La UE acuerda repartirse a 40.000 refugiados tras un acalorado debate

La Uni¨®n Europea ha acordado la primera medida de solidaridad para hacer frente al desaf¨ªo migratorio. Tras casi 12 horas de debate ininterrumpido -en el que tambi¨¦n hubo lugar para Grecia y brevemente para el encaje brit¨¢nico en el club comunitario-, los jefes de Estado y de Gobierno han pactado en la madrugada del viernes redistribuir a 40.000 demandantes de asilo desde Italia y Grecia hacia el resto de pa¨ªses miembros. Tendr¨¢n dos a?os para cumplir el compromiso.

"La discusi¨®n ha sido dif¨ªcil. Me habr¨ªa gustado que todo el mundo hubiera aceptado el esquema de la Comisi¨®n [con cupos obligatorios por cada Estado], pero si el resultado es el mismo, lo esencial es que se d¨¦ respuesta a la situaci¨®n de esas 60.000 personas", concedi¨® el presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker, al t¨¦rmino de la cumbre que se clausurar¨¢ hoy en Bruselas. Juncker se refer¨ªa a los 40.000 aspirantes a refugiado que se redistribuir¨¢n por Europa m¨¢s otros 20.000 que a¨²n no han llegado al continente y que los Estados se han comprometido a acoger desde terceros pa¨ªses.

Las cifras son id¨¦nticas a las que hab¨ªa propuesto el Ejecutivo comunitario, con una particularidad: las capitales rechazan el marco forzoso que dict¨® el equipo de Juncker, con cuotas precisas para cada Estado, y se comprometen a pactar ellas mismas su propio sistema de reparto. "Estoy convencido de que los Estados miembros llegar¨¢n a resultados que corresponder¨¢n a la propuesta de la Comisi¨®n", ironiz¨® Juncker, que durante la noche mantuvo acaloradas discusiones con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, partidario del marco voluntario.

Tras un intento controvertido de introducir el t¨¦rmino voluntario en el texto, el documento de conclusiones sali¨® sin menci¨®n directa a la voluntariedad u obligatoriedad del esquema. S¨ª figura el compromiso que adquieren los Estados de pactar un sistema de reparto antes de finales de julio. La idea es fijar una horquilla de demandantes de asilo que corresponder¨ªan a cada pa¨ªs por sus condiciones (PIB, poblaci¨®n...) y ver si voluntariamente los acoge. Si no es as¨ª, se establecer¨¢n los pasos necesarios para llegar a esos 40.000, que provendr¨¢n de Siria y Eritrea.

Los l¨ªderes comunitarios pactaron una excepci¨®n para sortear la firme oposici¨®n de Hungr¨ªa a este esquema. Budapest reclamaba tambi¨¦n alg¨²n tipo de solidaridad porque, seg¨²n las cifras de Frontex, la agencia europea de fronteras, es el pa¨ªs que recibe el mayor flujo de entradas irregulares en la UE (m¨¢s de 50.0000 en los cinco primeros meses del a?o, frente a los 48.000 de Grecia y los 47.000 de Italia. Pero los responsables de Frontex precisan que la mitad de quienes entran en Hungr¨ªa lo han hecho anteriormente por Grecia y que la mayor emergencia se encuentra en el Mediterr¨¢neo por la situaci¨®n convulsa que vive el vecindario sur y que provoca los ¨¦xodos hacia Europa.

?Al final ni Hungr¨ªa ni probablemente Bulgaria, que sufre tambi¨¦n presi¨®n migratoria, estar¨¢n obligadas a acoger a refugiados provenientes de Italia y Grecia. "Nuestro enfoque tiene que ser amplio desde el punto de vista geogr¨¢fico", explic¨® Tusk.?

La decisi¨®n dej¨® insatisfecho al primer ministro italiano, Matteo Renzi, el principal impulsor de un marco de solidaridad europea para compartir las cargas de las llegadas de migrantes a las costas europeas. Aunque valor¨® que finalmente no llegara a incluirse el t¨¦rmino voluntario en las conclusiones, Renzi se?al¨® a la prensa: "Si pensamos que Europa es un sitio de ideales y valores, estamos dispuestos a trabajar junto a nuestros amigos y socios, pero si pensamos que Europa s¨®lo es un sitio para hablar de problemas presupuestarios, no es la Europa que concebimos en 1957 en Roma". El l¨ªder italiano rebaj¨® en p¨²blico el tono m¨¢s emotivo que hab¨ªa empleado en la reuni¨®n a puerta cerrada con sus socios, a los que reproch¨® "no ser dignos de llamarse Europa".

La canciller alemana, Angela Merkel, tambi¨¦n partidaria de las cuotas (porque el sistema actual lleva a que los potenciales refugiados se desplacen por el continente hasta alcanzar Alemania o Suecia, los pa¨ªses m¨¢s ben¨¦volos con los demandantes de asilo) prefiri¨® mostrarse conciliadora. "En lo que concierne la cuesti¨®n de los refugiados, creo que estamos ante el mayor reto que yo en mi mandato he visto con respecto a la UE y hemos superado una serie de desaf¨ªos, entre la crisis econ¨®mica y financiera y la crisis del euro", ha se?alado en la rueda de prensa.

Todo este marco de modesta solidaridad tiene una importante contrapartida. Los Estados se comprometen a acelerar los retornos de los llamados migrantes econ¨®micos, los que no re¨²nen las condiciones para reclamar asilo. Ahora solo regresan el 39% de los que tienen una orden de expulsi¨®n, seg¨²n datos de la Comisi¨®n Europea. Tusk cit¨® el ejemplo de Espa?a, que puso en marcha a partir de 2006 un programa de cooperaci¨®n con Estados de origen y tr¨¢nsito de inmigrantes, para contener las llegadas principalmente a Canarias. El resultado es que se tapon¨® esa v¨ªa y hoy no llegan barcos a las islas. La intervenci¨®n de Rajoy en el debate migratorio se centr¨® en este logro, impulsado por el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.