Chipre permite a la Armada rusa usar sus puertos contra el terrorismo
El acuerdo naval irrita a Washington y Bruselas "Ninguno de nuestros socios europeos se preocupan de la amenaza de Turqu¨ªa", se defiende el presidente chipriota
Que bancos rusos como Sberbank y VTB, ambos sancionados por la UE con restricciones de cr¨¦dito por el conflicto de Ucrania, est¨¦n operando activamente en Chipre podr¨ªa ser s¨®lo un peque?o detalle que revela las m¨¢s que fluidas relaciones entre Mosc¨² y Nicosia. Pero la firma de un acuerdo naval ruso-chipriota, en teor¨ªa para facilitar operaciones antiterroristas y contra la pirater¨ªa de la Armada rusa desde el Mediterr¨¢neo oriental, es otra cuesti¨®n bien distinta, ya que apuntala un emergente frente prorruso en el seno de la UE, tras las claras se?ales emitidas por el nuevo Gobierno de Atenas sobre la inconveniencia de las sanciones a Mosc¨², y el evidente desmarque de Hungr¨ªa. Bruselas y Washington siguen con preocupaci¨®n estas muestras de rebeld¨ªa europea.
¡°Esto no tiene por qu¨¦ inquietar a nadie¡±, dijo el mi¨¦rcoles sobre el acuerdo naval, que abre los puertos de la isla a la Armada rusa, el presidente Vlad¨ªmir Putin ante su hom¨®logo chipriota, Nikos Anastasiadis, de visita en Mosc¨². Anastasiadis intent¨® restar importancia al acuerdo de cooperaci¨®n militar ¡ªlos dos pa¨ªses firmaron diez m¨¢s, en ¨¢mbitos como econom¨ªa, turismo e investigaci¨®n¡ª recordando que los barcos rusos siempre han tenido abiertas las puertas de la isla. ¡°Algunos amigos nuestros [socios de la UE] est¨¢n mostrando se?ales de preocupaci¨®n [por el acercamiento a Rusia], pero ninguno sobre la amenaza de Turqu¨ªa¡±, que ocupa la mitad norte de la isla desde 1974, dijo el chipriota tras reunirse con su hom¨®logo, a quien agradeci¨® su apoyo en la ¡°cuesti¨®n chipriota¡±, es decir, las arduas negociaciones para hallar una soluci¨®n a la divisi¨®n del pa¨ªs.
Mosc¨² juega ante Chipre la carta de la dependencia econ¨®mica, cuando no el papel de benefactor. Las inversiones rusas en la isla suponen el 80% de la inversi¨®n extranjera, subray¨® Putin en su discurso, por no hablar de los 600.000 turistas rusos que visitan Chipre cada a?o (o las operaciones de blanqueo de dinero en la isla, hasta 189.000 millones de euros entre 1994 y 2011, seg¨²n la ONG estadounidense Global Financial Integrity).
Rusia parece querer cosechar voluntades entre los socios de la UE para quebrar la respuesta de las sanciones
Pero entre Mosc¨² y Nicosia hay otro cord¨®n umbilical, el ¡°pr¨¦stamo de estabilizaci¨®n¡± de 2.500 millones de euros que el Kremlin concedi¨® a Chipre en 2011 ¡ªpara evitar un rescate que result¨® inevitable dos a?os despu¨¦s¡ª, y cuyas condiciones Rusia ha mejorado esta misma semana, al rebajar el inter¨¦s anual del 4,5% al 2,5% y aumentar el periodo de carencia a 2018-2021.
Que Rusia parece querer cosechar voluntades entre los socios de la UE para quebrar la respuesta de las sanciones, parece evidente. Pero el acuerdo de cooperaci¨®n militar obedece tambi¨¦n a intereses estrat¨¦gicos unilaterales. Tras cuatro a?os de guerra civil, el Kremlin se ha quedado sin su ¨²nica base naval en el Mediterr¨¢neo, la de la ciudad siria de Lataquia, de ah¨ª la importancia de los puertos chipriotas (si bien los de mayor calado est¨¢n en la parte ocupada de la isla). Este acuerdo contempla la posibilidad de que buques de guerra y cazas rusos usen aeropuertos y puertos chipriotas "durante misiones humanitarias", sea eso lo que fuere. La presencia de dos bases del Ej¨¦rcito brit¨¢nico en Chipre complica a¨²n m¨¢s un panorama muy 'militarizado': fuerzas de ocupaci¨®n en el norte, las turcas; el Ej¨¦rcito chipriota, el contingente brit¨¢nico y, a partir de ahora, barcos y cazas rusos. El camarote de los hermanos Marx, en versi¨®n insular y castrense.
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