Correa busca la reelecci¨®n indefinida

La Asamblea Nacional de Ecuador ha comenzado el proceso para cambiar en las pr¨®ximas semanas, sin refer¨¦ndum, la Constituci¨®n de 2008. El lunes se reactiv¨® la comisi¨®n creada para tramitar las 16 enmiendas constitucionales planteadas en 2014 por el bloque legislativo de Alianza Pa¨ªs, el movimiento pol¨ªtico del presidente Rafael Correa, que tiene mayor¨ªa absoluta en el Legislativo. La medida m¨¢s pol¨¦mica es la que pretende permitir la reelecci¨®n indefinida en el cargo de presidente.

La comisi¨®n presentar¨¢ el informe para el segundo y definitivo debate a finales de noviembre, para que las enmiendas se aprueben antes de que termine 2015. Los asamble¨ªstas del oficialismo est¨¢n cumpliendo con los plazos previstos para que la enmienda m¨¢s pol¨¦mica, la que permitir¨¢ la reelecci¨®n indefinida de las autoridades de elecci¨®n popular, surta efecto en las elecciones de 2017 y desbloquee la posible postulaci¨®n de Rafael Correa, que ya ha tenido dos periodos presidenciales ¡ªuna situaci¨®n similar a la que se vive en Bolivia con el mandato de Evo Morales¡ª. El C¨®digo de la Democracia es claro en esto y se?ala que cualquier reforma que afecte a un proceso electoral debe hacerse como m¨ªnimo un a?o antes.

Correa, sin embargo, ha negado tener inter¨¦s en buscar nuevamente la presidencia, pero tambi¨¦n ha dicho que estar¨¢ donde su movimiento pol¨ªtico lo requiera. A esta ambig¨¹edad se ha sumado la sugerencia que ha hecho el mandatario a sus asamble¨ªstas en la ¨²ltima semana: incluir una disposici¨®n transitoria que impida que los posibles beneficiarios de la reelecci¨®n indefinida se postulen en las elecciones generales de 2017. Si su petici¨®n es tomada en cuenta, ¨¦l y muchos asamble¨ªstas que ahora mismo tramitan la enmienda constitucional no podr¨ªan optar a la reelecci¨®n en los siguientes comicios.

Para muchos analistas la declaraci¨®n del presidente es una maniobra de distracci¨®n y no tiene lugar en esta etapa del proceso. El legislador de la oposici¨®n Luis Fernando Torres califica la iniciativa del presidente de ¡°un globo de ensayo¡± y argumenta que no se puede incluir algo que no fue parte del primer debate legislativo. Para el jurista y acad¨¦mico Farith Simon, ¡°es una buena manera de bajar la presi¨®n pol¨ªtica en v¨ªsperas del segundo debate¡±. Queda entonces por ver el tratamiento que dar¨¢ el bloque oficialista a la petici¨®n del l¨ªder de su movimiento pol¨ªtico.

Las otras enmiendas pol¨¦micas tienen que ver con el cambio del rol de las Fuerzas Armadas, que pasar¨ªan a ocuparse de la seguridad interna; la disminuci¨®n de las competencias de la Contralor¨ªa, que dejar¨ªa de ver c¨®mo se gasta el dinero p¨²blico; y la declaraci¨®n de la comunicaci¨®n como un servicio p¨²blico, que es le¨ªdo como una estrategia para aumentar el control del Estado sobre los medios de comunicaci¨®n privados.

Una parte de la ciudadan¨ªa se ha manifestado en contra de los cambios constitucionales y hay un consenso entre la oposici¨®n, que exige una consulta popular. La semana pasada hubo una marcha de rechazo a las enmiendas y habr¨¢ otra el pr¨®ximo 24 de noviembre. En las redes sociales, adem¨¢s, circulan v¨ªdeos de personalidades que piden el archivo de las enmiendas.

En su defensa, los asamble¨ªstas del oficialismo insisten en que han socializado las enmiendas en las 24 provincias, que han hecho casi 170 reuniones y di¨¢logos con varios sectores sociales, y que el pa¨ªs ha aprobado que la Constituci¨®n cambie. El aparato de comunicaci¨®n del Estado se ha aplicado a fondo para difundir esto a trav¨¦s de una p¨¢gina web (enmiendas.ec) que explica, entre otras cosas, por qu¨¦ no se hace una consulta popular y cu¨¢les son los beneficios de cada uno de los cambios.