Los vecinos de la Bas¨ªlica de Guadalupe, v¨ªctimas de la visita papal

El per¨ªmetro que circunda a la Bas¨ªlica de Guadalupe se transforma en una zona de desastre con cada magno evento religioso: el 12 de diciembre -d¨ªa de la Virgen-, las peregrinaciones intermedias mayores o la visita de un Papa a M¨¦xico. El pa¨ªs es preponderantemente cat¨®lico, pero no todos reciben estas visitas con benepl¨¢cito. Los vecinos de la zona sufren por el ruido, la basura y el estado de sitio en que se convierten sus colonias, en las que incluso tienen que pedir permiso para ingresar a su propia calle.

La fe mexicana es intensa e inexorable: varias veces al a?o miles de fieles acuden por cualquier medio a la Bas¨ªlica a visitar a Guadalupe: el 12 de diciembre para conmemorar el d¨ªa que, seg¨²n la leyenda, se le apareci¨® al ind¨ªgena Juan Diego en el cerro del Tepeyac, y a lo largo del a?o en diversas ¨Cy numerosas- peregrinaciones de di¨®cesis estatales. Este s¨¢bado 13, la Bas¨ªlica espera m¨¢s de un mill¨®n de cat¨®licos por la visita del papa Francisco, y los habitantes de la zona ya se preparan, resignados, para lo que viene.

¡°Cierre de calles, ruido, la colonia termina muy sucia, huele mal. Al d¨ªa siguiente ves que la gente hizo sus necesidades en la esquina de tu casa, dej¨® basura en su campamento en el parque¡­ Han llegado hasta con colchones que despu¨¦s dejan en la calle¡±, cuenta Erick V¨¢zquez, de la colonia Estrella, sobre el tormento que vive cada diciembre desde hace 37 a?os. Dice que los peregrinos arrojan tomates o huevos a los coches, en las horas previas a la celebraci¨®n se encuentra gente inhalando solventes o fumando marihuana, ¡°pero lo hacen porque est¨¢n en medio de una multitud sin ley¡±, lamenta. Erick y su familia son de origen cat¨®lico, por lo que asegura que sus quejas no son hacia la fe sino hacia la falta de civilidad: ¡°si la gente viniera porque vivo cerca del Estadio Azteca y los americanistas dejaran las calles de la misma forma, mi cr¨ªtica ser¨ªa la misma¡±.

Incluso, algunos habitantes de esa zona ¨Clos que pueden- trabajan desde casa el 11 y 12 de diciembre, pues entrar y salir de la zona les puede tomar varias horas. Hace unos 10 a?os, Erick ¡°se atrevi¨®¡± a salir a su trabajo en esos d¨ªas, y el regreso desde Ciudad Universitaria le tom¨® tres horas y media, cuando regularmente le toma una hora. Desde entonces, cuando ingresa a una empresa les advierte que en esos d¨ªas no est¨¢ disponible.

Caos en el reparto de accesos

La delegaci¨®n Gustavo A. Madero ¨Cdemarcaci¨®n en la que se ubica la Bas¨ªlica de Guadalupe- reparte tarjetones de acceso para los habitantes del per¨ªmetro alrededor del templo, a fin de que puedan entrar y salir de su propia calle en coche . En promedio, durante el evento religioso m¨¢s importante del a?o (el d¨ªa de la Virgen), se entregan entre 15.000 y 16.000 accesos, seg¨²n personal de la delegaci¨®n. Hasta este lunes hab¨ªan sido entregados 9.800 en los m¨®dulos ambulantes que recorrieron las colonias y en el fijo instalado en la delegaci¨®n; sin embargo, este martes el reparto se volvi¨® un caos cuando la delegaci¨®n inform¨® a una multitud de vecinos que ya no hab¨ªa tarjetones, que ¡°dejaran sus papeles y ellos los llamar¨ªan cuando hubiera¡±, aunque faltan dos d¨ªas para el cierre. Los ciudadanos protestaron, irritados por tener que salir de sus actividades en un d¨ªa h¨¢bil para hacer ese tr¨¢mite y que resulte infructuoso. Muchos de ellos hab¨ªan escuchado esa promesa ya dos veces. En el caso de los que viajan en transporte deber¨¢n caminar varias cuadras para llegar a casa, pues los camiones ser¨¢n desviados y las estaciones de Metro y Metrob¨²s cercanas estar¨¢n cerradas.

Despu¨¦s del bloqueo, la segunda queja m¨¢s importante de los vecinos de La Villa ¨Ccomo se conoce al cerro sobre el que est¨¢ la Bas¨ªlica y la zona circundante- es la suciedad que queda en las calles tras el paso de los fieles, entre los desechables que usan con la comida que se compran y lo que dejan al defecar sobre la acera. Entre cinco y siete millones de peregrinos llegan en promedio cada diciembre al ¨¢rea, dejando un promedio de 600 toneladas de basura en la v¨ªa p¨²blica, seg¨²n cifras de la Polic¨ªa local. Sin embargo, 2015 tuvo un r¨¦cord hist¨®rico de desechos: duplic¨® la cifra llegando a 1.207 toneladas.

Tambi¨¦n el comercio sufre con estos eventos y sufrir¨¢ durante la visita del papa Francisco: una dise?adora publicitaria cerrar¨¢ su negocio, ubicado a dos calles de la Calzada de Guadalupe ¨Cel tradicional paseo de los peregrinos hacia la Bas¨ªlica- porque no tendr¨¢ acceso desde el jueves. La propietaria de una tienda de abarrotes que est¨¢ justo frente a la delegaci¨®n (a unos metros del templo) asegura que Protecci¨®n Civil le pidi¨® cerrar su local desde el jueves y hasta el domingo temprano. Mart¨ªn no s¨®lo vive en la colonia Arag¨®n La Villa (donde se ubica el recinto) sino que adem¨¢s es transportista y su oficina est¨¢ all¨ª mismo, por lo que sus camionetas no podr¨¢n moverse en la zona y perder¨¢ al menos tres d¨ªas de trabajo.

Incluso los animales son v¨ªctimas del lado desafortunado de esta fiesta religiosa. Seg¨²n la organizaci¨®n Protecci¨®n al Perro Callejero, cientos de peregrinos llevan con ellos a sus perros ¨Cel tributo a la Virgen incluye viajar a pie desde sus comunidades hasta la Bas¨ªlica- pero regresan en autobuses, por lo que abandonan a los canes en esas calles. D¨ªas despu¨¦s, el servicio antirr¨¢bico debe recogerlos y terminan sacrificados.?