Indonesia ejecuta a seis condenados por narcotr¨¢fico

Holanda y Brasil han retirado temporalmente a sus embajadores en Indonesia despu¨¦s de que dos de sus ciudadanos fueran ejecutados a medianoche del s¨¢bado (hora local) por sendos delitos de narcotr¨¢fico. Despu¨¦s de una moratoria de varios a?os en los que no se aplic¨® la pena de muerte, el Gobierno de Yakarta endureci¨® sus leyes en 2013. Adem¨¢s del holand¨¦s Ang Kiem Soei, y el brasile?o Marco Archer Cardoso Moreira, han sido fusilados cuatro ciudadanos con pasaporte de Malawi, Nigeria, Vietnam y la propia Indonesia. Seg¨²n el fiscal general indonesio, Muhammad Prasetjo,las autoridades esperan que las ejecuciones "tengan un efecto disuasorio". El presidente, Joko Widodo, ha justificado las muertes ¡°porque estos delincuentes destrozan la vida de muchas personas¡±.

Para las autoridades holandesas, antigua potencia colonial en Indonesia, la ejecuci¨®n ha supuesto un duro golpe y crea un conflicto diplom¨¢tico aumentado por el turbulento pasado com¨²n. La familia del holand¨¦s ejecutado, que ten¨ªa cuatro hijos, reside en Utrecht, y no se les ha permitido tocar el cad¨¢ver antes de su cremaci¨®n. El ministerio de Exteriores intent¨® paralizar todas las ejecuciones, y el primer ministro, Mark Rutte, intercedi¨® por el condenado. En un ¨²ltimo intento, se pidi¨® la mediaci¨®n del rey Guillermo Alejandro. Su conversaci¨®n con el presidente Widodo no sirvi¨® para que cambiara de opini¨®n. Ang Kiem, de 62 a?os, y origen chino, naci¨® en la antigua colonia holandesa de Nueva Guinea. Estaba acusado de fabricar patillas de ¨¦xtasis, y su abogado consigui¨® reunir cerca de un millar de firmas en favor de su liberaci¨®n. Llevaba desde 2003 en el corredor de la muerte. ¡°La pena de muerte es un castigo inhumano y salvaje que niega la dignidad humana¡±, reza el comunicado oficial de La Haya, publicado tras el fusilamiento.

Para Brasil, la ejecuci¨®n ha sido igualmente traum¨¢tica. Marco Archer Cardoso, de 53 a?os, ha sido el primero de sus nacionales ajusticiado en el extranjero, y fue condenado por haber intentado entrar en Indonesia con 13,4 kilos de coca¨ªna escondidos en tubos de un ala delta. Dilma Rousseff, la presidenta brasile?a habl¨® asimismo con Widodo, pero la decisi¨®n ya estaba tomada, informa Marina Rossi desde Sao Paulo. En una nota divulgada tras la muerte de Cardoso, la presidenta asegur¨® ¡°respetar la soberan¨ªa del sistema judicial indonesio¡± y admiti¨® ¡°la gravedad del delito¡±, pero se mostr¨® ¡°igualmente indignada¡±.

Amnist¨ªa Internacional hab¨ªa pedido a Indonesia que paralizara las ejecuciones, y aboliera la pena de muerte. El pa¨ªs es la mayor econom¨ªa del Sureste de Asia y recuper¨® su independencia de Holanda en 1949 tras una guerra sangrienta. Es el mayor pa¨ªs musulm¨¢n del mundo y hay movimientos secesionistas en varias provincias. Joko Widodo,el presidente, era un antiguo empresario y gobernador de Yakarta y es el primero en llegar al cargo sin salir de las filas del Ej¨¦rcito. Ha manifestado que no piensa ceder en su lucha contra el narcotr¨¢fico que pasa, de momento, por aplicar la pena capital.