Socialistas y Bloco de Esquerda acercan posturas en Portugal

Ant¨®nio Costa, secretario general del Partido Socialista portugu¨¦s, termin¨® su primera ronda de negociaciones con los otros partidos de izquierda. Y la posibilidad de un gobierno de izquierdas es cada d¨ªa mayor. Tanto el PC como el Bloco de Esquerda (BE) le garantizan un gobierno estable para toda la legislatura, mientras que la coalici¨®n de centro-derecha parece estar a la expectativa. La pregunta sigue siendo la misma una semana despu¨¦s de las elecciones: ?Coqueteo o posibilidad real de una "mayor¨ªa negativa", como la calific¨® el propio Costa?

En la ma?ana de este lunes, Costa (32% de los votos y 85 esca?os) se reuni¨® con Catarina Martins, del Bloco de Esquerda (BE, 10,2% de los votos, 19 esca?os). Y ambos salieron contentos. El BE exige que el PS descongele las pensiones, elimine la rebaja de la contribuci¨®n a la seguridad social, elimine el proceso de conciliaci¨®n en los despidos.

¡°En lo que a nosotros respecta, hoy acab¨® el Gobierno de Passos y Portas¡±, fueron las primeras palabras de Martins, tras la reuni¨®n. La l¨ªder del Bloco de Esquerda manifest¨® que pusieron encima de la mesa sus condiciones de respeto salarial, laboral y de pensiones, y bajo el cumplimiento del Tratado Presupuestario. A preguntas de los periodistas, reconoci¨® que su exigencia electoral de una renegociaci¨®n de la deuda hab¨ªa quedado relegada.

M¨¢s prudente se mostr¨® Ant¨®nio Costa, que calific¨® el encuentro de ¡°muy interesante¡± -el del PC lo defini¨® como "bastante constructivo"-y consider¨® que ¡°hay margen¡± para la aproximaci¨®n de los dos partidos.

¡°Todos sabemos", a?adi¨® Costa, "que somos partidos de naturalezas diferentes; nuestras diferencias son p¨²blicas y no tiene sentido debatirlas; lo que tiene sentido es trabajar para encontrar una soluci¨®n para un Gobierno estable y que responda a la voluntad popular¡±.

Durante la semana, comisiones t¨¦cnicas del PS y del BE van a seguir con reuniones, al igual que con el PC. Las tres fuerzas pol¨ªticas de izquierda tendr¨ªan la mayor¨ªa absoluta del parlamento con 121 esca?os frente a los 104 de la coalici¨®n gobernante PSD-CDS.

La posibilidad de un Gobierno de izquierdas ha creado divisi¨®n en las filas del PS y tambi¨¦n en su misma comisi¨®n nacional. El s¨¢bado dimiti¨® el secretario nacional del partido, S¨¦rgio Sousa Pinto, disconforme con el coqueteo de Costa con PCP y BE, despu¨¦s de que durante la campa?a, PCP y BE equipararan al PS con la derecha.

Tampoco el secretario general de UGT, Carlos Silva, es partidario de un gobierno con PCP y BE. ¡°Es una mayor¨ªa inestable. No me parece que las fuerzas a la izquierda del PS den garant¨ªa de estabilidad¡±. Su postura ha sido contestada por la ejecutiva del sindicato, que aclara que es una opini¨®n personal de su dirigente.

Otros miembros de la ejecutiva del PS ven una oportunidad ¨²nica de gobernar. El mi¨¦rcoles se reunir¨¢ el Comit¨¦ Pol¨ªtico del PS y votar¨¢ qu¨¦ direcci¨®n tiene que seguir Costa. El l¨ªder socialista espera tener a final de semana una idea clara de por d¨®nde tirar, ya con todas las ofertas que le llueven para formar gobierno. En la misma tarde, el PSD-CDS dio su primer paso adelante al manifestar que 20 propuestas del programa del PS eran asumibles por la coalici¨®n de centroderecha.

La primera consecuencia de la p¨¦rdida de la mayor¨ªa absoluta del Gobierno es que no podr¨¢ entregar a tiempo en Bruselas el presupuesto de 2016. D¨ªas antes de las elecciones, la ministra de Finanzas, Maria Luiz Albuquerque, pidi¨® un aplazamiento de la fecha l¨ªmite (esta semana), pero la respuesta de la Comisi¨®n Europea ha sido negativa.

Portugal debe presentar un presupuesto con un d¨¦ficit inferior al 3%, algo a lo que est¨¢ comprometido tambi¨¦n el PS; una regla de la que discrepan -o discrepaban- tanto PC como BE.

Por la tarde, Costa fue recibido por el presidente de la Rep¨²blica, An¨ªbal Cavaco Silva, a quien inform¨® que estaba trabajando para formar? un "Gobierno com¨²n" dentro del euro y respetando los compromisos internacionales, como Cavaco hab¨ªa exigido.