Tres de cada 10 militares mexicanos suspenden el examen de confianza
Las evaluaciones consisten en un estudio psicol¨®gico, socioecon¨®mico y de pol¨ªgrafo
El Ej¨¦rcito mexicano atraviesa una profunda crisis. El caso Tlatlaya y la desaparici¨®n de los normalistas de Ayotzinapa han puesto en duda la eficiencia de los militares en tareas de seguridad. Ahora se sabe que en sus evaluaciones internas tampoco han obtenido tan buenos resultados. En la ¨²ltima d¨¦cada tres de cada 10 militares que aspiran a asumir altos cargos en la Secretar¨ªa de la Defensa Nacional (Sedena) han reprobado los ex¨¢menes de idoneidad.
Las pruebas, llamadas de control y confianza, son similares a las que han hecho miles de polic¨ªas en M¨¦xico. Fueron instituidas por el gobierno anterior de Felipe Calder¨®n (2006-2012) en un intento por depurar las fuerzas locales corro¨ªdas por la corrupci¨®n, la ineficiencia y la falta de recursos. Las pruebas se hicieron obligatorias para la milicia desde diciembre de 2004, pero la Sedena comenz¨® a contabilizar los resultados a finales de 2006. Desde entonces, 30.152 efectivos han sido evaluados, y 10.001 han reprobado, el 32,7%, revela un informe de Defensa obtenido por la ley de transparencia.
Felipe Calder¨®n sac¨® a los militares de los cuarteles para llevarlos a las calles a enfrentar a los c¨¢rteles del narcotr¨¢fico. En enero de 2007, en un evento en Michoac¨¢n, el pol¨ªtico del conservador Partido Acci¨®n Nacional ¨Cvestido con un uniforme militar verde olivo¨C inici¨® la estrategia de seguridad que lo marcar¨ªa para siempre.
Desde finales de 2006, 30.152 efectivos han sido evaluados, y 10.001 han reprobado, el 32,7%
Desde entonces la participaci¨®n del Ej¨¦rcito en la lucha contra el narco se extendi¨® a todo el pa¨ªs. Ahora mismo hay entre 35.000 y 45.000 militares en las calles. Esto increment¨® los cuestionamientos de ciudadanos y organizaciones sociales. Desde 2006 la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos (CNDH) recibi¨® 9.000 denuncias de abusos cometidos por soldados, seg¨²n un informe de este a?o de Human Rights Watch (HRW). Los casos comenzaron a disminuir a partir de la salida de Felipe Calder¨®n de la presidencia en 2012. La CNDH report¨® que las quejas se redujeron en un 50% para 2013. Adem¨¢s la imagen del Ej¨¦rcito ha mejorado. El 72% de los mexicanos expresa una mayor confianza en la instituci¨®n, seg¨²n un estudio del Centro de opini¨®n p¨²blica del Congreso mexicano.
La infiltraci¨®n del crimen organizado en los diversos cuerpos de seguridad fue tan corrosiva, que en 2009 los polic¨ªas tambi¨¦n fueron obligados a someterse al test de control y confianza. Las pruebas terminaron de aplicarse apenas el a?o pasado y estas arrojaron que cuatro de cada 10 polic¨ªas federales no eran aptos para continuar dentro de la corporaci¨®n. Un resultado parecido al de los militares.
Ahora es posible conocer la confiabilidad del Ej¨¦rcito. Las pruebas consisten en un test psicol¨®gico, un estudio socioecon¨®mico y una prueba de pol¨ªgrafo. Un militar obtiene un resultado reprobatorio si en el examen psicol¨®gico muestra una deficiente capacidad intelectual, una baja tolerancia a la frustraci¨®n que no le permite controlar sus impulsos y evidencia conflictos con las figuras de autoridad; si en el socioecon¨®mico presenta problemas sociales, familiares o de salud; y si en el pol¨ªgrafo admite haber realizado conductas antisociales o dice mentiras.
El examen no es obligatorio para todos sus miembros. Las pruebas se realizan al personal ¡°que se encuentre propuesto para ocupar un cargo o comisi¨®n que por su importancia lo requiera o que sea considerado de responsabilidad¡±, establece el informe. Entre los evaluados hay generales, jefes, oficiales e integrantes de tropa, pero no se especific¨® cu¨¢ntos de ellos no acreditaron el examen. Ra¨²l Ben¨ªtez Manaut, investigador de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM) y experto en temas castrenses, explica que las evaluaciones del Ej¨¦rcito son muy estrictas. ¡°Se hacen fundamentalmente a los mandos altos (oficiales, mayores, generales) y a los que aspiran a un asenso. Las pruebas buscan corroborar que no haya involucramiento de ellos con organizaciones criminales; tambi¨¦n se investigan sus bienes patrimoniales¡±. En el caso de los soldados las pruebas se hacen pocas veces y son al azar porque es muy dif¨ªcil examinar a una rama tan grande dentro de la milicia.
Los cuestionamientos al Ej¨¦rcito no han cesado con el cambio de gobierno. En la administraci¨®n de Enrique Pe?a Nieto, los militares se vieron envueltos en ?el caso Tlatlaya
La Defensa es una instituci¨®n muy cerrada. No aclara si los reprobados fueron dados de baja o reubicados a otras ¨¢reas. ¡°Es muy dif¨ªcil saber qu¨¦ pasa con los que no aprueban, es informaci¨®n confidencial. Puede ser que haya tolerancia y sigan en activo o que sean destituidos¡±. Otro de los problemas de las evaluaciones es que no hay una ninguna instancia externa evaluadora, y esto hace que los resultados sean discrecionales, agrega Ben¨ªtez. Mar¨ªa Elena Morera, presidenta de Causa en Com¨²n, una organizaci¨®n que promueve la seguridad y el estado de derecho, coincide en que deber¨ªa haber una mayor transparencia para conocer el destino de los suspendidos. ¡°Tambi¨¦n es muy importante saber cu¨¢ntos de ellos ten¨ªan v¨ªnculos con el crimen organizado¡±, acota.
Los cuestionamientos al Ej¨¦rcito no han cesado con el cambio de gobierno. En la administraci¨®n de Enrique Pe?a Nieto, los militares se vieron envueltos en un esc¨¢ndalo may¨²sculo, el caso Tlatlaya. En junio de 2014, 22 personas murieron en una bodega ubicada en el municipio del Estado de M¨¦xico. La Sedena dijo que las muertes ocurrieron tras un enfrentamiento entre presuntos delincuentes y militares, pero la versi¨®n fue puesta en entredicho por la madre de una de las v¨ªctimas. La testigo aseguraba que solo un presunto delincuente hab¨ªa muerto en la balacera y que el resto fueron acribillados por los militares. En un informe la CNDH confirm¨® que al menos 12 civiles fueron ejecutados extrajudicialmente.
Las evaluaciones a los militares han incrementado. En 2014 la Sedena llev¨® a 6.116 de sus miembros a someterse a la bater¨ªa de pruebas de idoneidad. Entonces se obtuvo la mayor cantidad de reprobados en la ¨²ltima d¨¦cada: 2.056. Ben¨ªtez dice que estas pruebas son importantes porque son parte de los requisitos que impone Estados Unidos a M¨¦xico para la asignaci¨®n de recursos en seguridad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.