Peronismo y kirchnerismo se unen para derribar la imagen de Macri
La campa?a argentina entra en la guerra sucia en la que cada minuto vale, incluso los intermedios de los partidos de f¨²tbol
La gran inc¨®gnita pol¨ªtica de?las elecciones argentinas parece haber quedado resuelta: Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner quiere ganar la segunda vuelta. Hab¨ªa dudas muy serias, sobre todo mientras mantuvo su prolongado silencio. Algunos interpretaban que prefer¨ªa que su candidato, Daniel Scioli, perdiera frente a Mauricio Macri para poder convertirse ella en la l¨ªder de la oposici¨®n y as¨ª volver dentro de cuatro a?os como la chilena Michelle Bachelet. Pero esas dudas parecen despejadas. Fern¨¢ndez de Kirchner ha lanzado una orden clara al kirchnerismo: hay que ganar cueste lo que cueste. Lo hizo el jueves, y desde ese d¨ªa la campa?a contra Macri arrecia en todos los grupos fieles a la presidenta, en especial La C¨¢mpora. Con la idea de que Macri viene a hacer un ajuste e incluso una pol¨ªtica econ¨®mica neoliberal como la de la ¨²ltima dictadura militar (1976-1983) el kirchnerismo intenta evitar una derrota el 22 de noviembre que ahora mismo los analistas dan como muy probable.
Las diversas ramas del peronismo y de los grupos que han apoyado todos estos a?os a la presidenta, seg¨²n se?alan personas del kirchnerismo duro, est¨¢n divididas en torno a Scioli. Hay muchas tensiones internas porque est¨¢ asumido que es un mal candidato que no ha sido capaz de aglutinar ni siquiera a todos los votantes fieles a la presidenta y sobre todo no ha ampliado ni un gramo el espacio kirchnerista, que en teor¨ªa era su principal virtud como hombre muy a la derecha de los Kirchner. La indignaci¨®n con Scioli es muy fuerte en el mundo kirchnerista no solo pol¨ªtico, sino tambi¨¦n en el influyente entorno cultural. Sin embargo, la orden de la presidenta fue tajante el jueves, cuando estuvo m¨¢s de tres horas dando discursos en la Casa Rosada para sus grupos m¨¢s fieles y en especial para los j¨®venes: hay que conservar ¡°el proyecto¡±, hay que parar a Macri.
El efecto fue inmediato. La C¨¢mpora se est¨¢ moviendo por todo el pa¨ªs con pintadas contra Macri y folletos como el que repart¨ªan el domingo a la salida del estadio de Boca Juniors en el partido clave en el que se alz¨® con el campeonato argentino: ¡°Tus derechos o Macri¡±. En ¨¦l se detalla que si gana empeorar¨¢ la salud, la educaci¨®n, la jubilaci¨®n, y el empleo. As¨ª, el kirchnerismo se encarga de la campa?a dura contra Macri mientras Scioli, con un discurso m¨¢s moderado, trata de atraer a los votantes peronistas que apoyaron a Sergio Massa, que logr¨® un 21% de respaldos y ahora est¨¢ fuera de la segunda vuelta.
El kirchnerismo trata de convencer a los ciudadanos de que con Macri vienen las recetas neoliberales de los a?os 90
Pero el kirchnerismo ide¨® no se qued¨® solo en los panfletos en la calle: ide¨® otro sistema a¨²n m¨¢s eficaz, siempre con el f¨²tbol de trasfondo, en un pa¨ªs en el que el deporte rey y la pol¨ªtica son casi la misma cosa. Millones de argentinos estaban viendo el domingo el Boca-Tigre que defin¨ªa el campeonato. Lo emit¨ªa como siempre la televisi¨®n p¨²blica. El Estado paga a los equipos 200 millones de d¨®lares al a?o para emitirlo gratis. En el intermedio se dan publicidades oficiales de la presidenta, un mecanismo pol¨ªtico de enorme eficacia. Esta vez fueron m¨¢s lejos. Nada m¨¢s empezar el descanso, la televisi¨®n p¨²blica emiti¨® un montaje en el que se comparaban los planes del ministro de Econom¨ªa de la dictadura, Mart¨ªnez de Hoz, con los proyectos de Macri.
La guerra es ya sin cuartel, con los medios p¨²blicos y los privados cercanos al Gobierno lanzados para atacar al l¨ªder de la oposici¨®n y los medios cr¨ªticos con el kirchnerismo, todos privados, con un tono cada vez m¨¢s duro. Se da la paradoja de que el kirchnerismo trata de convencer a los ciudadanos de que con Macri vienen las recetas neoliberales de los 90 pero quien gobernaba en esos a?os era el peronismo y precisamente Scioli entr¨® en pol¨ªtica en ese momento de la mano de Carlos Menem tambi¨¦n en campa?a a favor del candidato. Los v¨ªdeos de Scioli defendiendo las privatizaciones menemistas circulan tanto en Argentina estos d¨ªas como los de Macri reinvindicando pol¨ªticas liberales o rechazando las nacionalizaciones kirchneristas. Todo se mezcla en la pol¨ªtica argentina, que lucha ahora para ver qu¨¦ miedo puede m¨¢s entre los ciudadanos.
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