Washington acusa a la polic¨ªa de Ferguson de discriminaci¨®n racial

Una investigaci¨®n del Departamento de Justicia de Estados Unidos secunda la queja m¨¢s extendida entre los residentes negros de Ferguson: la polic¨ªa y la justicia los discriminan. Tras seis meses de pesquisas, el Gobierno federal ha concluido que los departamentos policial, judicial y penitenciario de ese suburbio de San Luis (Misuri) ejecutan rutinariamente pr¨¢cticas con prejuicios raciales.

La investigaci¨®n se inici¨® tras la muerte en agosto de un negro desarmado de 18 a?os por al menos seis disparos de un polic¨ªa blanco. El caso de Michael Brown desat¨® una ola de protestas en Ferguson propiciadas en gran parte por una ira enquistada en la comunidad afroamericana sobre un supuesto patr¨®n de abusos policiales. En el municipio de 21.000 habitantes en el Medio Oeste de EE UU, la mayor¨ªa de los habitantes son negros, pero los blancos ocupan la estructura pol¨ªtica, policial y educativa.

Pese a representar el 67% de la poblaci¨®n de Ferguson, los negros suponen el 85% de las paradas, el 88% de los casos en que la polic¨ªa emplea la fuerza y el 93% de los arrestos

El Departamento de Justicia ha concluido que entre 2012 y 2014 los agentes policiales violaron rutinariamente los derechos constitucionales de los ciudadanos negros de Ferguson mediante un uso excesivo de la fuerza y paradas de tr¨¢fico injustificadas que ten¨ªan fines recaudatorios, seg¨²n avanz¨® este martes un alto cargo oficial a medios estadounidenses. Est¨¢ previsto que los resultados de la investigaci¨®n se difundan el mi¨¦rcoles.

Tras anunciar sus hallazgos, el Gobierno federal puede iniciar una negociaci¨®n con las autoridades de Ferguson para forzar determinados cambios o, en caso de que fracase, demandar a la ciudad por una violaci¨®n constitucional. En los ¨²ltimos seis a?os, ha efectuado una veintena de investigaciones de derechos civiles en cuerpos policiales en EE UU.

La investigaci¨®n del departamento que dirige el fiscal general Eric Holder es seguramente el mejor instrumento para propiciar cambios palpables en Ferguson. No es un caso excepcional: las tensiones por asuntos raciales entre el Gobierno federal y las autoridades locales han sido una constante en la historia reciente de EE UU. En los a?os 50 y 60, Washington forz¨® a cumplir las leyes de fin de la segregaci¨®n racial a quienes se opon¨ªan.

Tras cientos de entrevistas y revisar 35.000 p¨¢ginas de informes policiales, los investigadores federales determinaron que, pese a representar el 67% de la poblaci¨®n de Ferguson, los negros suponen el 85% de las paradas de tr¨¢fico, el 88% de los casos en que la polic¨ªa emplea la fuerza, el 90% de las citaciones judiciales y el 93% de los arrestos de la ciudad.

Los conductores negros tienen el doble de posibilidades de ser inspeccionados por un polic¨ªa pese a ser menos probable que lleven armas o drogas. Los afroamericanos tambi¨¦n colman la mayor¨ªa de incidentes en que perros de los agentes muerden a ciudadanos, en un inc¨®modo eco de la represi¨®n policial en las marchas de negros a favor de los derechos civiles en los a?os 60.

En el sistema judicial de Ferguson, los afroamericanos tienen menos opciones de que un juez desestime su caso y suponen el 95% de las personas retenidas m¨¢s de dos d¨ªas en la c¨¢rcel. La mayor¨ªa de las ¨®rdenes judiciales son por infracciones menores, como aparcamiento o tr¨¢fico. El fiscal Holder -que visit¨® Ferguson tras la muerte de Brown- critic¨® hace unos meses este sistema por penalizar injustamente a los ciudadanos m¨¢s pobres de la ciudad.

La discriminaci¨®n, concluye la investigaci¨®n, ven¨ªa de arriba: se alimentaba en parte de estereotipos raciales de la c¨²pula. Los investigadores hallaron un correo electr¨®nico de 2008 en una cuenta municipal que aseguraba que Barack Obama no iba a ser presidente mucho tiempo. ¡°Qu¨¦ hombre negro mantiene un trabajo estable durante cuatro a?os¡±, dec¨ªa el mensaje.