La muerte de un caribe?o por la polic¨ªa desata disturbios en La Haya

La muerte de Mitch Henriquez, de 42 a?os y originario de Aruba (antigua colonia holandesa en el Caribe) tras ser reducido por cinco polic¨ªas el pasado fin de semana en La Haya, ha provocado graves disturbios en la ciudad, sede del Gobierno y la monarqu¨ªa holandeses. En los tres ¨²ltimos d¨ªas, ha habido 60 detenciones, adem¨¢s de quema de contenedores y lanzamiento de piedras contra las fuerzas del orden en Schilderswijk, uno de los barrios de mayor concentraci¨®n inmigrante. Los manifestantes califican la muerte de racista, y denuncian ¡°la discriminaci¨®n practicada en los arrestos de ciudadanos que no son holandeses aut¨®ctonos¡±. El alcalde, Jozias van Aartsen, y el ministerio de Justicia han pedido calma, pero la revuelta no tiene visos de ceder, por ahora.

El turista asist¨ªa a un festival veraniego de m¨²sica, y seg¨²n testigos presenciales, dijo a gritos que llevaba una pistola. Los agentes le detuvieron el s¨¢bado ¡°por la fuerza, ya que se resisti¨®, y despu¨¦s se encontr¨® mal en la camioneta policial que le traslad¨® a comisar¨ªa¡±, seg¨²n el primer informe publicado por la fiscal¨ªa. Henriquez no hab¨ªa bebido ni tomado drogas, y muri¨® el domingo en el hospital. Varios v¨ªdeos obtenidos por testigos presenciales, y colgados de inmediato en las redes sociales, mostraron una imagen distinta. All¨ª se ve¨ªa c¨®mo fue tirado al suelo por cinco uniformados. Sin poderse mover, recibi¨® repetidas veces golpes en la cabeza y las piernas. Luego fue metido a rastras en el furg¨®n, ya que no pod¨ªa andar.

Cuando la autopsia revel¨® que la asfixia era ¡°la ¨²nica explicaci¨®n posible del ¨®bito, y fue probablemente causada durante la detenci¨®n¡±, la violencia estall¨® en el barrio. A la vista del informe forense, los fiscales han modificado sus conclusiones. La nueva versi¨®n ya no dice que tuvo problemas respiratorios en el veh¨ªculo oficial.

La familia del muerto, de todos modos, no cree que pueda hablarse de racismo, sino de violencia sin sentido. ¡°Uno de los polic¨ªas era tambi¨¦n de Aruba. Pensamos que se trata de un abuso de fuerza¡±, ha declarado uno de los primos de Henriquez. Entretanto, los cinco agentes involucrados en el suceso han sido suspendidos, y Ard van Steur, titular de Justicia, ha prometido una investigaci¨®n independiente sobre los hechos. ¡°Parto de la base de que se actu¨® de buena fe, pero algo ha salido horriblemente mal¡±, ha a?adido Paul van Musscher, jefe de la polic¨ªa.