Donald Trump intenta reconciliarse con los hispanos en Florida

En su primera visita a Florida como aspirante del Partido Republicano, Donald Trump ha intentado algo que a estas alturas parece imposible: reconciliarse con la mayor¨ªa del electorado hispano de Estados Unidos. Tras los comentarios xen¨®fobos que han capitalizado su campa?a electoral, con propuestas estramb¨®ticas como construir un muro en la frontera con M¨¦xico, el magnate ha reiterado una y otra vez su supuesto cari?o a los hispanos, que, seg¨²n muestran las encuestas, desconf¨ªan ampliamente de ¨¦l. En Miami, Trump ha repetido este mensaje en un mitin al que han acudido centenares de personas para apoyarle, entre ellos numerosos hispanos. Un grupo de latinos intent¨® manifestar su desacuerdo con las soflamas contra la inmigraci¨®n de Trump, pero sus voces fueron acalladas de inmediato. Los discrepantes fueron expulsados del recinto, en alg¨²n caso a empujones, unos malos modos que fueron celebrados por parte de los asistentes al acto.

Para su primer acto de campa?a en un estado en el que el peso hispano es enorme, Trump eligi¨® un lugar en el que se siente c¨®modo: el Trump National Doral, un complejo tur¨ªstico del que es propietario y que incluye terrenos para jugar al golf. Su discurso ten¨ªa el inter¨¦s de saber qu¨¦ mensaje lanzaba a los hispanos y a dos de sus principales rivales en la carrera para ser el candidato republicano en las elecciones de 2016, el exgobernador de Florida Jeb Bush y el senador por este estado Marco Rubio, de ascendencia cubana.

En una intervenci¨®n de poco m¨¢s de una hora, Trump dio por seguro que ganar¨¢ las pr¨®ximas elecciones y que lo har¨¢, adem¨¢s, con el apoyo de los hispanos, cuyo voto puede ser decisivo en los comicios de 2016. Declar¨® una vez m¨¢s su cari?o hac¨ªa una comunidad que est¨¢ mayoritariamente de u?as con ¨¦l y dio por seguro que los hispanos que residen legalmente en Estados Unidos son los primeros que quieren que se frene la inmigraci¨®n ilegal.

Sobre Bush y Rubio, cuyas carreras pol¨ªticas est¨¢n construidas en Florida, el multimillonario quiso subrayar que va por delante de ellos en las encuestas en este estado. Cuando mencion¨® a Bush, que hasta hace unos meses parec¨ªa el candidato favorito para la nominaci¨®n republicana, el auditorio empez¨® a abuchear casi al un¨ªsono su nombre.

Los discrepantes fueron expulsados del recinto, en alg¨²n caso a empujones

Trump, adem¨¢s, rest¨® importancia a las encuestas publicadas en los ¨²ltimos d¨ªas, que apuntan a que su candidatura se est¨¢ desinflando un poco, en beneficio del m¨¦dico Ben Carson, despu¨¦s de haber gozado de importantes ventajas sobre el resto de competidores republicanos a lo largo del pasado verano.

El acto que celebr¨® Trump en Miami empez¨® con una notable pol¨¦mica ya que la organizaci¨®n prohibi¨® la entrada de dos periodistas de la cadena Univisi¨®n, con la que el magnate tiene un contencioso despu¨¦s de que la televisi¨®n hispana rompiera un acuerdo por los comentarios xen¨®fobos del aspirante republicano. El pasado agosto, Trump ya expuls¨® de una rueda de prensa al periodista de Univisi¨®n Jorge Ramos, quien quiso interrogarle sus planes migratorios.