¡°Esperamos que se les trate mejor que a nosotros¡±

Henar Guerrero perdi¨® a su hermano Gabriel en el accidente del vuelo JK5022 de Spanair. Gabriel, auxiliar de la compa?¨ªa, falleci¨® junto a otras 153 personas el 20 de agosto de 2008 en uno de los peores accidentes de la aviaci¨®n registrados en Europa. Ahora, tras el siniestro del vuelo GWI9525 en el que han muerto 150 personas, Henar y otros muchos allegados de quienes perecieron en aquella cat¨¢strofe vuelven a estar conmocionados. Reviven esos d¨ªas de infinita tristeza, caos, y desinformaci¨®n por los que ellos pasaron y de los que algunos todav¨ªa no se han recuperado. Por eso, representantes de la Asociaci¨®n de Afectados del Vuelo JK5022 se han puesto en contacto con los familiares de los fallecidos en los Alpes franceses y les han tendido la mano. ¡°Hemos pasado por lo mismo y es importante que sepan que no est¨¢n solos, ni ahora ni despu¨¦s¡±, dice Guerrero.

De momento no lo est¨¢n. Un equipo de psic¨®logos y psiquiatras les asiste en Los Alpes ¨Cdonde se concentran las labores de rescate y donde se han trasladado algunos familiares--, pero tambi¨¦n en Barcelona y en D¨¹seldorf. ¡°La intervenci¨®n psicol¨®gica no mitiga el dolor, porque que duela es l¨®gico; pero nuestra labor es ayudarles a que se relajen, a afrontar lo que ocurre y a aceptar la p¨¦rdida¡±, explica Fernando Chac¨®n, decano del Colegio de Psic¨®logos de Madrid y experto en asistencia en este tipo de situaciones.

¡°Lo que se necesita es apoyo psicol¨®gico, tratamiento y dignidad. Si eso se hace bien la situaci¨®n no se va a solucionar, pero no va a ser m¨¢s grave todav¨ªa¡±, dice Pilar Vera, presidenta de la Asociaci¨®n de Afectados del JK5022. Vera, que perdi¨® a su sobrina aquel 20 de agosto de 2008 y que desde entonces se ha convertido en una de las voces de las v¨ªctimas de cat¨¢strofes en varias organizaciones internacionales, critica la desinformaci¨®n, la mala comunicaci¨®n y las ¡°mentiras¡± que ellos sufrieron. ¡°Mientras est¨¦ en nuestra mano, nadie volver¨¢ a pasar por lo mismo que nosotros. Somos como las sabinas [un ¨¢rbol originario de El Hierro], doblados pero no enterrados¡±, advierte.

Su asociaci¨®n est¨¢ analizando que se cumple el protocolo que marca c¨®mo actuar en este tipo de situaciones. La regulaci¨®n europea determina, por ejemplo, que los allegados deben conocer la informaci¨®n relacionada con el suceso antes de que se haga p¨²blica, que tienen que tener asistencia m¨¦dica y psicol¨®gica y que la compa?¨ªa a¨¦rea y el operador aeroportuario tienen que hacerse cargo de los costes de su trasporte hasta el lugar del accidente. ¡°Esos momentos son terribles, y es importante que quienes est¨¢n sufriendo no se tengan que preocupar de nada, de que no tienen a mano la tarjeta de cr¨¦dito, de que no tienen hotel, de que tienen que buscar transporte¡­ Nadie est¨¢ para eso en esas situaciones¡±, remarca Guerrero.

Vera y Guerrero reclaman respeto para los familiares del GWI9525. ¡°Queremos que nadie pase por lo mismo que nosotros. Eso significa que no sucedan accidentes, pero tambi¨¦n que no se les falte a la dignidad, como se nos falt¨® a nosotros¡±, se?ala la segunda. Avisan que lo que queda por llegar es un proceso complejo y en el que los familiares pasan por un periodo muy vulnerable. Esta semana, el Senado espa?ol, en l¨ªnea con la legislaci¨®n de otros pa¨ªses como Estados Unidos, ha dado luz verde al Estatuto de V¨ªctima que proh¨ªbe a profesionales como abogados o procuradores acercarse a ofrecer sus servicios a quienes hayan sufrido situaciones de este tipo hasta un mes despu¨¦s del suceso.

A los familiares de los 150 fallecidos en Los Alpes les espera un camino largo. El decano del Colegio de Psic¨®logos explica que para afrontar cat¨¢strofes de este tipo es fundamental alg¨²n tipo de ¡°cierre¡± y para el que es necesario que se identifique al familiar como oficialmente fallecido. Algo que, en este caso ser¨¢ lento debido a las condiciones del siniestro. ¡°Esto va a posponer los funerales o las ceremonias de despedida. No olvidemos que estos ritos tienen una funci¨®n psicol¨®gica de cierre¡±, dice.