La violencia se agudiza en El Salvador tras fracasar la tregua de las ¡®maras¡¯

La violencia se recrudece en El Salvador. De la tregua entre pandillas iniciada en 2012 con la aceptaci¨®n t¨¢cita (nunca oficial) del Gobierno y respaldada por la OEA y la iglesia, no queda nada. Dur¨® 15 meses, periodo en que la tasa de homicidios baj¨® de 15 a cinco asesinatos diarios, si bien no cesaron la extorsi¨®n y el secuestro. Desde principios de 2014, en medio de un crispado ambiente de opini¨®n conservadora contra el di¨¢logo con las bandas, el gabinete izquierdista del anterior presidente, Mauricio Funes, fue cambiando de actitud con respecto al proceso de pacificaci¨®n y bloque¨® los mecanismos con que lo facilitaba, principalmente permitir encuentros en la c¨¢rcel entre l¨ªderes pandilleros. Hoy, roto el escenario de tregua, la situaci¨®n se agrava. Marzo fue el mes m¨¢s violento en lo que va de siglo con 481 asesinatos, las extorsiones a empresarios aumentan y preocupa lo que pueda desencadenar la nueva estrategia de mano dura contra las pandillas. El ejemplo: la sangr¨ªa de este ¨²ltimo fin de semana.

El s¨¢bado por la ma?ana, el presidente Salvador S¨¢nchez Cer¨¦n, del FMLN como su antecesor Funes, orden¨® al Ej¨¦rcito la creaci¨®n de tres batallones de reacci¨®n inmediata para hacer frente a la criminalidad. Horas despu¨¦s, nueve pandilleros murieron en un enfrentamiento con soldados. Por la noche un sargento fue acribillado en su vivienda. Y el domingo de madrugada otro militar fue asesinado en una emboscada. Este lunes por la ma?ana fueron atacados soldados de la Fuerza Naval en San Salvador. Uno de ellos muri¨® y dos quedaron heridos.

En el caso del choque entre pandilleros y Ej¨¦rcito, la informaci¨®n oficial indica que un grupo de unos 30 miembros de la mara [pandilla] Barrio 18 fue detectado por militares en San Salvador y los pandilleros abrieron fuego contra ellos. El resultado: nueve muertos, todos de la banda, y ning¨²n militar herido. Fotos que circulan en las redes sociales muestran a los pandilleros muertos con sus armas al costado, en medio de charcos de sangre. Los comentarios de los internautas difieren: unos dicen que son ¡°im¨¢genes montadas¡±, por aparecer los pandilleros junto a armas; otros expresan su dolor porque hayan muerto j¨®venes; otros, a la inversa, se alegran de que hayan muerto esos j¨®venes. Es una muestra de la polarizaci¨®n de la percepci¨®n en este pa¨ªs centroamericano de seis millones de habitantes, uno de los m¨¢s violentos del mundo con una tasa de m¨¢s de 60 homicidios por cada 100.000 habitantes.

Entre el s¨¢bado y el lunes han muerto nueve pandilleros en un choque con militares y tres militares en ataques de pandilleros

¡°Estamos entrando a un esquema de guerra entre pandilleros y agentes del Estado. Es sumamente peligroso¡±, afirma la experta en violencia Jeannette Aguilar. ¡°Un riesgo es que muchas de estas acciones contra los pandilleros se est¨¦n haciendo fuera de la ley, y cuando hay acciones fuera de la ley la poblaci¨®n civil siempre ser¨¢ afectada. No debemos olvidar que sectores grandes de la poblaci¨®n viven marginados precisamente donde han proliferado las pandillas¡±, a?ade.

S¨¢nchez Cer¨¦n ha dado datos que se?alan el recrudecimiento del modelo de represi¨®n de la delincuencia. El lunes pasado, en una comparecencia p¨²blica, inform¨® de que el 30% de los homicidios de marzo se corresponde a pandilleros ca¨ªdos en enfrentamientos con la Polic¨ªa Nacional Civil. A su vez, en lo que va de a?o, la Polic¨ªa ha informado de la muerte de 22 de sus elementos a causa de ataques de las pandillas.

Aguilar apunta que la escalada hacia el conflicto se puede detectar tambi¨¦n en el hecho de que en el ¨²ltimo quinquenio el Ej¨¦rcito ha duplicado su n¨²mero de soldados, de 12.000 a 24.000. La presencia militar en las calles es cada vez m¨¢s notoria, se crean nuevas unidades de choque y el ministro castrense, general David Mungu¨ªa, ha anunciado una pr¨®xima entrega de pertrechos de parte de Estados Unidos.

Por su parte, las pandillas endurecen su acci¨®n. Sus l¨ªderes ya no cuentan con las condiciones que ten¨ªan durante la tregua (fueron trasladados a c¨¢rceles comunes en un r¨¦gimen menos severo: incluso ten¨ªan tel¨¦fonos desde los que daban ¨®rdenes a su gente en el exterior) y ahora se encuentran en un penal de m¨¢xima seguridad conocido como Zacatraz, por la c¨¢rcel estadounidense de Alcatraz y el nombre de la ciudad donde est¨¢, Zacatecoluca. El 18 de abril, un diario local public¨® un informe reservado de inteligencia en el que se revelaba que los pandilleros est¨¢n procurando conseguir m¨¢s armas y adiestramiento y, para tener recursos, han ordenado incrementar las extorsiones.