Las Patronas de la Concordia
El grupo que ayuda a los migrantes de La Bestia opta al Premio Princesa de Asturias
Diez y media de la ma?ana. Las Patronas comienzan su ronda para recoger los v¨ªveres que supermercados, albergues y organizaciones sociales les donan. Luego los guisan y empacan. Hasta las siete de la tarde. Entonces, esperan a que pase La Bestia ¡ªel tren de mercanc¨ªas en el que una media de 400.000 migrantes al a?o, sobre todo centroamericanos, intenta cruzar la frontera de EE?UU¡ª, para dar comida a los viajeros que pasan por Amatl¨¢n de los Reyes, en Veracruz (M¨¦xico). Lo hacen cada d¨ªa, desde hace 20 a?os. Por eso Beatriz Becerra, eurodiputada de UPyD, ha querido apoyar su candidatura, promovida por un grupo de universitarios mexicanos y espa?oles, al premio Princesa de Asturias de la Concordia 2015.
Todo comenz¨® cuando Bernarda y Rosa volv¨ªan de hacer la compra y los migrantes que cabalgaban sobre La Bestia les pidieron comida. En aquel momento, las leyes mexicanas sancionaban a quien prestara ayuda a un ilegal, pero no les import¨®. Su hermana Norma Romero, 45 a?os, asegura que no han parado desde entonces. Ahora, su labor llega mucho m¨¢s all¨¢: ayudan a repatriar los cuerpos de los que mueren en Estados Unidos, a las familias que buscan a desaparecidos, a los migrantes heridos y a los que se ven obligados a continuar su viaje a pie. "Hay grupos del crimen organizado que les exigen 100 d¨®lares por montar en el tren. Si no pagan, les tiran", explica Romero a su paso por Madrid. Otros, saltan ante la posibilidad de que estas bandas les roben o les maten.
Las Patronas ¡ªque reciben su nombre del barrio La Patrona, en Amatl¨¢n de los Reyes¡ª reparten unos 300 almuerzos diarios. "Un d¨ªa nos pusimos a ver cu¨¢nta comida hab¨ªamos dado y contamos 30 kilos de arroz. Entonces nos preguntamos, ?de d¨®nde sali¨® tanto? Del coraz¨®n de la gente buena", explica Romero. Este grupo de 14 mujeres y dos hombres ¡ªRomero lamenta que en M¨¦xico el machismo est¨¦ a la orden del d¨ªa¡ª trabaja en equipo con otras organizaciones solidarias y religiosas. "Todo es trabajo voluntario", asegura para aclarar que nadie se lucra con esta actividad.
Si las mercanc¨ªas y las armas pueden pasar [la frontera], ?por qu¨¦ no las personas? Norma Romero
En 2013, la labor de estas mujeres fue reconocida con el Premio Nacional de Derechos Humanos, concedido por la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos de M¨¦xico. El pr¨®ximo 2 de septiembre, la Fundaci¨®n Princesa de Asturias (que no hace p¨²blico qui¨¦nes son los candidatos) anunciar¨¢ si Las Patronas tambi¨¦n merecen su galard¨®n, dotado con una escultura de Joan Mir¨® ¡ªs¨ªmbolo representativo del evento¡ª, una insignia, un diploma, y 50.000 euros. De ser as¨ª, Romero ya sabe qu¨¦ har¨¢ con el dinero: "Dedicarlo a mejorar la vida de las personas, para que no tengan que emigrar". Para ello, planea construir escuelas, poner a disposici¨®n de las que ya existen los medios que les faltan, dar becas para estudios o deportivas... "Hay universitarios que no tienen trabajo y se meten a polic¨ªa. Yo no veo que un joven con estudios universitarios tenga que trabajar de polic¨ªa para acabar corrupto", asegura Romero. Por eso, tambi¨¦n piensa en emprender con el dinero del premio: "Si se construyera un hotelito con una cafeter¨ªa en nuestra zona, generar¨ªa trabajo para las mujeres y los j¨®venes".
La educaci¨®n y los j¨®venes son dos de las preocupaciones a las que Romero se refiere cada dos por tres. "Hay que empezar en las casas a ense?ar que la inmigraci¨®n no es mala". A ense?ar que son personas, y no "mercanc¨ªas", para que se les trate como a seres humanos. "Ellos no vienen ac¨¢ a hacer da?o. S¨®lo quieren ayudar a sus familias", afirma y a?ade: "Si las mercanc¨ªas y las armas pueden pasar [la frontera], ?por qu¨¦ no las personas?".
Otra motivaci¨®n para venir a Espa?a, adem¨¢s de la candidatura al premio, era la de poder conocer de cerca los fen¨®menos migratorios en Europa. En su opini¨®n, la soluci¨®n no reside en estudiar c¨®mo dar acogida en los pa¨ªses de destino a estas personas, sino en c¨®mo arreglar sus lugares de origen para que no tengan que abandonarlos. "Nadie abandona a su familia por placer".
Documental Las Patronas. H¨¦roes sin fronteras.
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