¡°En Bolivia hay capital humano que emigra en busca de trabajo¡±
La aimara Soledad Chapet¨®n, alcaldesa de El Alto, segunda ciudad de Bolivia, quiere menos ideolog¨ªa y m¨¢s transparencia
Una pedagoga de 34 a?os, menuda y vital, ha remecido la que fuera la plaza fuerte del presidente Evo Morales, la emblem¨¢tica ciudad de El Alto, al alzarse con una indiscutible mayor¨ªa absoluta en las elecciones municipales del domingo pasado. El triunfo cobra mayor significado por la militancia de Soledad Chapet¨®n Tancara en el partido derechista Unidad Nacional (UN), liderado por el empresario Samuel Doria Medina, el que mayor encono genera en las filas del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) y sus dirigentes.
El Alto, a 14 kil¨®metros del centro de La Paz, es la segunda mayor ciudad de Bolivia, con 890.000 habitantes, muchos inmigrantes ind¨ªgenas de comarcas rurales de La Paz, Oruro y Potos¨ª. Su nueva alcaldesa, La Sole, como la llaman los alte?os, es la menor de seis hermanos de una familia aimara. En cuanto llega a la sede de UN se pierde entre sus colaboradores, que la rodean para recibir ¨®rdenes y sugerencias sobre la agenda con los medios y con dirigentes pol¨ªticos y vecinales. Pareciera que todo lo tiene controlado.
Chapet¨®n est¨¢ convencida que la tarea inmediata es la de enfocarse en las necesidades de los vecinos de la ciudad
Relata que ¡°a¨²n estaba en la universidad cuando, por las elecciones de 2004¡±, compar¨® ¡°los programas de gobierno ofrecidos por los partidos pol¨ªticos¡±. ¡°Sin duda, lo que me acerc¨® mucho a UN fue su propuesta que hablaba sobre el valor del capital humano que tiene Bolivia y la generaci¨®n de oportunidades econ¨®micas que debiera dar el Estado a todo boliviano¡±.
¡°Pocas semanas antes mi hermano se fue a Brasil por necesidad laboral y, fue dif¨ªcil soportar el sufrimiento de mi mam¨¢, que ve¨ªa disgregada a su familia. Personalmente estoy convencida de que en Bolivia hay mucho y buen capital humano que lastimosamente tiene que emigrar en busca de trabajo¡±, a?ade.
Sagaz, ante los intentos de sus adversarios de mostrarla ajena al esp¨ªritu revolucionario de los alte?os, Chapet¨®n est¨¢ convencida que la tarea inmediata es la de enfocarse en las necesidades de los vecinos de la ciudad con el mayor ritmo de crecimiento urbano.
¡°Es importante dejar de lado el partido y evitar hablar de temas ideol¨®gicos y pol¨ªticos que nos separan, para unirnos y ponernos a trabajar a favor de todos con una gesti¨®n transparente. Tiene que prevalecer El Alto como prioridad. Aqu¨ª se ha generado una revoluci¨®n hist¨®rica y se ha impulsado la estabilidad econ¨®mica de Bolivia¡±.
Evidentemente frustrado con los resultados de la votaci¨®n del domingo, el presidente Morales ¡ªque hab¨ªa pedido al electorado que no le abandonera y advertido de que no iba a financiar proyectos en alcald¨ªas que quedaran en manos de adversarios¡ª tuvo que reconocer el voto de castigo a la corrupci¨®n de las anteriores autoridades municipales. Pero Morales a¨²n no ha dicho si levantar¨¢ sus amenazas de retirar el apoyo econ¨®mico a El Alto, que hasta 2021 gobernar¨¢ la oposici¨®n.
¡°Administrar un municipio no se limita a distribuir recursos. Del mismo modo, la Gobernaci¨®n departamental tiene responsabilidad en el respaldo econ¨®mico a la salud y a la seguridad. El compromiso m¨ªo es de lograr un ¨®ptimo y eficiente manejo de los recursos de la alcald¨ªa, con total transparencia¡±.
La generaci¨®n de oportunidades econ¨®micas para los alte?os ¡°es uno de los pilares del programa, asumido ahora por todos los vecinos, pues se har¨¢ un efectivo acompa?amiento a las actividades productivas, que en El Alto abarcan desde textiles y tejidos, hasta la industria metalmec¨¢nica y tecnolog¨ªa (se fabrican drones), destinadas a la exportaci¨®n¡±.
Como alcaldesa aspira a administrarla ¡°con mucho trabajo, transparencia, respeto y, como mujer, con un gran componente de sentimiento y sensibilidad¡±.
¡°La seguridad no es s¨®lo cuesti¨®n de polic¨ªas y ladrones. Es un proceso integral que implica a todos los pobladores. Hay que frenar la p¨¦rdida de valores desde la familia y aplicar pol¨ªticas de prevenci¨®n, fomentando la creaci¨®n de guarder¨ªas para los hijos de las trabajadoras y aumentando las auqui utas [casas para los ancianos], donde puedan transmitir sus experiencias culturales y laborales a los j¨®venes¡±, explica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.