Asesinado en M¨¦xico un fotoperiodista que hab¨ªa recibido amenazas

El fotoperiodista Rub¨¦n Espinosa, de 31 a?os, que recientemente hab¨ªa denunciado que su seguridad estaba en riesgo por su trabajo en Veracruz,?el Estado m¨¢s peligroso para el ejercicio del periodismo en M¨¦xico, fue hallado muerto este viernes en un piso de la capital, M¨¦xico DF, junto a los cad¨¢veres de cuatro mujeres, todos ellos con impactos de bala.

Espinosa, especializado en la cobertura de movimientos sociales y activista contra las agresiones a la prensa en Veracruz, hab¨ªa dicho en una entrevista al portal?Sinembargo que en junio empez¨® a seguirlo gente sospechosa y decidi¨® moverse por seguridad a M¨¦xico DF. El fot¨®grafo, que trabajaba como freelance para la revista Proceso y la agencia Cuartoscuro, alert¨® de su situaci¨®n a la ONG internacional en defensa de los periodistas Art¨ªculo 19 y al Comit¨¦ para la Protecci¨®n de los Periodistas (CPJ) con base en Nueva York. "Yo no conf¨ªo en ninguna instituci¨®n del Estado, no conf¨ªo en el gobierno, temo por mis compa?eros, temo por m¨ª", afirm¨®.

Este s¨¢bado por la ma?ana hab¨ªa trascendido el homicidio de cinco personas en un piso de la c¨¦ntrica colonia Narvarte de la capital, pero no se conocieron detalles precisos hasta que por la tarde Art¨ªculo 19 y la revista Proceso informaron de que una hermana de Espinosa hab¨ªa reconocido su cuerpo en el servicio forense con golpes en la cara y con dos balazos en el pecho.

La Fiscal¨ªa de M¨¦xico DF ha confirmado oficialmente este domingo en una rueda de prensa la identidad del fot¨®grafo asesinado. El fiscal Rodolfo R¨ªos ha enfatizando que ¡°se agotar¨¢n todas las l¨ªneas de investigaci¨®n¡± y como ¨²nico detalle concreto de las averiguaciones ha aportado el detalle de que adem¨¢s de los homicidios hubo ¡°un saqueo¡± del apartamento. R¨ªos se ha reunido con las organizaciones Art¨ªculo 19, Pen Internacional y Periodistas de a Pie, junto con representantes de Proceso y Cuartoscuro, para manifestarles su compromiso de esclarecer el motivo de lo ocurrido y de dar con los responsables.

Las autoridades llegaron al lugar de los hechos el viernes por la noche alertadas por otra chica que viv¨ªa en ese piso y que se encontr¨® con lo sucedido al volver de trabajar.?Seg¨²n testimonios de amigos cercanos a Espinosa recabados por este diario, los hechos ocurrieron en alg¨²n momento pasadas las dos de la tarde del viernes. Uno de sus amigos se comunic¨® con ¨¦l por mensajes a esa hora. Espinosa, que hab¨ªa ido a la casa de sus amigas el jueves por la noche para una fiesta y hab¨ªa dormido all¨ª, le dijo que iba a salir ya hacia casa de sus padres, donde viv¨ªa desde que se fue de Veracruz, y que m¨¢s tarde volver¨ªa a contactarlo.

"Lamentablemente han encontrado su oportunidad, y la han aprovechado", dice un amigo de Espinosa

Pas¨® un d¨ªa hasta que este s¨¢bado sobre las dos de la tarde una hermana del reportero llam¨® a ese amigo para preguntarle si sab¨ªa algo de ¨¦l. Empezaron a buscarlo. Ella llam¨® a otro amigo m¨¢s que hab¨ªa ido el jueves por la noche a esa casa, pero que no hab¨ªa dormido all¨ª, y al cabo de un rato fueron al edificio para ver si estaba. Al llegar se encontraron con la polic¨ªa trabajando. Se llevaron a la hermana al centro forense y all¨ª identific¨® el cad¨¢ver.

Otro amigo de Espinosa, que estuvo con ¨¦l jueves cubriendo un acto judicial, cuenta que estaba "tranquilo" y d¨¢ndole vueltas a la posibilidad de volver de nuevo a trabajar en Veracruz, aunque no se sent¨ªa seguro. "Yo le dije que mejor se quedara, para no darle a quien fuera la oportunidad de hacerle algo all¨¢. Pero lamentablemente han encontrado su oportunidad, y la han aprovechado".

Seg¨²n sus amigos las amenazas que recibi¨® Espinosa en junio en Veracruz fueron expl¨ªcitas: "Le tomaron fotos de frente afuera de su casa y le hicieron se?as con el dedo de que mejor estuviese callado". En la entrevista con Sinembargo el reportero defini¨® a quienes lo vigilaban como "tipos mal encarados" que iban vestidos de negro.

Veracruz: foco rojo para los periodistas

Veracruz, donde Espinosa -nacido en M¨¦xico DF- trabajaba desde hace siete a?os, es un Estado con fuerte presencia del crimen organizado, en especial del cartel de origen paramilitar de Los Zetas, y un foco rojo de la libertad de expresi¨®n en M¨¦xico. Desde 2011, con el gobernador del PRI Javier Duarte a cargo, han sido asesinados en su territorio 15 reporteros, uno de ellos la corresponsal de Proceso Regina Mart¨ªnez, con 30 a?os en el oficio, que apareci¨® estrangulada en su casa de Veracruz.?Las autoridades concluyeron que fue v¨ªctima de un robo o de un crimen pasional. A principios de 2015 tras una campa?a de presi¨®n civil el Hay Festival decidi¨® abandonar su sede en la ciudad veracruzana de Xalapa por los ataques a la prensa.

En la entrevista que concedi¨® hace un mes Espinosa subray¨® la crisis de seguridad que atravesaba el Estado: "Es triste pensar en Veracruz, no hay palabras para decir lo mal que est¨¢ ese Estado, ese gobierno, la prensa, y lo bien que est¨¢ la corrupci¨®n. La muerte escogi¨® a Veracruz, la muerte decidi¨® vivir ah¨ª¡±.

El asesinato marca otro salto en la violencia contra periodistas por su crudeza y por suceder en la capital ?

En 2014?M¨¦xico fue el sexto pa¨ªs del mundo con m¨¢s periodistas asesinados y el m¨¢s?mort¨ªfero del continente americano, seg¨²n Reporteros Sin Fronteras. Ocupa el lugar 148 de 180 pa¨ªses en la?Clasificaci¨®n Mundial de la Libertad de Prensa, en el mismo escal¨®n que?Afganist¨¢n. El Gobierno mexicano?ha registrado la muerte de m¨¢s de 100 periodistas desde 2000. En lo que va de a?o, contando?a Espinosa, ya han sido asesinados?siete?reporteros.?

Ante la vulnerabilidad de los periodistas mexicanos, sobre todo de aquellos que trabajan en medios locales en regiones asoladas por el narco y la corrupci¨®n policial, el Gobierno cre¨® en 2012 un mecanismo para la protecci¨®n de reporteros que no ha logrado funcionar. En 2014 su primer encargado renunci¨® y los resultados por entonces eran decepcionantes: de las 152 solicitudes de protecci¨®n que hab¨ªa recibido un 58% (88 casos) ni siquiera hab¨ªa llegado a ser analizado por la junta que debe decidir si se otorgan al periodista medidas de protecci¨®n.

El asesinato de Rub¨¦n Espinosa y de las cuatro mujeres que estaban con ¨¦l marca un nuevo salto en el panorama de violencia contra periodistas por su crudeza y por haber ocurrido en un barrio de clase media del centro de la capital, que hasta ahora se supon¨ªa a buen recaudo de los extremos criminales de otras regiones sin su nivel de desarrollo y de presencia institucional. La reacci¨®n en las redes sociales el s¨¢bado por la tarde fue veloz y enseguida fragu¨® una convocatoria de protesta para este domingo en M¨¦xico DF con el lema #JusticiaParaRub¨¦n.