¡°Empieza una revoluci¨®n¡±
Los partidarios de Sanders reivindican la contribuci¨®n de su candidato al debate dem¨®crata
Lo dice Josh Dawson, veterano de la guerra de Afganist¨¢n y converso ferviente a la fe de Bernie Sanders. ¡°En este pa¨ªs ha empezado una revoluci¨®n¡±. Cuando Sanders, el viejo socialista de Vermont, menciona en su discurso que al sistema se le puede plantar cara y votar, por ejemplo, no a la guerra de Irak ¡ªcomo ¨¦l hizo en su momento¡ª, el grito de apoyo m¨¢s alto sale de la garganta de Dawson. ¡°Bernie plant¨® cara al sistema y no hizo lo mismo Hillary¡±, recuerda Dawson, ahogado entre los aplausos del p¨²blico, sobre el expediente de la aspirante dem¨®crata a la nominaci¨®n.
Como todos los seguidores que aseguran ¡°sentir a Bernie¡± (Feel the Bern! es el eslogan de la campa?a), Dawson sue?a con transformar Am¨¦rica: ¡°Sin cerrar las puertas a los mexicanos ni estigmatizar a los musulmanes sino poniendo fin a los especuladores y haciendo que los poderosos rindan cuentas¡±.
Ellos se llaman revolucionarios. El propio Sanders, de 74 a?os, accede a los podios de los m¨ªtines preguntando si alguien quiere comenzar una revoluci¨®n. Clinton, de 68 a?os, los llama so?adores y asegura que no viven en ¡°el mundo real¡±. ¡°Ninguna revoluci¨®n ha empezado desde arriba¡±, recordaba Sanders en su ¨²ltimo mitin en Des Moines el domingo por la noche. ¡°Las revoluciones se empiezan desde abajo, por gente como vosotros, que uno a uno apuesta por el cambio¡±, exclamaba.
Haya pasado lo que haya pasado durante la noche de este lunes en Iowa, haya perdido o ganado el primer caucus de la naci¨®n, Sanders ya se ha apuntado una victoria. En Iowa se habla de revoluci¨®n. ¡°Si Iowa pudo elegir al primer presidente negro de la naci¨®n, puede tambi¨¦n transformar Am¨¦rica¡±, dice Jeremy Koch, que apunta: ¡°?Nada que ver con los hermanos, eh!¡±, en referencia a los Koch, billonarios de ultraderecha. ¡°Esto no acaba en Iowa, en Iowa habremos ganado de todas maneras sea cual sea el resultado final, ?pero si empezamos con m¨¢s de 40 puntos de desventaja!¡±, recuerda Nelly Noble.
Pocos j¨®venes
Poco importa a las legiones tocadas por la magia de la renovaci¨®n de Bernie Sanders que Hillary Clinton sea la favorita. ¡°Son j¨®venes y no quieren ni o¨ªr hablar de pragmatismo¡±, interviene Dave Cummings, 59, l¨ªder sindical. Eso es algo obvio en cada mitin de los dos candidatos. Quienes asisten para escuchar a la ex secretaria de Estado son mujeres de media edad y en su mayor¨ªa profesionales de la sanidad, la educaci¨®n¡ Los j¨®venes son pocos y las mujeres j¨®venes, menos. ¡°Ninguna mujer joven perdonar¨ªa lo que perdon¨® Hillary a su marido¡±, dice Noble, 23 a?os, a punto de concluir la universidad. D¨ªas antes, en un evento de Hillary Clinton en Cedar Rapids, Margaret Ghee-Sandfords defend¨ªa a la ex primera dama con el argumento del pragmatismo, palabra tan recurrente en el campo Clinton.
¡°No siempre se puede romper, la vida es perdonar y seguir adelante y crecer y ser mejor persona¡±, elaboraba esta maestra de 64 a?os. ¡°No tengo nada en contra de Bernie, me gusta lo que dice, pero creo que es el momento de una mujer en la Casa Blanca¡±, prosigui¨®, antes de concluir: ¡°Y qu¨¦ quiere que le diga, a diferencia de Bernie, yo estoy demasiado mayor para iniciar una revoluci¨®n¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.