Decenas de personas, declaradas fuera de peligro por ¨¦bola en Dallas
Las autoridades temen que la llegada de la gripe dificulte las medidas de prevenci¨®n
Unas cincuenta personas de las aproximadamente 150 que hab¨ªan estado en contacto directo o indirecto con el liberiano fallecido por ¨¦bola en Dallas (Texas), Thomas Eric Duncan, y con las dos enfermeras contagiadas concluir¨¢n este lunes el periodo de 21 d¨ªas de vigilancia, o de cuarentena en algunos casos, sin que hayan desarrollado la enfermedad, informaron las autoridades sanitarias. La buena noticia coincide con un endurecimiento de las medidas preventivas en todo el pa¨ªs, especialmente en el Estado de Nueva York, el de mayor afluencia de pasajeros procedentes de ?frica Occidental, y con la creaci¨®n por parte del Pent¨¢gono de un equipo militar m¨¦dico expedicionario de 30 personas para responder de urgencia a posibles casos de ¨¦bola que se detecten dentro de la Uni¨®n
¡°No tienen ¨¦bola. El riesgo es cero. Estas personas han pasado un calvario y ahora tienen que ser aceptadas por la comunidad. Necesitan nuestro respeto y nuestro cari?o¡±, dijo en conferencia de prensa el juez Clay Jenkins, el cargo electo de m¨¢s rango en el condado de Dallas. ¡°No hay duda, hoy es un d¨ªa especial. Hemos superado un obst¨¢culo, pero todav¨ªa quedan otros¡±, a?adi¨® el alcalde de Dallas, Mike Rawlings.
Pese a las buenas noticias llegadas de Texas, la histeria y el miedo se han unido al virus como m¨¢ximas preocupaciones de las autoridades federales. Aunque s¨®lo se ha producido un fallecimiento y dos casos diagnosticados, el temor de los ciudadanos se mantiene mientras miembros de la oposici¨®n republicana reclaman al presidente Barack Obama un cierre de fronteras con ?frica Occidental. Un nuevo factor amenaza con empeorar la situaci¨®n: la llegada de la gripe. Los hospitales temen el colapso de muchos servicios de emergencia por la afluencia de enfermos con s¨ªntomas parecidos a los del ¨¦bola en sus primeras etapas (fiebre y dolores corporales).
Entre las personas declaradas fuera de peligro est¨¢n la novia del liberiano fallecido, Louise Troh, su hijo Timothy de 13 a?os y otros dos familiares que viv¨ªan en el mismo apartamento, todas ellas consideradas de m¨¢ximo riesgo por haber estado con Duncan cuando este ya presentaba s¨ªntomas de la enfermedad.Tambi¨¦n est¨¢n a salvo de contagio trabajadores sanitarios que atendieron al liberiano y un vagabundo que viaj¨® en la misma ambulancia que este antes de que fuera esterilizada.
Ejemplos de la ansiedad que rayan ya en la histeria que genera la enfermedad son recogidos todos los d¨ªas por los medios del pa¨ªs
En una nota p¨²blica, Louise Troh declar¨®: "Somos muy felices por que esto se acabe, y muy agradecidos por que ninguno de nosotros haya desarrollado la enfermedad. Hemos perdido mucho, pero conservamos la vida y nuestra fe en Dios. A pesar de que la cuarentena ha terminado, nuestro luto contin¨²a. Por eso, pedimos privacidad para reconstruir nuestra casa, nuestra familia y nuestra vida diaria".
Tambi¨¦n se ha descartado el contagio de la enfermera que manipul¨® muestras del fallecido en el Presbyterian Hospital de Dallas antes de embarcarse en un crucero por el Caribe de la compa?¨ªa Carnival con otras 4.500 personas. La mujer y su compa?ero regresaron este domingo en el barco a Galveston (Texas), donde desembarcaron sin problemas, seg¨²n las autoridades del condado.
Este caso ejemplifica las dificultades de atender supuestos casos de ¨¦bola lejos de los hospitales de referencia o sus ¨¢reas de influencia. Seg¨²n las versiones oficiales conocidas, cuando las autoridades sanitarias de EE UU supieron que la enfermera estaba a bordo del crucero, solicitaron su aislamiento, como medida preventiva, e intentaron su evacuaci¨®n desde Belice, su puerto de destino. Sin embargo, el Gobierno del pa¨ªs centroamericano no permiti¨® que el barco atracara. Lo mismo sucedi¨® en Cozumel (M¨¦xico), otra de las escalas. Las muestras de la enfermera fueron tomadas por un m¨¦dico del barco y evacuadas por un helic¨®ptero de la Guardia Costera de Estados Unidos.
En una carta publicada en las ediciones dominicales del Dallas Morning News y del Forth Worth Star Telegram , Barclay Berdan, presidente de Texas Health Resources, organizaci¨®n que agrupa a 25 hospitales de Texas, entre ellos el Presbyterian Hospital de Dallas, admiti¨® los ¡°errores cometidos en el manejo de esta dif¨ªcil situaci¨®n¡±, sobre todo por no haber sido capaces de haber diagnosticado el ¨¦bola cuando Duncan acudi¨® con los primeros s¨ªntomas. Berdan explic¨® que siguen trabajando para determinar c¨®mo pudieron contagiarse las dos enfermeras que atendieron al ciudadano liberiano fallecido.
El hospital ha entrevistado a los empleados, ha revisado los registros y consultados expertos externos para determinar la causa o causas del contagio, que siguen siendo un misterio. A este respecto, Berdan a?adi¨® en su carta a los peri¨®dicos: "Sobre la base de lo que ya sabemos, puedo decir que muchas de las teor¨ªas y las denuncias que se han recogido en los medios de comunicaci¨®n no se ajustan a los hechos conocidos ni a los testimonios del personal del hospital".
Obama, por su parte, intent¨® el s¨¢bado calmar a la poblaci¨®n. ¡°El ¨¦bola es una enfermedad grave, pero no tenemos una epidemia. Aqu¨ª vivimos 300 millones de personas, y s¨®lo se han diagn¨®sticado tres casos, aunque s¨®lo uno ya sea demasiado. No podemos caer en la histeria y el miedo, porque eso s¨®lo dificultar¨¢ que la gente reciba la informaci¨®n que necesita. La ciencia y los hechos deben ser nuestra gu¨ªa¡±, proclam¨® Obama.
El l¨ªder de la Casa Blanca record¨® que, seg¨²n los expertos, aislar ?frica Occidental, donde el virus ha matado a m¨¢s de 4.500 personas, no har¨ªa sino agravar el problema: ¡°Intentar cerrar una regi¨®n entera, aunque eso fuera posible, solo empeorar¨ªa la situaci¨®n¡±. Obama insisti¨® en que la enfermedad no se transmite por el aire, ni se contrae por ir en el autob¨²s o en el avi¨®n. ¡°S¨®lo se produce el contagio a trav¨¦s del contacto directo con fluidos corporales¡±, enfatiz¨®. Para sustentar sus palabras, el mandatario record¨® que ¨¦l mismo se hab¨ªa reunido con uno de los enfermos supervivientes del ¨¦bola. ¡°Y me encuentro bien¡±, dijo.
La temporada de vacunaci¨®n contra la gripe comienza en noviembre. El mayor n¨²mero de casos suele concentrase en enero y febrero. Seg¨²n el Centro de Prevenci¨®n de Enfermedades (CDC, por su siglas en ingl¨¦s) cada a?o se registran unas 200.000 hospitalizaciones. La cifra de fallecidos presenta tremendas oscilaciones, con un m¨ªnimo de 3.000 y un m¨¢ximo de 40.000. Pero el miedo es libre, y los casos de personas sanas o como mucho con gripe que acuden a los hospitales temerosas de padecer ¨¦bola se cuentan por decenas.
Ejemplos de la ansiedad rayana con la histeria que genera la enfermedad son recogidos todos los d¨ªas por los medios del pa¨ªs. El consejo escolar de un centro de primaria del Estado de Maine ha obligado a una de sus docentes a permanecer bajo cuarentena durante tres semanas simplemente porque hab¨ªa viajado a Dallas. En otro caso parecido, la Universidad de Siracusa anul¨® la conferencia de un fotoperiodista de The Washington Post, Michel de Cille, porque en septiembre estuvo en Liberia cubriendo la crisis del ¨¦bola. El periodista regres¨® a EE UU despu¨¦s de 21 d¨ªas de prevenci¨®n y desde entonces no ha presentado un solo s¨ªntoma. En el Estado de Misisipi, los padres de una escuela se niegan a que sus hijos vayan a clase porque el director de la misma ha viajado recientemente a Zambia, pa¨ªs de ?frica Austral a miles de kil¨®metros de las zonas afectadas por la enfermedad.
¡°Hay mucha ansiedad, y la ¨²nica respuesta contra la ansiedad es informaci¨®n contrastada y formaci¨®n del personal sanitario¡±, declar¨® a Reuters Bruce Hirsch, especialista de enfermedades infecciosas del North Shore University Hospital de Manhasset, en Nueva York. ¡°Hay muchas m¨¢s posibilidades de morir por no haberse vacunado contra la gripe que de ¨¦bola¡±, a?adi¨® a la misma agencia Sampson Davis, del Meadowlands Hospital Center de Secaucus, en Nueva Jersey.
Estas informaciones se producen poco despu¨¦s de que Obama, ante la presi¨®n pol¨ªtica que estaba soportando, nombrara al abogado Ron Klein como zar contra el ¨¦bola. El presidente, que recientemente anunci¨® el env¨ªo de 4.000 soldados a las zonas afectadas de ?frica, tiene previsto solicitar al Congreso de Estados Unidos m¨¢s ayuda econ¨®mica contra la epidemia. En este sentido, el primer ministro brit¨¢nico pidi¨® el s¨¢bado elevar a 1.276 millones de d¨®lares la contribuci¨®n de la UE (hasta el momento s¨®lo se ha dispuesto de 638) y enviar otros 2.000 sanitarios. Los ministros de Exteriores europeos tienen previsto reunirse este lunes para abordar la crisis.
La agencia de ayuda internacional Oxfam, que trabaja en las zonas m¨¢s afectadas por el ¨¦bola, lanz¨® este domingo un mensaje de socorro. La ONG ha pedido a los ministros la Uni¨®n Europea que env¨ªen soldados a la zona para impedir que el ¨¦bola se convierta en ¡°el desastre humanitario definitivo de esta generaci¨®n¡±. ¡°Estamos en el ojo de la tormenta y no podemos dejar que el miedo nos paralice. La velocidad y la escala de la intervenci¨®n deben ser sin precedentes y s¨®lo un esfuerzo mundial coordinado ser¨¢ capaz de detener la infecci¨®n", advirti¨® Mark Goldring, director de Oxfam, que pidi¨® expresamente a Italia, Australia y Espa?a que env¨ªen tropas.
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