Pesos pesados del Partido Laborista piden un giro al centro tras la derrota
El sector af¨ªn a la ¡®tercera v¨ªa¡¯ de Blair es el primero en mover ficha en el debate
El debate ¡°hondo y honesto¡± sobre el futuro del Partido Laborista que pidi¨® Ed Miliband el viernes en su discurso de dimisi¨®n, qued¨® oficialmente abierto en el momento en que el devastado perdedor sali¨® por la puerta. Menos de un d¨ªa tardaron en escucharse las primeras voces que reclaman un retorno a las premisas del Nuevo Laborismo, corriente que ha proporcionado al partido sus ¨²nicos 13 a?os de poder desde 1979.
El exministro del Interior Alan Johnson dijo que el pr¨®ximo l¨ªder deber¨¢ seguir el ejemplo de Blair, que proporcion¨® al partido tres victorias electorales. ¡°Debemos reflexionar sobre ad¨®nde nos dirigimos como partido¡±, declar¨® en televisi¨®n. ¡°No debemos creer que la derrota fue por Ed Miliband, el problema que debemos resolver es mucho m¨¢s profundo. Se trata de las aspiraciones de la gente. Ya no nos pueden identificar como el partido de las aspiraciones. Y ese fue uno de los grandes ¨¦xitos que nos llev¨® a ganar tres elecciones¡±.
Johnson defendi¨® que el partido deb¨ªa tener como modelo a los Gobiernos de Blair y de Brown, de los que ¨¦l form¨® parte, y critic¨® la tendencia en el partido a dar la espalda a aquellos a?os. ¡°Es como si Blair hubiera perdido tres elecciones, en lugar de haberlas ganando¡±, se quej¨® Johnson. ¡°Es casi de rigor ahora mencionar su nombre¡±.
El exministro es una figura de peso en el partido. En noviembre del a?o pasado, entre fuertes cr¨ªticas al liderazgo de Ed Miliband, Johnson fue sondeado por el sector blairista del partido para ver si estar¨ªa dispuesto a encabezar una candidatura para reemplazarlo, a menos de seis meses de las elecciones, seg¨²n public¨® Financial Times. ?l no se mostr¨® dispuesto y tambi¨¦n ahora ha descartado presentarse como candidato.
En el mismo sentido se pronunci¨® el tambi¨¦n exministro Ben Bradshaw, que estuvo al frente de Cultura al final del Gobierno de Brown. ¡°El partido necesita celebrar a los empresarios y a los creadores de riqueza y no trasladar la opini¨®n de que forman parte del problema¡±, escribi¨® en su blog. ¡°La gente quiere un Reino Unido m¨¢s justo y mejor, pero tambi¨¦n deben tener confianza en la habilidad el Gobierno para manejar la econom¨ªa competentemente. Competencia econ¨®mica combinada con justicia social. Esa es la lecci¨®n que aprendimos, al fin, despu¨¦s de 18 a?os en la jungla entre 1979 y 1997¡±.
El comit¨¦ ejecutivo nacional del partido tiene previsto reunirse a principios de esta semana para dise?ar el calendario de la elecci¨®n del l¨ªder. Harriet Harman, segunda de Miliband, ser¨¢ quien dirija el partido en el periodo de transici¨®n, y ha anunciado que, una vez concluido, tambi¨¦n dimitir¨¢. Hay quienes son partidarios de un periodo de reflexi¨®n largo para abordar con tranquilidad el profundo debate que el partido reclama. Otros temen que un debate largo permita a los tories definir a solas la agenda pol¨ªtica en un momento tan importante para el pa¨ªs.
Un diputado que estuvo en los Gobiernos de Blair y Brown, David Lammy, ha sido el primero en dar el paso y anunciar p¨²blicamente su intenci¨®n de liderar el partido. Aunque tambi¨¦n participa en la carrera a la candidatura laborista para la alcald¨ªa de Londres, una de las primeras decisiones importantes que deber¨¢ tomar el partido antes de las elecciones el a?o viene. Otros nombres que se barajan son Chuka Umunna, Liz Kendall o Dan Jarvis, todos ellos diputados desde hace menos de cinco a?os y, por tanto, sin responsabilidades en los Gobiernos de Blair y Brown.
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