El misterio de las bombas de Chile sigue sin resolver
Un total de 26 ataques se han registrado solo en lo que va del a?o El caso muestra la fragilidad de los servicios de inteligencia del pa¨ªs
Un problema inesperado y complejo se ha cruzado en las prioridades del Gobierno de Michelle Bachelet, que nada tiene que ver con su agenda de reformas: el rebrote de los atentados con explosivos en Santiago, atribuidos a grupos antisistema.
El primero de los ataques, con el que se inaugur¨® lo que en Chile se conoce como caso Bombas, se produjo en un supermercado en 2005. Desde entonces, con periodos de mayor y menor intensidad, los autores no han dejado de actuar. Solo hay dos condenados para los 198 ataques. Aunque hasta la fecha no se han producido muertos ¡ªsalvo el autor de uno de los ataques, a quien le estall¨® su explosivo¡ª el conflicto preocupa a las autoridades. Solo este a?o se han producido 26 ataques. Uno de ellos prendi¨® todas las alarmas del Ejecutivo y la polic¨ªa: se produjo el 13 de julio en una estaci¨®n del metro de Santiago a una hora en que todav¨ªa hab¨ªa pasajeros, algo que nunca antes hab¨ªa sucedido. Una semana despu¨¦s el objetivo era una guarder¨ªa. El artefacto fue desactivado antes de estallar.
Solo dos personas han sido condenadas tras casi 200 acciones
Con este tel¨®n de fondo, el ministro del Interior, Rodrigo Pe?ailillo, particip¨® el lunes en una cumbre sobre seguridad en el Senado que dur¨® cerca de 10 horas y en la que intervinieron las principales autoridades del sistema judicial y penal. El Gobierno aprovech¨® la ocasi¨®n para anunciar una completa reforma del sistema nacional de inteligencia con la intenci¨®n de modernizarlo frente a amenazas como el terrorismo, el crimen organizado y el narcotr¨¢fico.
La preocupaci¨®n del Gobierno por la inteligencia chilena no es casual. El hecho de que en nueve a?os estos grupos no hayan sido desarticulados refleja la deficiente persecuci¨®n policial, los problemas que presenta la Ley Antiterrorista vigente, cuya reformulaci¨®n estudia un grupo de expertos convocados por Bachelet, y el poco fruct¨ªfero trabajo de informaci¨®n.
De las 26 bombas que se han colocado este a?o, cuatro han llegado a estallar. El ¨²ltimo caso se produjo en la madrugada del 22 de julio frente a la iglesia de Santa Ana, sita en el centro de Santiago. El explosivo, de fabricaci¨®n casera, se hallaba dentro de una mochila. La polic¨ªa encontr¨® panfletos de grupos anarquistas que solicitaban la liberaci¨®n de dos chilenos procesados por terrorismo en Espa?a por hacer estallar un artefacto en la Bas¨ªlica del Pilar de Zaragoza en octubre pasado.
Una treintena de grupos anarquistas han reconocido la mitad de los hechos
A petici¨®n del Gobierno de Bachelet, desde la semana pasada hay designado un fiscal con dedicaci¨®n exclusiva a para investigar la sucesi¨®n de ataques. La situaci¨®n preocupa porque, como no hab¨ªa sucedido hasta la fecha, los ataques en 2014 tienen caracter¨ªsticas distintas: se han producido en horarios h¨¢biles y en lugares donde habitualmente transita gente. De acuerdo con estad¨ªsticas policiales, dadas a conocer por el peri¨®dico El Mercurio, de los 198 artefactos instalados desde 2005, un total de 133 han llegado a explotar.
Este a?o ha registrado la tasa m¨¢s alta de incidentes. La mitad de los atentados han sido reconocidos por 31 grupos anarquistas que, hasta ahora, casi siempre hacen explotar las bombas cerca de la medianoche. Muestran preferencia por determinado tipo de objetivos: bancos, cuarteles policiales, de la Gendarmer¨ªa y del Ej¨¦rcito, iglesias y supermercados. En 81 de los casos, los grupos utilizaron extintores y la p¨®lvora negra es el elemento m¨¢s com¨²n. De acuerdo con el mismo informe, de las 11 personas enjuiciadas, s¨®lo una cumple prisi¨®n.
Una conexi¨®n espa?ola
Francisco Solar y M¨®nica Caballero, dos ciudadanos chilenos, fueron procesados en julio?en Espa?a como autores del atentado con bomba cometido contra la Bas¨ªlica del Pilar de?Zaragoza, el 2 de octubre de 2013. Los j¨®venes ya hab¨ªan sido detenidos en Chile en agosto?de 2010 en el marco del llamado caso Bombas y permanecieron cerca de dos a?os en prisi¨®n.?La Fiscal¨ªa los acusaba de pertenecer a un grupo anarquista responsable de una serie de?atentados en Santiago. La Justicia local, sin embargo, no logr¨® acreditar su participaci¨®n en la?trama y, por falta de pruebas, finalmente, quedaron libres junto a otros 12 inculpados.
A comienzos de 2013, ambos viajaron a Espa?a y en octubre se produjo el atentado de?Zaragoza. Un mes despu¨¦s, ambos fueron detenidos en un piso de Barcelona.?
El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco se?al¨® en su auto que planificaban colocar otro?artefacto en el monasterio de Montserrat en Barcelona. De acuerdo con el magistrado, los?detenidos estaban vinculados a FAI / FRI, una organizaci¨®n terrorista de car¨¢cter internacional?"creada a partir de la ideolog¨ªa anarquista insurreccionalista [...] que se resume en la idea de?atacar al Estado en cualquier lugar siempre que sea posible".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.