Ocho palabras para la discordia en el pacto de Par¨ªs sobre cambio clim¨¢tico

"And parties in a position to do so" ("y partes [pa¨ªses] en posici¨®n de hacerlo"). Solo son ocho palabras, pero centran una parte determinante de las discusiones del pacto que se est¨¢ intentando cerrar esta semana en Par¨ªs contra el calentamiento global. Esta frase de ocho palabras est¨¢ salpicada por todo el borrador de pacto que los ministros de 195 Gobiernos est¨¢n negociando. Aparece cuando en el texto se abordan las obligaciones de financiaci¨®n, de reducci¨®n de emisiones, de transparencia¡­ Es la frase de la discordia, la que los Estados industrializados quieren incluir y la que China y muchos pa¨ªses del bloque de econom¨ªas en v¨ªas de desarrollo se resisten a aceptar. Si se incluye, supondr¨ªa que algunos pa¨ªses que cl¨¢sicamente no se han considerado industrializados ¨Centre ellos China, el principal contaminante ahora- tambi¨¦n est¨¦n vinculados en los esfuerzos por controlar el calentamiento global.

Las conversaciones de Par¨ªs tienen como base un convenio internacional de 1992, la convenci¨®n marco de la ONU sobre Cambio Clim¨¢tico. Ese texto tiene dos anexos en los que figuran los considerados pa¨ªses industrializados entonces, b¨¢sicamente EE UU, la actual Uni¨®n Europea, Canad¨¢ y Jap¨®n. Sobre el listado de pa¨ªses desarrollados recayeron a partir de la firma del protocolo de Kioto, en 1997, las cargas, aunque Estados Unidos decidi¨® finalmente no sumarse a aquel acuerdo.

La discusi¨®n sobre qui¨¦n debe asumir m¨¢s esfuerzos se conoce como "diferenciaci¨®n". Implica que los pa¨ªses desarrollados, por ser los que iniciaron el fen¨®meno del cambio clim¨¢tico con sus emisiones de gases de efecto invernadero, son los que tienen que asumir el peso de los esfuerzos.

"La Uni¨®n Europea quiere que la diferenciaci¨®n se vaya diluyendo", explica Valvanera Ulargui, responsable de la Oficina Espa?ola de Cambio Clim¨¢tico. "El mundo ha cambiado mucho desde 1992", ha se?alado este lunes el comisario europeo de Clima y Energ¨ªa, Miguel Arias Ca?ete. "Todo pa¨ªs en posici¨®n de hacerlo debe aportar", ha reiterado al hablar de financiaci¨®n citando casi palabra por palabra la frase de la discordia. Arias Ca?ete ha recordado que China es ya el primer emisor mundial.

En las primeras conversaciones ministeriales celebradas en Par¨ªs, la posici¨®n respecto a este asunto de China ha sido "dura", seg¨²n indican fuentes de estas negociaciones. Estas fuentes interpretan que, sobre todo en financiaci¨®n, el pa¨ªs asi¨¢tico no quiere estar vinculado igual que el resto de Estados industrializados. No tanto porque no est¨¦ dispuesto a aportar fondos para ayudar a otras econom¨ªas ¨Calgo que ya hace- sino porque se le condicione internacionalmente el destino del dinero que ponga sobre la mesa.

La coletilla de los pa¨ªses "en posici¨®n de hacerlo" es una precauci¨®n que buscan los Estados industrializados para el futuro. Incluirla no tendr¨ªa efectos inmediatos, porque habr¨¢ que determinar que se considera que un pa¨ªs est¨¦ en "posici¨®n" de contribuir, algo que se har¨ªa en pr¨®ximas cumbres. Pero, no incluirla, significar¨ªa cerrar una puerta para el futuro en un pacto como el de Par¨ªs, que aspira a ser la hoja de ruta durante las pr¨®ximas d¨¦cadas de la lucha contra el cambio clim¨¢tico en el mundo.

"Quien tiene paga, pero tambi¨¦n quien contamina paga". Este es el nuevo esp¨ªritu del pacto de Par¨ªs, seg¨²n explica Magdy Mart¨ªnez Solim¨¢n, uno de los responsables del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. Mart¨ªnez Solim¨¢n cree que China es consciente de que si no hay acuerdo en Par¨ªs "pierde mucho". "La contaminaci¨®n es ya un freno a su crecimiento", opina.

En 2009, los pa¨ªses desarrollados se comprometieron a aportar al llamado Fondo Verde 100.000 millones de d¨®lares en 2020. Eso no est¨¢ en discusi¨®n ahora. Lo que se discute es qu¨¦ ocurrir¨¢ a partir de ese a?o, cuando entrar¨ªa en vigor el acuerdo de Par¨ªs, y sobre todo qui¨¦n aportar¨¢ financiaci¨®n. El dinero debe destinarse a que los pa¨ªses con menos recursos se adapten al cambio clim¨¢tico y puedan transformar sus econom¨ªas para crecer sin emisiones de gases de efecto invernadero.