Uruguay no recibir¨¢ m¨¢s presos de Guant¨¢namo

El Gobierno de Tabar¨¦ V¨¢zquez anunci¨® que no recibir¨¢ m¨¢s presos de Guant¨¢namo y que interrumpir¨¢ la llegada de refugiados sirios, porque ¡°Uruguay tiene carencias de cultura e infraestructura para acogerlos y necesita planificar mejor ese tipo de operaciones¡±, seg¨²n dijo el ministro de Exteriores Rodolfo Nin Novoa. As¨ª, de los dos traslados de asilados de guerra sirios previstos s¨®lo se completar¨¢ uno.

Con estas decisiones queda marcado un nuevo rumbo en la pol¨ªtica exterior uruguaya y una distancia ante dos iniciativas del expresidente Jos¨¦ Mujica. Al conocerse la noticia, el ahora senador Mujica declar¨® que el actual Gobierno ¡°tendr¨¢ sus razones¡± y atribuy¨® la decisi¨®n de no traer m¨¢s detenidos de Guant¨¢namo a ¡°inconsistencias de la pol¨ªtica norteamericana¡±, sin dar m¨¢s detalles.

Mientras tanto, la adaptaci¨®n de los seis exreclusos ¡ªcuatro sirios, un palestino y un tunecino¡ª a su nueva vida se desarrolla con altibajos y rodeada de la atenci¨®n de la prensa. El sirio Jihad Ahmad Diyad acaba de anunciar una huelga de hambre para reclamar que Estados Unidos se haga cargo de su situaci¨®n y de la llegada de su familia. Diyad, de 43 a?os, quien se niega tambi¨¦n a recibir tratamiento m¨¦dico, ya protagoniz¨® varias huelgas de hambre en la base cubana que le dejaron graves secuelas en su salud.

Las autoridades uruguayas est¨¢n tramitando la llegada de su mujer y sus tres hijos. Fernando Gambera, encargado de relaciones internacionales del sindicato Pit-CNT, afirma que ya est¨¢ preparada una casa para que viva con su familia. ¡°Es un hombre libre, puede hacer lo que quiera. Nosotros no estamos de acuerdo con su decisi¨®n de hacer huelga de hambre pero entendemos que esto es un proceso lento. En estos meses aprendimos que la principal dificultad con estos seis hombres es ganarse su confianza. Son recelosos hacia todos los que se acercan, incluyendo los m¨¦dicos que est¨¢n teniendo muchas dificultades para coordinar todas las terapias que necesitan¡±, asegura Gambera, quien acompa?¨® los primeros pasos de los exreclusos hasta que obtuvieron el estatuto de refugiados y pasaron a la ¨®rbita de la ACNUR.

Tres meses despu¨¦s del traslado, la desconfianza tambi¨¦n prevalece en buena parte de la opini¨®n p¨²blica uruguaya, la oposici¨®n de centro derecha y la prensa.

Los medios locales han destacado que los seis expresos han rechazado ofertas de trabajo en el sector de la construcci¨®n y son exigentes con el respeto de las normas religiosas.

Cuatro de los hombres viven desde su llegada en una casa del barrio montevideano de Palermo, donde pasean con tranquilidad y tienen excelentes relaciones con su vecindario. Despu¨¦s de 12 o 13 a?os de reclusi¨®n todos presentan problemas de salud y aprenden espa?ol con dificultad.

Con la decisi¨®n de detener el traslado de nuevos presos de Guant¨¢namo, el nuevo Gobierno muestra sus dudas sobre la operaci¨®n y sobre la capacidad del pa¨ªs para contribuir al cierre de la c¨¢rcel estadounidense.