La ofensiva contra los homosexuales en Indonesia llega a los ¡®emojis¡¯

El hostigamiento a los gais en Indonesia ha llegado tambi¨¦n al mundo virtual. El Gobierno quiere prohibir los?emoji que muestran alg¨²n significado homosexual, y ha pedido a compa?¨ªas de mensajer¨ªa como Line o WhatsApp y a redes sociales como Facebook que los retire de las opciones para los usuarios en ese pa¨ªs. El Ejecutivo considera que s¨ªmbolos o pictogramas como la bandera arco¨ªris o dos hombres o dos mujeres de la mano no respetan "los principios culturales y normas religiosas" de Indonesia, con 250 millones de habitantes y un 89% de la poblaci¨®n musulmana.

La aplicaci¨®n de mensajer¨ªa Line ha cedido a las presiones y ha dicho que retirar¨¢ los s¨ªmbolos o pictogramas de tem¨¢tica LGTBI de su tienda online para Indonesia. La aplicaci¨®n de mensajer¨ªa instant¨¢nea ha publicado un comunicado online en el que piden disculpas a quienes se hayan sentido ofendidos por los emojis que, dicen, "muchas personas consideran sensibles".

Este es s¨®lo un cap¨ªtulo m¨¢s del acoso a la comunidad LGTBI (lesbianas, gais, transexuales y bisexuales e intersexuales) que las autoridades y los l¨ªderes religiosos han intensificado en los ¨²ltimos meses. En Indonesia, a diferencia de algunos de sus pa¨ªses vecinos, como Malasia, la ley no proh¨ªbe la homosexualidad; sin embargo, las normas est¨¢n lejos de reconocer o apoyar a los gais. La homofobia, denuncian las organizaciones de derechos humanos y quienes trabajan por los derechos sexuales, es cada vez mayor; sobre todo lejos de las grandes ciudades.

Hace unos meses, por ejemplo, la provincia de Aceh, la m¨¢s conservadora del pa¨ªs, comenz¨® a aplicar una ley que castiga con 100 golpes de vara a quien tenga relaciones con alguien de su mismo sexo. Y aunque la pena no se ha aplicado a¨²n, seg¨²n los grupos de defensa de los derechos humanos, ya ha habido detenciones; como la de dos chicas (18 y 19 a?os) por abrazarse en p¨²blico. En enero, el ministro de Educaci¨®n, Tecnolog¨ªa e Investigaci¨®n declar¨® que las universidades deber¨ªan expulsar a los gais o lesbianas que hiciesen alg¨²n tipo de demostraci¨®n p¨²blica de afecto en los campus. Esos gestos, dijo, "da?an la moralidad del pa¨ªs".

Tambi¨¦n el vicepresidente indonesio,?Jusuf Kalla, ha repetido varias veces ese razonamiento. El lunes fue m¨¢s all¨¢ y pidi¨® al programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDP, por sus siglas en ingl¨¦s) que no financie programas de apoyo a la comunidad LGTB en Indonesia. Este mi¨¦rcoles, el Consejo Indonesio de Ulemas ¡ªjunto a otras organizaciones isl¨¢micas¡ª respald¨® las acciones hom¨®fobas de las autoridades y reiter¨® que la homosexualidad, bisexualidad y transexualidad son har¨¢m [pecado], "un riesgo y pueden causar enfermedades infecciosas como el sida".

El director de la Asociaci¨®n Internacional de Gais, Lesbianas, Bisexuales y Transexuales (ILGA), Renato Sabbadini, alerta sobre la agudizaci¨®n del discurso hom¨®fobo en el pa¨ªs; sobre todo por parte de las autoridades. "Por desgracia, esta avalancha de declaraciones ofensivas ha ido acompa?ada de acciones discriminatorias hacia la comunidad LGTB, como es el caso de la prohibici¨®n de los emojis", dice Sabbadini, que incide en que los ataques a los gais son una violaci¨®n de los derechos humanos. "Cuanto m¨¢s crece una poblaci¨®n, mayor conocimiento tiene de la orientaci¨®n sexual, identidad de g¨¦nero, expresi¨®n de g¨¦nero y cuestiones de diversidad corporales; tambi¨¦n son m¨¢s fuertes son los intentos de desalentar la visibilidad de la comunidad LGBT", a?ade el presidente de ILGA.

Y cuando las declaraciones hom¨®fobas de algunos miembros de su Gobierno se suceden, el presidente Joko Widodo, Jokowi, se ha mantenido de perfil durante la pol¨¦mica. Jokowi, jefe de Gobierno desde 2014, y a quien se comparaba con el estadounidense Barack Obama no se ha pronunciado. La organizaci¨®n Human Rights Watch le ha recriminado su silencio y le ha enviado una carta en la que le exige que condene el discurso de odio de sus ministros y altos funcionarios. "El presidente ha defendido durante mucho tiempo el pluralismo y la diversidad. Esta es la oportunidad de demostrarlo", le ha pedido el responsable de LGTBI de la ONG, Graeme Reid.