismo pa¨ªs las pasadas semanas y el encuentro de alto nivel que hizo el secretario de Estado, John Kerry, en Panam¨¢ durante la asunci¨®n del presidente Juan Carlos Varela el 1 de julio.

Su petici¨®n al Congreso de 3.700 millones de d¨®lares para atender tanto los desaf¨ªos internos que ha provocado el inusitado flujo de menores ¡ªya son casi 60.0000 desde octubre¡ª como para apoyar con 300 millones programas que mejoren las oportunidades en sus pa¨ªses de origen est¨¢ estancada, como tantas de sus iniciativas, ante una oposici¨®n republicana que se niega a darle un ¡°cheque en blanco¡±, en palabras del presidente de la C¨¢mara de Representantes, John Boehner.

Los republicanos, que dominan la c¨¢mara baja donde han hecho fracasar la propuesta de reforma migratoria aprobada por el Senado un a?o atr¨¢s, han puesto duras condiciones a la liberaci¨®n de fondos.

Entre los puntos m¨¢s controvertidos: la exigencia de que se enmiende la ley bipartidista de 2008 contra el tr¨¢fico humano que prev¨¦ garant¨ªas especiales para menores procedentes de pa¨ªses no colindantes con EE UU.

Los legisladores dem¨®cratas rechazan cualquier cambio a la ley. Algo que tambi¨¦n cuenta con la firme oposici¨®n de los presidentes centroamericanos.

¡°Es el momento para decirle a los tomadores de decisi¨®n en Washington: los ni?os no son delincuentes, son seres humanos vulnerables y el inter¨¦s primario del ni?o tiene que prevalecer, es un tema de derechos humanos¡±, ha zanjado el presidente Hern¨¢ndez.

¡°Lo que le pedimos a EE UU es que a estos ni?os y ni?as se les respeten sus derechos, se lleve el debido proceso, y que tengan la posibilidad de acudir a las instancias legales que corresponde¡±, hab¨ªa declarado poco antes tambi¨¦n el canciller salvadore?o, Hugo Mart¨ªnez.

Los gobiernos centroamericanos cuentan en este aspecto con el apoyo expl¨ªcito adem¨¢s de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA), que el mi¨¦rcoles aprob¨® una declaraci¨®n en la que se destaca la necesidad de que en las pol¨ªticas migratorias que se les apliquen a los menores ¡°se contemple como objetivo principal humanitario el bienestar de las ni?as, ni?os y adolescentes migrantes no acompa?ados y el pleno respeto a sus derechos humanos¡±.

Los republicanos entretanto exigen tambi¨¦n el env¨ªo a la frontera de m¨¢s efectivos de la Guardia Nacional, tal como ya lo orden¨® esta semana el gobernador de Texas, Rick Perry. Todo ello pese a que los agentes fronterizos han reiterado que la seguridad no es el problema en esta crisis, puesto que los peque?os que llegan los buscan para entregarse, convencidos por los coyotes de que tendr¨¢n derecho a un ¡°permiso¡±, un falso rumor que se est¨¢ tratando de combatir tanto desde Washington como desde Tegucigalpa, Ciudad de Guatemala y San Salvador. Esta idea republicana tampoco cuenta con la comprensi¨®n centroamericana.

¡°?Qu¨¦ se ha ganado con todo este endurecimiento de controles migratorios en la frontera sur?¡±, ha preguntado la canciller hondure?a, Mireya Ag¨¹ero de Corrales. ¡°Si EE UU hubiera decidido dar el 10% de lo que ha dado al endurecimiento de sus medidas migratorias a programas sociales, de creaci¨®n de empleo o de apoyo a las maquilas (en Centroam¨¦rica) la historia ser¨ªa distinta¡±.

P¨¦rez Molina lo concret¨® en cifras: ¡°EE UU est¨¢ invirtiendo casi 20.000 millones en la frontera, en todo lo que significa la seguridad, y yo dec¨ªa que con un 10% de esto (2.000 millones) que se fuera para Centroam¨¦rica, estoy seguro que los resultados ser¨ªan mucho mejor tanto para nosotros como para EE UU porque se parar¨ªa ese flujo de migraci¨®n, ojal¨¢ esto pueda estar en la mesa de discusi¨®n¡±, declar¨® a periodistas.

Pero los problemas de Obama no acaban siquiera ah¨ª. La partida que los republicanos est¨¢n barajando ¡ªsi se escuchan sus demandas¡ª no ser¨ªa superior a los 1.500 millones de d¨®lares, cifra muy alejada de la solicitada por la Casa Blanca. La contraoferta trabajada por los dem¨®cratas en el Senado tambi¨¦n ser¨ªa 1.000 millones inferior a lo pedido por el presidente.

Las posiciones de los legisladores de uno y otro bando son dif¨ªcilmente acomodables, m¨¢s a¨²n si se tiene en cuenta el historial de antagonismo que ha caracterizado el Congreso los ¨²ltimos a?os y que quedan muy pocos d¨ªas de negociaci¨®n antes de que el Capitolio cuelgue el cartel de "cerrado por vacaciones", en agosto.

La gran duda por tanto es qu¨¦ de nuevo puede decirle Obama a sus colegas centroamericanos cuando se re¨²nan a puerta cerrada y que les pueda convencer de su compromiso para lograr junto con los pa¨ªses centroamericanos, como ha se?alado el canciller salvadore?o Mart¨ªnez, ¡°generar oportunidades en los lugares de origen de la poblaci¨®n migrantes¡± con el objetivo de que ¡°la migraci¨®n sea una opci¨®n, no una obligaci¨®n¡±.

Antes de la reuni¨®n, Obama llam¨® a su hom¨®logo mexicano, Pe?a Nieto. Los presidentes, seg¨²n difundieron los gabinetes de prensa de uno y otro pa¨ªs, acordaron analizar los mecanismos para afrontar la crisis de los migrantes menores y sumar esfuerzos con los pa¨ªses centroamericanos.?