El Gobierno de M¨¦xico calcula que la econom¨ªa despegar¨¢ en 2015
El Gabinete de Pe?a Nieto plantea un crecimiento de un 3,7% como meta en 15 meses, el triple del resultado de 2013 y que supera por un punto la previsi¨®n proyectada para este a?o
La econom¨ªa mexicana recuperar¨¢ el br¨ªo en 2015. As¨ª lo plantea el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto en sus presupuestos y lo refrendan destacados especialistas. Tras un ciclo de anemia aguda, con constantes revisiones a la baja, las cuentas p¨²blicas mexicanas, que han entrado para su debate en la C¨¢mara de Diputados, las previsiones fijan para el a?o pr¨®ximo un crecimiento del PIB del 3,7%. Este pron¨®stico triplica el resultado de 2013 (un 1,1%), supera en m¨¢s de un punto al que posiblemente cerrar¨¢ 2014, y, sobre todo, rompe el c¨ªrculo de hierro que desde 1981 ha situado el crecimiento medio de la segunda mayor econom¨ªa de Am¨¦rica Latina en un d¨¦bil 2,4%. Con todo, sigue lejos del 5% fijado por Pe?a Nieto como meta de legislatura.
La previsible vuelta de M¨¦xico al campo de batalla econ¨®mico, despu¨¦s de un largo periodo de hibernaci¨®n, se debe en gran parte a la bonanza de Estados Unidos. Su reanimaci¨®n se dejar¨¢ sentir casi inmediatamente en su vecino del sur, con el que comparte una frontera de 3.185 kil¨®metros y que le destina el 80% de sus exportaciones.
El otro detonante, seg¨²n los expertos, procede del aumento del gasto p¨²blico, un revulsivo que este a?o, ante el p¨¦simo arranque, ya ha sido activado y que tiene su concreci¨®n en el plan de infraestructuras (590.000 millones de d¨®lares en cuatro a?os, un 63% de origen p¨²blico). La estrella de este programa es el aeropuerto de la Ciudad de M¨¦xico. La obra, encomendada a los arquitectos Norman Foster y Fernando Romero, pretende erigirse en un s¨ªmbolo de este despegue. ¡°Es un presupuesto para crecer, en un entorno de estabilidad e inclusi¨®n social¡±, ha se?alado el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Con todo, la previsi¨®n sigue lejos del 5% fijado por Pe?a Nieto a inicio de su Gobierno
A diferencia de los dos a?os anteriores, donde la previsi¨®n pec¨® de optimista y se volvi¨® un boomerang contra Videgaray, esta vez el pron¨®stico de crecimiento es considerado por los especialistas como moderado e incluso pesimista. Este sorprendente comedimiento no es ajeno a un factor que protagonizar¨¢ el escenario pol¨ªtico de 2015: las denominadas elecciones intermedias, donde se renuevan nueve gobernadores, 17 c¨¢maras estatales (incluida la del DF) y 1.015 ayuntamientos. Estos comicios, casi a mitad del mandato de Pe?a Nieto, constituyen la prueba de fuego del curso pol¨ªtico y un term¨®metro de la aceptaci¨®n de su agresivo plan de reformas y sus ambiciosas obras p¨²blicas.
¡°En 2015, el crecimiento no solo no estar¨¢ por debajo del 3,7%, sino que muy posiblemente quede por encima, lo que permitir¨¢ al Gobierno hacer ajustes al alza, algo muy beneficioso en un a?o electoral¡±, se?ala Antonio de la Cuesta, director de an¨¢lisis pol¨ªtico del Centro de Investigaciones para el Desarrollo (Cidac), un think tank independiente.
¡°Son unos presupuestos inerciales, que siguen la pauta de las cuentas de 2014, pero con un tinte electoral, sobre todo, en el objetivo de crecimiento, que est¨¢ claramente por debajo de los estudios m¨¢s rigurosos¡±, indica el analista econ¨®mico Samuel Garc¨ªa, director de Arena P¨²blica.
Esta vez el pron¨®stico de crecimiento es considerado por los especialistas como moderado e incluso pesimista
Los efectos expansivos del gran paquete legislativo aprobado en los ¨²ltimos dos a?os no son a¨²n del todo visibles en los presupuestos. Reformas como la energ¨¦tica, que el Gobierno conf¨ªa en que generen entradas masivas de capital y un aumento del PIB de un punto, tardar¨¢n a?os en materializarse por su lentitud t¨¦cnica. La ¨²nica excepci¨®n es la reforma fiscal. Aplicada con rigor sobre el 40% de la poblaci¨®n activa que declara sus ingresos, esta subida en los impuestos ha conducido al mandato presidencial a uno de los puntos m¨¢s bajos de popularidad. La respuesta del Gobierno ha sido prometer que no habr¨¢ nuevos grav¨¢menes en lo que resta de legislatura. Como contrapartida ha permitido un fuerte aumento de la recaudaci¨®n, que en los presupuestos de 2015 se concreta en una subida de ingresos por esta v¨ªa del 10%. Este dinero fresco, junto al aumento del endeudamiento p¨²blico (cifrado en un 3,5% del PIB para el a?o pr¨®ximo), dan un amplio margen de maniobra al Ejecutivo. ¡°Disponen de recursos sin precedentes. Y tienen que decidir si los inyectan a proyectos de mediano y largo plazo que detonen el desarrollo o si los dirigen a un tipo de gasto p¨²blico que acabe manteniendo la maquinaria clientelar en un a?o electoral y engordando una burocracia que, con las reformas y todos sus nuevos organismos, no deja de crecer¡±, indica el experto del Cidac.
Otro problema vinculado con el gasto p¨²blico radica en que el fuerte incremento decidido a primeros de a?o por el Gobierno para reanimar la aletargada econom¨ªa mexicana ha puesto l¨ªmite a crecimientos futuros. El resultado es que la subida para 2015 en este apartado es solo del 1,9%, frente al 9% de este ejercicio. Y los resultados a¨²n generan dudas. ¡°No me preocupa el d¨¦ficit, sino que este incremento del gasto p¨²blico, pese a su robustez, no haya tenido los efectos deseados en 2014. Su impacto ha sido bajo y eso habla de la mala calidad del gasto que se est¨¢ haciendo¡±, indica Gerardo Esquivel, profesor de Econom¨ªa del Colegio de M¨¦xico.
¡°Hay un esfuerzo mayor en inversi¨®n p¨²blica, de ah¨ª que el d¨¦ficit se sit¨²e en un 3,5% del PIB. Eso traiciona el compromiso gubernamental de contenerlo en un 3%, pero no creo que sea un presupuesto electoral. Ah¨ª se exagera. Es realista y con una previsi¨®n de crecimiento conservadora y respetable con los datos de que disponemos ahora. Por encima del 3,7% es especulativo¡±, afirma Ra¨²l Feliz, profesor e investigador del CIDE, un centro acad¨¦mico de ¨¦lite.
Aunque la previsi¨®n de los presupuestos para 2015 concita una aceptaci¨®n general, su pron¨®stico a medio plazo, un 5,2% sostenido a partir de 2017, desata suspicacias. ¡°No es cre¨ªble. Con la bajada del crecimiento poblacional eso no es posible, estaremos en torno al 4% sostenido¡±, sostiene Feliz.
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