Miles de personas piden en Burkina Faso el fin del poder de Compaor¨¦
La oposici¨®n pol¨ªtica y los sindicatos salen a la calle contra la reforma de la Constituci¨®n
Decenas de miles de personas salieron este martes a las calles de Uagadug¨², la capital de Burkina Faso, en una multitudinaria e hist¨®rica manifestaci¨®n convocada por la oposici¨®n para exigir al Gobierno que paralice la reforma del art¨ªculo 37 de la Constituci¨®n, una modificaci¨®n que permitir¨ªa al actual presidente, Blaise Compaor¨¦, quien ya lleva 27 a?os en el poder, volver a presentarse a las elecciones previstas para el pr¨®ximo a?o 2015. Esta demostraci¨®n de fuerza, que ha acabado con enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden y decenas de heridos, se produce a tan solo dos d¨ªas de que dicho proyecto de ley sea votado en el Parlamento, lo que est¨¢ previsto para el jueves 30.
Levantamiento de barricadas, quema de neum¨¢ticos, calles bloqueadas o invadidas por miles de personas, muchas de ellas portando esp¨¢tulas de madera, s¨ªmbolo de la revuelta con el que pretenden ¡°despegar¡± a Compaor¨¦ del poder, e incluso el derribo de una estatua del presidente en Bobo-Dioulasso, la segunda ciudad del pa¨ªs, son las im¨¢genes de una jornada considerada hist¨®rica por la oposici¨®n. El Gobierno, mediante un comunicado, asegura que estas manifestaciones ¡°muestran sin duda la vitalidad de nuestra democracia¡±, pero ha hecho un llamamiento a la calma ¡°para evitar todo acto que comprometa la paz y la estabilidad¡±.
El debate sobre una eventual reforma de la Constituci¨®n para permitir un nuevo mandato del actual presidente no es nuevo y flota en el ambiente desde hace un a?o. Sin embargo, la semana pasada el proceso se aceler¨® cuando el Consejo de Ministros aprob¨® un proyecto de reforma del art¨ªculo 37 que debe ser sometido a la aprobaci¨®n del Parlamento, pero que no necesita ser validado por refer¨¦ndum si obtiene el apoyo de las tres cuartas partes de la C¨¢mara. Dicho proyecto supone ampliar de dos a tres los mandatos presidenciales, lo que permitir¨ªa a Compaor¨¦ presentarse de nuevo. De manera inmediata, la oposici¨®n asegur¨® que se trata de ¡°un golpe de Estado constitucional¡± y anunci¨® el inicio de una campa?a de desobediencia civil que ha tenido una respuesta ciudadana nunca antes vista.
La oposici¨®n asegura que m¨¢s de un mill¨®n de personas se concentraron en las arterias principales de Uagadug¨² bajo el lema ¡°No al cambio constitucional¡±. Otras ciudades del pa¨ªs, como Bobo-Dioulasso, Kaya o Ouahigouya, vivieron marchas similares, lo que condujo a los principales l¨ªderes opositores a calificar de ¡°¨¦xito absoluto¡± la jornada de movilizaci¨®n. Z¨¦phirin Diabr¨¦, presidente de Uni¨®n por el Progreso y el Cambio (UPC), principal partido de oposici¨®n, asegur¨® que ¡°es ahora o nunca, este es el ¨²ltimo aviso al poder¡±, lanzando un ultim¨¢tum al Gobierno para que retire el proyecto de ley, mientras que B¨¦n¨¦wend¨¦ Stanislas Sankara, l¨ªder del sankarismo, avanz¨® que ¡°este es el fin de Blaise Compaor¨¦¡±. Los incidentes continuaron durante toda la noche.
El actual presidente lleg¨® a la Jefatura de Estado en 1987 tras dar un golpe de Estado y asesinar a Tom¨¢s Sankara, conocido como el Ch¨¦ Guevara africano, quien hab¨ªa puesto en marcha una aut¨¦ntica revoluci¨®n de corte nacionalista y de izquierdas en su pa¨ªs. Con el paso de los a?os, Compaor¨¦ se fue consolidando como uno de los grandes aliados de Francia, la expotencia colonial, en la regi¨®n y asumiendo el papel de mediador, casi nunca imparcial, en los diversos conflictos que han tenido lugar en ?frica occidental, con los casos de Costa de Marfil y Mali como mejores y ¨²ltimos ejemplos. Sin embargo, Burkina Faso, un pa¨ªs de algo m¨¢s de 16 millones de habitantes, no ha conseguido despegar econ¨®micamente y se encuentra entre los m¨¢s pobres del mundo, con altos ¨ªndices de corrupci¨®n, analfabetismo y pobreza.
Compaor¨¦ ha podido seguir en el poder gracias a sucesivas reformas constitucionales que le permit¨ªan concurrir una y otra vez a unas elecciones que ha ganado siempre con solvencia, aunque bajo sospecha de fraude. Sin embargo, por primera vez se ha topado con un enorme rechazo ciudadano que pretende frustrar su intenci¨®n de seguir cinco a?os m¨¢s al frente del pa¨ªs. El ambiente es de m¨¢xima tensi¨®n en Burkina Faso. La oposici¨®n sigue movilizada y activa en las calles y ha hecho un llamamiento a los ciudadanos a bloquear los accesos al Parlamento el jueves para impedir la votaci¨®n. Este mi¨¦rcoles ha sido el turno de los sindicatos con una jornada de huelga general.
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