Cuba amnistiar¨¢ a 3.500 presos por la visita del papa Francisco
Es una de las excarcelaciones m¨¢s extensas de la historia del castrismo
La llegada del papa Francisco a Cuba la semana pr¨®xima podr¨¢ ser celebrada en las calles por 3.522 personas m¨¢s. Ese es el n¨²mero de presos que ser¨¢n liberados en las pr¨®ximas 72 horas, beneficiados por un indulto concedido por el Consejo de Estado cubano en v¨ªsperas de la llegada del jefe de la Iglesia cat¨®lica, que visitar¨¢ la isla entre el 19 y el 22 de septiembre.
El gesto no es inusual, pero s¨ª su magnitud, que lo convierte en uno de los mayores indultos en Cuba desde el inicio del castrismo en 1959, solo superado por la excarcelaci¨®n de 3.600 reclusos en 1979, cuando Fidel Castro recibi¨® a cubanos del exilio en La Habana. Con motivo de la visita del papa Juan Pablo II en 1998, el Gobierno cubano liber¨® a unos 300 presos. Por la llegada de Benedicto XVI a la isla en 2012, el ejecutivo de su hermano Ra¨²l Castro decidi¨® indultar a casi 3.000 reclusos. Esta nueva amnist¨ªa, publicada este viernes por el diario estatal de la isla, Granma, coincidi¨® adem¨¢s con el inicio de una nueva ronda de conversaciones entre Estados Unidos y Cuba.
La cita pol¨ªtica en La Habana fue la quinta desde que los presidentes Barack Obama y Ra¨²l Castro anunciaran el 17 de diciembre el inicio de la normalizaci¨®n de relaciones tras a?o y medio de negociaciones secretas, en las que el papa Francisco tuvo un papel mediador clave, como han reconocido ambas partes. El encuentro sin embargo estrenaba formato: fue la primera reuni¨®n de la Comisi¨®n Bilateral acordada tras la apertura oficial de la embajada estadounidense en La Habana por el secretario de Estado John Kerry el 14 de agosto. El restablecimiento de relaciones diplom¨¢ticas el 20 de julio y la posterior visita cubana de Kerry -el primer jefe de la diplomacia estadounidense en poner pie en la isla en m¨¢s de medio siglo- fue el punto culminante de un proceso de normalizaci¨®n de relaciones que sin embargo est¨¢ lejos a¨²n de haber concluido. La comisi¨®n bilateral establecida tiene precisamente el objetivo de continuar las m¨²ltiples y todav¨ªa complicadas negociaciones que permitan una normalizaci¨®n completa de relaciones, algo para lo que ninguna de las partes se atreve a poner fecha.
El Departamento de Estado hab¨ªa adelantado que esta nueva reuni¨®n se centrar¨ªa en discutir ¡°los pasos siguientes en el proceso de normalizaci¨®n¡± y el ¡°calendario¡± de encuentros para la discusi¨®n de ¡°prioridades compartidas¡±. Y as¨ª fue, seg¨²n confirm¨® la Canciller¨ªa cubana, que anunci¨® al t¨¦rmino de la reuni¨®n en La Habana que la pr¨®xima cita ser¨¢ en noviembre en Washington.
En cuanto a los temas a tratar, persisten los problemas hist¨®ricos -y m¨¢s complicados por resolver- que lastran la relaci¨®n bilateral hace m¨¢s de medio siglo: desde el levantamiento del embargo reclamado por Cuba, que tambi¨¦n exige la devoluci¨®n de Guant¨¢namo y el fin de las emisiones de radio y televisi¨®n a la isla, a las compensaciones por expropiaciones que quiere un EE UU que adem¨¢s reclama un di¨¢logo abierto sobre derechos humanos y democracia, entre otros. Pero la comisi¨®n bilateral, que en esta ocasi¨®n estuvo presidida por la m¨¢xima responsable para EE UU de la Canciller¨ªa cubana, Josefina Vidal, y por el subsecretario de Estado adjunto para Am¨¦rica Latina del Departamento de Estado, Alex Lee, tambi¨¦n debatir¨¢ a corto plazo aspectos de m¨¢s f¨¢cil negociaci¨®n, como cooperaci¨®n en materia de medioambiente, prevenci¨®n de desastres naturales o aviaci¨®n civil. Y tambi¨¦n temas de "cumplimiento de la ley", entre los que se espera la revisi¨®n del estatus de refugiado pol¨ªtico para muchos pr¨®fugos de ambos pa¨ªses, una cuesti¨®n que durante a?os ha contribuido a tensar m¨¢s a¨²n las relaciones entre EE UU y Cuba.
Entre los presos a liberar antes de la llegada del papa Francisco hay algunos extranjeros cuya identidad Cuba no ha proporcionado, limit¨¢ndose a decir en su comunicado oficial que se trata de reclusos cuyos pa¨ªses de origen han ¡°garantizado su repatriaci¨®n¡±. Otros beneficiados son presos mayores de 60 a?os o menores de 20 sin antecedentes penales, as¨ª como enfermos cr¨®nicos, mujeres, presos que estaban a punto de recibir la libertad condicional y otros que ya cumpl¨ªan condena en r¨¦gimen abierto, seg¨²n la nota oficial de este viernes. En esta no se especifica si entre los indultados hay tambi¨¦n presos pol¨ªticos, tal como exigen activistas y organizaciones dentro y fuera de la isla, aunque el hecho de que la nota oficial especifique que entre los indultados no hay presos acusados de ¡°delitos contra la seguridad del Estado¡± hace pensar que han sido excluidos, al menos a priori, de esta medida.
Seg¨²n las ¨²ltimas cifras oficiales, que datan de 2012, la poblaci¨®n penitenciaria en Cuba es de unos 57.000 presos. La opositora Comisi¨®n Cubana de Derechos Humanos y Reconciliaci¨®n Nacional (CCDHRN) afirma sin embargo que la cifra actual est¨¢ entre los 60.000 y 70.000 presos, informa Efe. De acuerdo con el l¨ªder de la CCDHRN, Elizardo S¨¢nchez, entre ellos hay al menos 60 presos por "razones pol¨ªticas o mediante procedimientos pol¨ªticamente condicionados".
Obama renueva una ley que conserva el embargo contra Cuba
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, renov¨® este viernes por un a?o m¨¢s la Ley de Comercio con el Enemigo, uno de los pilares legales en los que se basa el embargo contra Cuba.
La acci¨®n parece a priori contradictoria, en vista de que el mandatario dem¨®crata viene presionando desde diciembre al Congreso para que ponga fin a un embargo que considera ¡°fracasado¡± y que lastra, dice, las relaciones tanto con la isla como con el resto del hemisferio occidental.
Seg¨²n expertos sin embargo, renovar esta ley es la ¨²nica manera que tiene Obama de poder seguir actuando mediante sus poderes ejecutivos para vaciar de contenido al embargo mientras el Congreso se siga negando a ponerle fin de forma definitiva. No renovar la normativa podr¨ªa adem¨¢s haber revertido las medidas ejecutivas dictadas por Obama en los ¨²ltimos meses y que han permitido una sustancial flexibilizaci¨®n para viajar y comerciar con la isla, advierte Tom¨¢s Bilbao, director ejecutivo de Cuba Study Group.
Con la Ley Helms-Burton de 1996, el embargo pas¨® a ser ley y por tanto qued¨® en manos del Congreso. ¡°Sin embargo, con la Ley de Comercio con el Enemigo, el presidente mantiene autoridad para modificar las sanciones mediante autoridad ejecutiva en ciertas ¨¢reas. Si se eliminara su autoridad bajo eso, eliminar¨ªa su poder de ejercer discreci¨®n en cuanto a las sanciones¡±, destaca Bilbao.
La Ley de Comercio con el Enemigo data de 1917 y es en la que se bas¨® el presidente John F. Kennedy para dictar el embargo contra Cuba en 1962. Esta normativa es la ¡°preeminente¡± entre todas las leyes que desde entonces se han escrito para configurar el embargo, explic¨® recientemente tambi¨¦n el abogado especializado Robert Muse. La paradoja es que se trata de la ley ¡°principal¡± que permite mantener el embargo, pero a la par ¡°es la ¨²nica que garantiza autoridad ejecutiva al presidente para relajar el embargo a Cuba¡±.
Obama ten¨ªa hasta el lunes 14 para renovar la ley y no perder as¨ª su capacidad de seguir flexibilizando el embargo, algo que se espera suceda pr¨®ximamente. Entre las medidas m¨¢s esperadas destaca una nueva flexibilizaci¨®n de las restricciones para viajar a la isla. Oficialmente, los estadounidenses tienen prohibido hacer turismo en Cuba.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.