Los republicanos rechazan con dureza el control de armas
El debate sobre las armas irrumpe en la campa?a tras la iniciativa de Obama
La iniciativa del presidente Barack Obama, que intenta una vez m¨¢s, y sin contar con el Congreso, mejorar el control en el mercado de las armas, ha irrumpido en la campa?a presidencial. El dividido campo republicano ha respondido con una sola voz prometiendo que cualquier conservador que llegue a la Casa Blanca revertir¨¢, de inmediato, las medidas de Obama. Todos los candidatos dem¨®cratas, incluido Bernie Sanders, el m¨¢s reticente en la materia, han dado su apoyo a la iniciativa presidencial. En su frontal ofensiva conta la iniciativa de Obama, los republicanos cuentan con el apoyo irrestricto del poderoso lobby proarmas, la Asociaci¨®n Nacional del Rifle (NRA). Pero por primera vez, tambi¨¦n las organizaciones que buscan limitar las armas tienen m¨²sculo pol¨ªtico y, sobre todo, financiero.
Ted Cruz ni siquiera se dign¨® a comentar la avanzada intenci¨®n de Obama de ejercer sus poderes ejecutivos para aumentar los controles sobre los compradores de armas. El candidato presidencial republicano y senador por Texas ha llegado a promocionarse en esta campa?a presidencial mediante un v¨ªdeo en el que se le ve ¡°cocinando¡± una loncha de bacon enrollada en un rifle autom¨¢tico del que dispara varias rondas, hasta que el bacon sale humeante. Ahora, ha vuelto a optar con un gesto gr¨¢fico para dar su respuesta a los planes de Obama: Cruz rifar¨¢ un rifle con su emblema grabado en la culata de madera mientras Obama anuncia sus medidas.
El riesgo de una par¨¢lisis en los tribunales
El Gobierno de Obama tiene mala experiencia con sus acciones ejecutivas y los tribunales. Su acci¨®n m¨¢s ambiciosa, para frenar la deportaci¨®n de millones de indocumentados, est¨¢ paralizada por un juez. No obstante, el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, conf¨ªa en que las medidas sobre las armas no sufrir¨¢n el mismo destino. ¡°El presidente solo va a presentar acciones ejecutivas en cuya constitucionalidad conf¨ªa¡±, asever¨®.
El resto de candidatos republicanos ha preferido m¨¦todos m¨¢s comunes, aunque necesariamente m¨¢s sutiles, para condenar los planes de Obama aun antes de que estos sean desvelados. Pero el mensaje es un¨ªvoco: no rotundo a cualquier intento de tocar el sacrosanto derecho a portar armas, consagrado en la Segunda Enmienda de la Constituci¨®n. Y la promesa de revertirlas de inmediato si llegan a la Casa Blanca. ¡°No se preocupen, en mi primer d¨ªa en el Despacho Oval, esas ¨®rdenes ser¨¢n cosa del pasado¡±, asegur¨® el senador por Florida Marco Rubio en un mitin el fin de semana. Una promesa que tanto ¨¦l como otros candidatos pretenden mantener incluso aunque las medidas promulgadas por Obama y adelantadas este lunes son muy limitadas, destinadas sobre todo a extender los controles de antecedentes para garantizar que las personas que no deber¨ªan tener un arma ¡ªgente con antecedentes criminales o un historial de problemas mentales¡ª puedan hacerse con una. Medidas de ¡°sentido com¨²n¡±, como le gusta reiterar, pero que han chocado siempre con la oposici¨®n del Congreso.
No importa. Donald Trump, el todav¨ªa candidato republicano favorito en las encuestas, acus¨® este mismo lunes a Obama de dar ¡°peque?os pasos¡± que tienen como objetivo acabar con la Segunda Enmienda. ¡°Esto es otro paso para que no podamos adquirir armas¡±, denunci¨® en la cadena CNN.
Jeb Bush recrimin¨® a Obama intentar ¡°arrebatarles las armas a ciudadanos cumplidores de la ley¡±, mientras que el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, lo acus¨® de ¡°actuar como si fuera un rey o un dictador¡±.
Con este rechazo frontal republicano, la pol¨¦mica est¨¢ servida en la campa?a presidencial que ahora s¨ª arranca en serio. Sobre todo porque todos los candidatos dem¨®cratas, incluido Bernie Sanders, el m¨¢s reticente a hablar de controles de armas, han dado su apoyo a la iniciativa de Obama. Tendr¨¢n para ello que enfrentarse tambi¨¦n al todopoderoso lobby de la NRA, que ya ha comenzado su campa?a para combatir las iniciativas del presidente. Pero quiz¨¢s las cosas est¨¦n cambiando, aunque sea un poco: seg¨²n The New York Times, la NRA ya no es el ¨²nico lobby con fuertes recursos para influir en el Congreso. Su n¨¦mesis, la organizaci¨®n que busca un mayor control de las armas Everytown, surgida tras la matanza de 20 ni?os y seis adultos en Newtown a finales de 2012, ha conseguido por primera vez acercarse peligrosamente al nivel de fondos con que cuenta la NRA, gracias, en buena parte, al generoso cheque que emiti¨® en su nombre el exalcalde de Nueva York y defensor de m¨¢s controles de armas, Michael Bloomberg.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.