Macri gana en Argentina y pone fin al kirchnerismo tras 12 a?os
El candidato liberal logra una ajustada victoria de 51,4% contra el 48,6% de Scioli
El liberal Mauricio Macri (Cambiemos) ser¨¢ el nuevo presidente de Argentina, despu¨¦s de imponerse por una ajustada diferencia al peronista Daniel Scioli (Frente para la Victoria) por 51,4% a 48,6%, al 99% escrutado. Macri gan¨® por la m¨ªnima, menos de tres puntos, poco m¨¢s de 700.000 votos en un pa¨ªs con 32 millones de personas llamadas a las urnas. Es mucho menos de lo que esperaba. Pero gan¨®, y no pas¨® nada, a pesar de que el pa¨ªs se parti¨® a la mitad. Argentina vivi¨® este giro radical al centro-derecha tras 12 a?os de kirchnerismo con una inesperada calma. Despu¨¦s de una campa?a tensa, las elecciones fueron muy tranquilas, mucho m¨¢s de lo que el ajustado resultado har¨ªa esperar. Parec¨ªa como si todo estuviera ya decidido desde la primera vuelta, donde se produjo el vuelco real. Macri se convirti¨® entonces en favorito y no se ha bajado de ese pedestal.
Esta Argentina no va a ser fruto de un iluminado que tiene todas las soluciones" Mauricio Macri
Asumida la victoria de Macri, la ¨²nica duda que quedaba por resolver era qu¨¦ distancia lograba con su rival, un dato importante para saber con qu¨¦ fuerza arrancaba su Gobierno en una situaci¨®n econ¨®mica delicada. Ahora se sabe que el margen es m¨ªnimo. El kirchnerismo perdi¨® pero resisti¨® con fuerza despu¨¦s del desgaste de 12 a?os de Gobierno. Los macristas atribu¨ªan este recorte final al ¨¦xito de la campa?a del miedo que promovi¨® Scioli en las ¨²ltimas semanas y que hizo mella aparentemente en un parte de la poblaci¨®n, sobre todo la m¨¢s pobre. Scioli logr¨® as¨ª ganar en la provincia de Buenos Aires, la m¨¢s sensible a este tipo de mensajes, seg¨²n los macristas.
Consciente de esa limitaci¨®n, tanto Macri como su vicepresidenta, Gabriela Michetti, lanzaron mensajes de concordia a los que no les han votado. "Muchos hogares humildes est¨¢n preocupados. Quiero decirles que no tienen nada que temer", asegur¨® Michetti. "Les pido a los que no nos votaron que se sumen a este cambio. Esta Argentina no va a ser fruto de un iluminado que tiene todas las soluciones. Eso no existe. Mi tarea es ayudarlos a encontrar el camino", asegur¨® Macri en un discurso con poco contenido pol¨ªtico y centrado en la idea de "unir a los argentinos".
El entusiasmo de sus militantes, que hace pocas semanas no so?aban con esta victoria, era enorme. Las calles de Buenos Aires, la ciudad m¨¢s macrista, se llenaron de coches que tocaban sus bocinas alegres. Pero Macri y los suyos forzaron una cierta contenci¨®n a la vista de que el resultado era ajustado. La fiesta termin¨® muy pronto y aunque el candidato bail¨®, como es habitual, todo destilaba una voluntad de evitar excesos. "Este cambio no puede detenerse en revanchas ni ajustes de cuentas", remat¨® el nuevo presidente de electo. Un mensaje claro de mano tendida al kirchnerismo. Macri est¨¢ en minor¨ªa en el Congreso y el Senado y va a necesitar mucha negociaci¨®n para gobernar.
El ganador reivindic¨® el origen emigrante de este pa¨ªs latinoamericano. ?l mismo es hijo de un italiano que lleg¨® a Argentina con 18 a?os y se hizo millonario. "Nuestros abuelos, nuestros padres cruzaron un oc¨¦ano en barco buscando una oportunidad, sin saber qu¨¦ iban a encontrar. Nos toca continuar esa posta", sentenci¨®. Macri, que arranc¨® su discurso con una larga lista de agradecimientos a su familia, colaboradores y amigos, incluida su secretaria, como si hubiera ganado un premio, termin¨® con un mensaje a los militantes: "Ustedes hicieron posible lo imposible. Pido a Dios que me ilumine para ayudar a cada argentino a encontrar su forma de progresar. Les pido por favor que no me abandonen. ?Vamos Argentina!".
Mientras, Daniel Scioli reconoci¨® la derrota y tambi¨¦n pidi¨® a Dios que ayude a Macri a encontrar el camino para ayudar a los argentinos. En un rasgo m¨¢s de los muchos que acercan a estos dos pol¨ªticos, ambos son cat¨®licos y practicantes y tienen una posici¨®n similar en contra del aborto incluso en caso de violaci¨®n, por ejemplo. Eso s¨ª, Scioli reivindic¨® al peronismo como el partido de las clases m¨¢s pobres y asegur¨® que ¨¦l va a "defender a los trabajadores". A su lado las caras de referentes del kirchnerismo como Carlos Zannini mostraban la desolaci¨®n de la derrota. La mujer y la hija de Scioli vest¨ªan de negro, casi de luto. Es un golpe muy duro para quien ha controlado el poder durante 12 a?os y hasta hace un mes estaba seguro de la victoria.
En la noche electoral, Macri estuvo acompa?ado en Buenos Aires por Lilian Tintori, la esposa del preso pol¨ªtico venezolano Leopoldo L¨®pez. Esta presencia demuestra que Macri va muy en serio en su intenci¨®n de pedir en la pr¨®xima cumbre de Mercosur, el 21 de diciembre, la suspensi¨®n de Venezuela como miembro de bloque por la presunta violaci¨®n de la cl¨¢usula democr¨¢tica que lo rige. Depender¨¢ del resultado en las elecciones venezolanas del 6 de diciembre y de la actitud de Nicol¨¢s Maduro, pero es probable que esta sea su primera gran decisi¨®n internacional.
El cambio lleg¨® a Argentina con una sensaci¨®n de normalidad absoluta, sin denuncias de fraude, sin tensiones, y con una jornada soleada en la capital. Nada que ver con las primarias de agosto, cuando se vot¨® despu¨¦s de una de las peores inundaciones que se recuerdan en la provincia de Buenos Aires y hubo denuncias de todo tipo. Todo apuntaba entonces a una victoria del oficialismo. Pero poco a poco Macri fue ganando terreno y Scioli perdi¨¦ndolo, en un ambiente de hartazgo del kirchnerismo que las encuestas no lograron detectar.
Macri logr¨® forzar la segunda vuelta el 25 de octubre con un resultado inesperado ¡ª gan¨® por una distancia ajustada similar a la de esta segunda vuelta, 37% a 34%i¡ª y desde entonces no ha parado de crecer mientras Scioli y el oficialismo cambiaban por completo la estrategia, a la desesperada, para intentar animar el voto anti-Macri y convencer a los argentinos, sobre todo a las clases populares, de que ten¨ªan que ir a votar para defender sus planes sociales y los derechos adquiridos en estos a?os.
Toda la campa?a estuvo centrada en la idea de que con Mauricio Macri ven¨ªa un cataclismo, pero el d¨ªa en que realmente se vot¨®, no pas¨® nada. Incluso Daniel Scioli, que durante tres semanas trat¨® de convencer a los argentinos de que su rival es ¡°un peligro¡±, se olvid¨® ayer de esa guerra e incluso trat¨® de recuperar su amistad con Macri. Ambos eran amigos hace 30 a?os, pertenecen al mismo c¨ªrculo de hijos de empresarios millonarios y son de la misma generaci¨®n, pero en estos ¨²ltimos d¨ªas todo parec¨ªa roto entre ellos.
Scioli se encarg¨® ayer de recordar que Macri estuvo en su boda y que ¨¦l estuvo con su rival pocas horas despu¨¦s de que fuera liberado de un dur¨ªsimo secuestro que sufri¨® en 1991. Ten¨ªan una amistad estrecha. Macri insiste en que Scioli ha sido ¡°una gran decepci¨®n¡± por la campa?a dur¨ªsima que ha protagonizado en los ¨²ltimos d¨ªas. ¡°Est¨¢ lanzando la imagen de que soy una mala persona que va a hacer da?o a su pa¨ªs¡±, se quejaba el jueves.
Esta batalla entre dos hombres de la ¨¦lite econ¨®mica del pa¨ªs, que vienen de mundos ajenos a la pol¨ªtica ¡ªMacri del f¨²tbol, como presidente de Boca Juniors, y Scioli de un deporte para millonarios como las lanchas fueraborda¡ª ha llegado a su fin y Scioli busca la reconciliaci¨®n e incluso habl¨® de la relaci¨®n de sus mujeres. "Karina conoce a Juliana hace muchos a?os y esas son las cosas que perduran, la pol¨ªtica es una circunstancia", sentenci¨®. Scioli trat¨® de utilizar a su favor la figura del Papa, cercano al peronismo, y volvi¨® a citar las palabras de Francisco: ¡°Voten en conciencia¡±.
Y sin embargo, pese a esta aparente tranquilidad en un pa¨ªs de larga tradici¨®n democr¨¢tica interrumpida por varias dictaduras en el siglo XX, el giro que da Argentina es notable. Sin soluci¨®n de continuidad se pasa de 12 a?os de kirchnerismo, en los ¨²ltimos tiempos girado a la izquierda, y una pol¨ªtica econ¨®mica heterodoxa centrada en un claro proteccionismo para mantener la industria local y los empleos y un control f¨¦rreo de la venta de d¨®lares, a un candidato como Macri ajeno al peronismo y al radicalismo que viene de la derecha y defiende posiciones liberales, aunque ahora se define como ¡°desarrollista¡±.
El entorno de Macri asegura que ¨¦l sabe a qu¨¦ pa¨ªs se va a enfrentar y no va hacer un giro de 180 grados, que mantendr¨¢ un cierto proteccionismo y har¨¢ las reformas muy despacio, con acuerdo con los sindicatos. Pero lo cierto es que en el mundo econ¨®mico se asume que vendr¨¢n curvas en los pr¨®ximos meses. El pa¨ªs entra as¨ª en una nueva etapa que nunca hab¨ªa explorado, un gobierno ajeno al radicalismo y al peronismo que dominaron los ¨²ltimos 70 a?os, aunque Macri tiene algunos componentes de ambos en sus equipos.
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