La tensi¨®n con Arabia Saud¨ª lleva a Ir¨¢n a cancelar sus vuelos a La Meca

Ir¨¢n ha cancelado este lunes todos sus vuelos para peregrinos a La Meca, la ¨²nica conexi¨®n directa que manten¨ªa con Arabia Saud¨ª. La medida, en protesta por el maltrato a dos adolescentes iran¨ªes por parte de la polic¨ªa saud¨ª en el aeropuerto de Yeddah, constituye el ¨²ltimo gesto de una escalada de tensi¨®n entre los dos pa¨ªses, que se ha acelerado desde que Riad lanzara su Operaci¨®n Tormenta Decisiva contra los rebeldes Huthi de Yemen. Esa intervenci¨®n corre el riesgo de aumentar la presunta implicaci¨®n iran¨ª que desea frenar.

¡°No hay duda de que el caos en Yemen es fruto del ansia de poder de Ir¨¢n y su ambici¨®n de controlar toda la regi¨®n¡±, denuncia el presidente yemen¨ª, Abdrabbo Mansur Hadi, en un art¨ªculo publicado en The New York Times.

Tal es la convicci¨®n no s¨®lo en Arabia Saud¨ª, donde Hadi se ha exiliado, sino en los pa¨ªses de mayor¨ªa sun¨ª de Oriente Pr¨®ximo. Incluso Turqu¨ªa ha lanzado una advertencia a Ir¨¢n al respecto. Los medios de comunicaci¨®n iran¨ªes refuerzan esa imagen cuando califican a los Huthi de ¡°movimiento popular¡± y acusan al Gobierno saud¨ª de querer mantener Yemen como su patio trasero, aunque los portavoces oficiales niegan que les proporcionen ayuda.

Sin embargo, eso es algo que puede cambiar si la crisis sigue polarizando las posturas. La semana pasada Ir¨¢n envi¨® a dos de sus buques de guerra al golfo de Yemen con la excusa de combatir la pirater¨ªa. De momento, las hablillas en las redes sociales sobre la detenci¨®n de agentes iran¨ªes en ese pa¨ªs se han quedado en meros rumores.

El hecho de que los rebeldes sean zayd¨ªes, una rama del islam chi¨ª, no los convierte autom¨¢ticamente en peones de Teher¨¢n. Los Huthi son desde hace mucho tiempo un actor pol¨ªtico en Yemen y, tras una d¨¦cada de enfrentamiento con el Gobierno central, sus apoyos provienen sobre todo de dentro del pa¨ªs, en especial del expresidente Ali Abdal¨¢ Saleh que nunca ha aceptado su retirada del poder bajo la presi¨®n internacional en 2012.

¡°Ir¨¢n ha hecho muy poco en Yemen. Ha habido acusaciones durante a?os pero no pruebas p¨²blicas. Tal vez las tengan los servicios secretos y eso respalde lo que dijo [el secretario de Estado norteamericano, John] Kerry al respecto, pero es imposible comentar sobre ello¡±, explica a EL PA?S sir Richard Dalton, investigador de Chatham House y antiguo embajador brit¨¢nico en Teher¨¢n.

El analista pol¨ªtico-militar Brian M. Downing concurre cuando afirma que el espionaje estadounidense ¡°ve la influencia iran¨ª en Yemen como [algo] reciente y no especialmente amplia¡±.

¡°Arabia Saud¨ª ha exagerado el papel de Ir¨¢n en lo que es sobre todo un conflicto local yemen¨ª y al hacerlo est¨¢ creando una nueva y peligrosa din¨¢mica¡±, afirmaba en un reciente art¨ªculo April Longley Alley, especialista en la pen¨ªnsula Ar¨¢biga del International Crisis Group.

Aunque Yemen no se ha sumido en la violencia intercomunitaria como en los casos de Irak y Siria, la campa?a militar saud¨ª est¨¢ agravando la brecha entre el norte zayd¨ª y el sur sun¨ª, introduciendo un elemento sectario que no exist¨ªa hasta ahora. Si la minor¨ªa chi¨ª (un tercio de los yemen¨ªes) llegara a estar acorralada, Teher¨¢n podr¨ªa sentirse obligada a intervenir de forma directa.