Israel mantiene viva la memoria de Rabin 20 a?os despu¨¦s de su muerte
Homenaje en un clima de divisi¨®n al primer ministro asesinado por un extremista jud¨ªo
Como desde hace generaciones en Estados Unidos con la fecha del magnicidio de John F. Kennedy, todos los israel¨ªes de m¨¢s de 30 a?os recuerdan qu¨¦ hac¨ªan exactamente el 4 de noviembre de 1995. La noche del s¨¢bado en que el primer ministro Isaac Rabin fue asesinado a tiros por el extremista jud¨ªo Yigal Amir tras haber participado en una concentraci¨®n por la paz en Tel Aviv se ha quedado grabada para siempre en su recuerdo.
De acuerdo con el calendario jud¨ªo, Israel ha empezado ya a conmemorar el 20? aniversario de la muerte de Rabin, el militar que luch¨® por la independencia (1948) y prepar¨® la victoria en la Guerra de los Seis D¨ªas (1967) y el dirigente pol¨ªtico que negoci¨® los Acuerdos de Oslo (1993) con los palestinos y la paz con Jordania (1994). En el marco de una larga ola de violencia, Jerusal¨¦n fue escenario este lunes de los actos institucionales, que se completar¨¢n el s¨¢bado con un homenaje popular, en el que tienen previsto intervenir el expresidente de EE UU Bill Clinton, en la misma plaza de Tel Aviv en la que cay¨® muerto por los disparos de un fan¨¢tico y que hoy lleva su nombre.
El presidente de Israel, Reuven Rivlin, el primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, y los m¨¢s altos cargos del Estado asistieron junto con la familia de Rabin a una ceremonia en el monte Herzl, el recinto memorial nacional de Jerusal¨¦n donde reposan los restos del primer ministro asesinado y de su esposa, Leah, fallecida cinco a?os despu¨¦s. Dalia Rabin, hija de ambos, lament¨® que Israel no haya aprendido la lecci¨®n del asesinato del primer ministro laborista. ¡°Hoy no tenemos proceso de paz, sigue habiendo terrorismo y la sangre sigue derram¨¢ndose, mientras crece el odio¡±, dijo, tras aludir a las fallas ideol¨®gicas que socavan la unidad de la sociedad israel¨ª.
Tanto el presidente Rivlin, que ensalz¨® el papel de Rabin como ¡°reunificador y libertador de Jerusal¨¦n¡± en 1967, como el primer ministro Netanyahu, que compar¨® ¡°el desaf¨ªo a la democracia que supuso su asesinato¡± con el reto actual de ¡°la lucha contra los cuchillos y las piedras¡±, evitaron extenderse sobre el proceso de paz que el l¨ªder laborista alumbr¨® hace dos d¨¦cadas y que hoy parece estar pr¨¢cticamente muerto.
En un acto en memoria de Rabin celebrado la noche anterior en la residencia presidencial en Jerusal¨¦n, Rivlin hab¨ªa rechazado las peticiones que desde la extrema derecha plantean un indulto para Yigal Amir. ¡°Mientras yo sea presidente, el asesino no saldr¨¢ en libertad. Que se pudra mi mano si llego a firmar alg¨²n d¨ªa su indulto¡±, enfatiz¨® en presencia de la familia del primer ministro laborista.
A su lado se encontraba Sim¨®n Peres, expresidente, ex primer ministro y el jefe de la diplomacia israel¨ª que dise?¨® en el Gobierno de Rabin el acuerdo con los palestinos y la paz con Jordania. Fue el ¨²nico foro en el que, seg¨²n la agenda oficial, se le reserv¨® una intervenci¨®n en la semana de homenajes. ¡°Ahora, lo mismo que entonces, no podemos ni debemos olvidar la desenfrenada agitaci¨®n contra un primer ministro democr¨¢ticamente elegido¡±, dijo Peres ¨Cque comparti¨® el Nobel de la Paz con Rabin y con el l¨ªder palestino Yasir Arafat¨C la noche del domingo, en alusi¨®n a la campa?a de descr¨¦dito contra el proceso de paz que fue encabezada por Netanyahu, en aquel momento l¨ªder de la oposici¨®n.
Un pleno extraordinario de la Knesset (Parlamento) complet¨® este lunes el homenaje oficial al dirigente asesinado, cuya figura se evoca estos d¨ªas en las escuelas de Israel. El l¨ªder de la oposici¨®n, el laborista Isaac Herzog, record¨® a Netanyahu en la C¨¢mara que Rabin intent¨® impedir que surgiera un Gran Israel, con la anexi¨®n de los territorios palestinos, y por ello fue llamado traidor y asesinado.
En una extensa semblanza de Rabin publicada por el diario Haaretz, Yossi Beilin ¡ªentonces viceministro de Exteriores y verdadero arquitecto de los Acuerdos de Oslo junto con el hoy presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas¡ª reconoce que el primer ministro laborista fue ¡°un soldado de la paz que, al final de su vida tom¨® valerosas decisiones hist¨®ricas". Beilin, hoy apartado de la pol¨ªtica, revela que, poco despu¨¦s del magnicidio, Leah Rabin le confes¨® que su marido viv¨ªa el presente, y que su gesti¨®n estaba marcada por el d¨ªa a d¨ªa. ¡°Como mucho. hac¨ªa planes para las dos pr¨®ximas semanas¡±, le asegur¨®.
Hoy muchos en Israel se preguntan qu¨¦ habr¨ªa pasado si el jefe del Gobierno de los Acuerdos de Oslo no hubiera sido asesinado. ?Se habr¨ªan cumplido las cl¨¢usulas que anticipaban la creaci¨®n de un Estado palestino? ?Vivir¨ªan ahora los israel¨ªes en paz con sus vecinos? Seg¨²n dijo su viuda, ni el propio Rabin se lo planteaba.
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