Obama firma una ley que sanciona a altos funcionarios de Venezuela

Un d¨ªa despu¨¦s de dar el primer paso para restablecer plenas relaciones diplom¨¢ticas con Cuba, su contrincante de siempre en la regi¨®n, Estados Unidos coloc¨® a Venezuela en la posici¨®n de heredar la posta. Lo hizo posible el presidente Barack Obama al firmar este jueves la Ley de Defensa de los Derechos Humanos y la Sociedad Civil de Venezuela 2014, aprobada la semana pasada por el Congreso, que impone sanciones contra funcionarios del Gobierno de Nicol¨¢s Maduro considerados responsables de violaciones de derechos humanos en las protestas opositoras suscitadas entre febrero y junio.

En respuesta, Maduro cambi¨® el tono laudatorio con el que celebr¨® el mi¨¦rcoles desde Argentina, donde asist¨ªa a la Cumbre del Mercosur, el hist¨®rico acuerdo entre La Habana y Washington por uno mucho m¨¢s frontal. En seis trinos de su cuenta de Twitter resumi¨® la postura de Caracas: son ¡°medidas insolentes¡± las tomadas por Estados Unidos porque han sido ¡°rechazadas en el pa¨ªs y en el continente¡± y subestiman ¡°la fuerza y la conciencia del pueblo venezolano¡±.

No dej¨® de notar el gobernante venezolano en sus comentarios la paradoja de que la r¨²brica de Obama iniciara ¡°una nueva etapa de agresiones a la patria de Bol¨ªvar¡± un d¨ªa despu¨¦s de la hist¨®rica capitulaci¨®n del r¨¦gimen castrista. En esa misma l¨ªnea se expres¨® el canciller Rafael Ram¨ªrez en la red social. ¡°Estamos obligados a movilizarnos y defendernos¡± y acus¨® ¡°a la extrema derecha venezolana¡± de dar ¡°al imperialismo norteamericano un vergonzoso apoyo para agredir a la patria¡±. De momento Caracas parece no rehuirle al papel que deja vacante su aliada Cuba y ha aceptado el reto que plantea Washington con esta medida.

Este acuerdo se hizo posible justo cuando el Partido Dem¨®crata perdi¨® el control del Senado en las elecciones de noviembre y entendi¨® que era el momento de dejar una impronta en los dos ¨²ltimos a?os de mandato de Obama en varios frentes. El Senado -que no pasar¨¢ a control republicano hasta principios de enero- aprob¨® el lunes 8 la ley y a los dos d¨ªas la C¨¢mara de Represenantes -que seguir¨¢ bajo dominio republicano- hizo lo mismo.

El gesto hacia Cuba es el reconocimiento del fracaso del embargo, pero el endurecimiento mostrado hacia los herederos del fallecido presidente Hugo Ch¨¢vez es tambi¨¦n la prueba de que est¨¢n dispuestos a ensayar nuevas estrategias para tratar de aislar a gobiernos abiertamente hostiles.

En un esfuerzo por tratar de construir un relato para nuclear a sus seguidores, Maduro ha tratado de convertir esta decisi¨®n en la versi¨®n actual del hist¨®rico embargo que sancion¨® Washington contra La Habana hace medio siglo. Est¨¢ por verse si logra o no su cometido de comunicar que, m¨¢s que una medida que afecta a funcionarios de su Gobierno, se trata de una agresi¨®n a la naci¨®n. Por lo pronto ha tenido un ¨¦xito relativo en dividir a la oposici¨®n. Por iniciativa de la mayor¨ªa chavista, el martes la Asamblea Nacional introdujo un proyecto de acuerdo para rechazar las medidas tomadas por el Senado estadounidense.

Antes de que el texto se leyera y debatiera en la plenaria fue discutido por los parlamentarios de la Comisi¨®n Permanente de Pol¨ªtica Exterior, Soberan¨ªa e Integraci¨®n. Dos diputados contrarios al Gobierno ¡ªlos socialdem¨®cratas William D¨¢vila y Morel Rodr¨ªguez¡ª respaldaron la moci¨®n chavista. A la plenaria posterior solo se presentaron, y votaron en contra los asamble¨ªstas contrarios a la propuesta, para evitar que quedaran en evidencia las fracturas de la alianza opositora cobijada bajo la plataforma de la Mesa de la Unidad.

El martes la Asamblea Nacional introdujo un proyecto para rechazar las medidas de EE UU

La decisi¨®n llega tambi¨¦n en un d¨ªa particularmente negro para el Gobierno. La agencia Fitch baj¨® la calificaci¨®n financiera de Venezuela de ¡°B¡± a ¡°CCC¡±, una categor¨ªa que designa a los pa¨ªses para los que la suspensi¨®n de pagos es una posibilidad real.

La firma de Obama estaba prevista desde la aprobaci¨®n de la norma la semana pasada, pero no llega en un contexto cualquiera. Adem¨¢s del anuncio del progresivo restablecimiento de las relaciones diplom¨¢ticas con Cuba, Washington ha rechazado de momento adoptar nuevas represalias contra Rusia por su papel desestabilizador en Ucrania.

La decisi¨®n de Obama evidencia la p¨¦rdida de paciencia de su Gobierno con Caracas y supone un nuevo deterioro de las tensas relaciones bilaterales. En mayo, Estados Unidos consideraba que imponer sanciones pod¨ªa ser contraproducente en lograr un acercamiento entre el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro y la oposici¨®n. Tras el fracaso de las conversaciones apadrinadas por el Vaticano y los Gobiernos de Brasil, Colombia y Ecuador, en julio Washington anunciaba la revocaci¨®n o denegaci¨®n de visados a un grupo de altos funcionarios venezolanos considerados ¡°responsables o c¨®mplices¡± de violaciones de derechos humanos en las protestas.

¡°No hemos permanecido en silencio, ni lo haremos, frente a acciones del Gobierno venezolano que violan los derechos humanos, las libertades fundamentales y las normas democr¨¢ticas¡±, afirm¨® la semana pasada el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, tras la aprobaci¨®n de la norma en el Capitolio.

No se conoce la lista completa de los afectados, pero la semana pasada el senador republicano Marco Rubio public¨® algunos nombres. Entre ellos destacan el exdirector de Contrainteligencia Militar y exembajador en Aruba Hugo Carvajal, la fiscal general de la Rep¨²blica Luisa Ortega D¨ªaz, los gobernadores chavistas Francisco Rangel G¨®mez, Jos¨¦ Gregorio Vielma Mora, Alexis Ram¨ªrez y Henry Rangel Silva, el extitular de Interior, Justicia y Paz Miguel Rodr¨ªguez Torres, as¨ª como la plana mayor de la Guardia Nacional Bolivariana, responsables de reprimir las manifestaciones.

En tono de iron¨ªa otros prominentes funcionarios de Gobierno reclamaron que los incluyeran entre los sancionados. Otros, como la ministra de Asuntos Penitenciarios Iris Valera, plantearon incluso una quema masiva de las visas de turistas necesarias para ingresar a territorio estadounidense en plazas p¨²blicas del pa¨ªs.