Islamistas sirios, entre Occidente y Al Qaeda
La milicia salafista m¨¢s poderosa entre los rebeldes modera su discurso en busca de aliados
La guerra en Siria se ha convertido en un caos en el que proliferan los grupos armados opuestos al r¨¦gimen (ISIS, Al Qaeda, rebeldes de diversa ideolog¨ªa, kurdos¡), lo que han aprovechado las tropas leales al presidente Bachar el Asad para avanzar con firme sost¨¦n de Rusia e Ir¨¢n, mientras los Gobiernos occidentales se debaten entre a qui¨¦n apoyar.
En el bando rebelde apenas queda sombra de aquel Ej¨¦rcito Libre Sirio (ELS) ¡ªformado en 2011, cuando las protestas reprimidas por la fuerza derivaron en una insurrecci¨®n armada¡ª, que pretend¨ªa agrupar a la oposici¨®n y presentar una alternativa democr¨¢tica. Aquel ELS se ha descompuesto en variadas facciones y sus fuerzas han sido ampliamente superadas por grupos islamistas m¨¢s o menos radicales que demandan convertirse en interlocutores en una guerra con multitud de contendientes en la que han muerto al menos 260.000 personas y que ha expulsado de sus hogares a la mitad de los sirios.
El julio muchos se extra?aron al ver que dos prestigiosos diarios, The Washington Post y The Telegraph, publicaban sendas columnas de opini¨®n firmadas por un dirigente del grupo salafista Ahrar al Sham (El Movimiento Isl¨¢mico de los Hombres Libres del Levante). ?C¨®mo pod¨ªa aparecer en la prensa occidental un alegato de una organizaci¨®n que, sobre el terreno, coopera con el Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, o entre cuyos miembros destacados se ha contado gente como Khaled al Suri, acusados de estar implicados en el 11-S? La raz¨®n hay que buscarla en el giro t¨¢ctico del grupo, empe?ado en un lavado de cara que lo aleje de la imagen yihadista y lo acerque a Occidente, para lo que ha establecido contactos con diplom¨¢ticos europeos y americanos.
Ahrar al Sham, que combate al r¨¦gimen sirio y al Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s), fue fundado a finales de 2011 por Hassan Abbud, uno de los salafistas amnistiados por el presidente Bachar el Asad al inicio de las protestas para derrocarlo, en una estrategia por radicalizar a la oposici¨®n. En dos a?os, el grupo creci¨® hasta convertirse en el m¨¢s poderoso del bando rebelde ¡ªsuma unos 15.000 combatientes¡ª absorbiendo a otras facciones, pues era uno de los mejores armados y financiados, gracias a las donaciones de Turqu¨ªa, Qatar y, posteriormente, Arabia Saud¨ª. ¡°En Siria hay muchos moderados, pero si quieres ganar la guerra s¨®lo tienes dos opciones: ir con el r¨¦gimen o con los salafistas¡±, sostiene Joshua Landis, experto en el pa¨ªs ¨¢rabe.
En 2014 ocurrieron dos hechos clave: Qatar, presionado por EE UU, redujo la financiaci¨®n del grupo y, en septiembre, un atentado en Idlib (Siria) a¨²n no esclarecido mat¨® a pr¨¢cticamente toda su c¨²pula, que fue sustituida por una generaci¨®n m¨¢s joven y pragm¨¢tica. Desde entonces, los nuevos dirigentes, especialmente su jefe de Relaciones Exteriores, el hispano-sirio Labib Al Nahhas, se han movido de capital en capital con un discurso m¨¢s moderado y tratando de influir para que no se les incluya en la lista de organizaciones terroristas, como piden otros Estados que han clasificado al grupo como tal: Siria, Rusia, Ir¨¢n y Emiratos ?rabes Unidos. EE?UU y la UE no los consideran terroristas
Citas con diplom¨¢ticos
¡°Durante el ¨²ltimo a?o, hemos mantenido numerosos encuentros con diplom¨¢ticos occidentales y regionales. No siempre estuvimos de acuerdo, pero fueron reuniones constructivas sobre asuntos vitales y sobre el proceso pol¨ªtico [para acabar la guerra en Siria]¡°, asegura Al Nahhas, en una entrevista con EL PA?S en Estambul (Turqu¨ªa). Uno de los diplom¨¢ticos occidentales que ha participado en estos contactos explica: ¡°Son conscientes de que Ahrar no nos gusta especialmente, pero, de alguna manera, est¨¢ dentro de lo que podr¨ªamos aceptar¡±.
Pese a que el grupo se opon¨ªa a una democracia multipartidista y exig¨ªa la instauraci¨®n de un Estado isl¨¢mico, ahora, explica Al Nahhas, el jefe de Relaciones Exteriores, ¡°no ve conflictos con los mecanismos democr¨¢ticos¡±, siempre y cuando, en la nueva Siria, ¡°se respeten las leyes y los principios b¨¢sicos del islam¡±. Ahrar al Sham se define como un movimiento sirio, sin intenci¨®n de exportar su modelo islamista a otros pa¨ªses y apuesta por dejar las armas cuando acabe la guerra.
¡°Si bien parte del cambio viene de dentro del grupo, por sus nuevos l¨ªderes m¨¢s moderados y por la incorporaci¨®n de facciones islamistas menos radicales, Turqu¨ªa, que ha apoyado militarmente al grupo, ha sido uno de los impulsores¡±, sostiene el analista Ali el Yassir, que con el exembajador estadounidense en Siria Robert S. Ford escribi¨® un art¨ªculo pidiendo a la Administraci¨®n Obama que abriera un canal de comunicaci¨®n con Ahrar.
El acercamiento dio sus frutos en tanto que Ahrar al Sham accedi¨® a participar en diciembre pasado en las conversaciones para unificar a la oposici¨®n en Arabia Saud¨ª; y, aunque Nahhas no se desplaz¨® finalmente en febrero a las negociaciones entre el Gobierno y la oposici¨®n sirios en Suiza ¡ªeste grupo condiciona el di¨¢logo al cese de bombardeos rusos¡ª, asegura que respalda el proceso pol¨ªtico. ¡°Si resulta en algo que acerque el final de la guerra y del r¨¦gimen [de El Asad], nosotros lo apoyaremos y nunca seremos un obst¨¢culo¡±, dice Nahhas.
Pero existen dudas sobre la sinceridad de Ahrar al Sham, subraya el analista sirio Aymenn Jawad al Tamimi: ¡°Todav¨ªa es pronto para hablar de moderaci¨®n¡±. El liderazgo del grupo no se ha privado de enviar mensajes de condolencias por la muerte del l¨ªder talib¨¢n Mul¨¢ Omar, y han trascendido im¨¢genes de la ejecuci¨®n de alau¨ªes o detenciones de personas acusadas de blasfemar. ¡°En Ahrar al Sham hay sensibilidades de naturaleza nacionalista que conviven con posiciones m¨¢s cercanas al yihadismo de Al Qaeda¡±, explica otro diplom¨¢tico occidental involucrado en las negociaciones: ¡°Pero antes o despu¨¦s, deber¨¢n decidir de qu¨¦ parte est¨¢n¡±.
Planes ambiguos
¡°En la oposici¨®n siria hay debate sobre Ahrar [al Sham], porque el grupo no es muy claro sobre sus planes para una futura Siria¡±, afirma Lina Khatib, de la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (SOAS) de la Universidad de Londres: ¡°Tambi¨¦n dentro del mismo grupo hay facciones de l¨ªnea dura que se oponen al proceso pol¨ªtico, lo que puede llevar a escisiones¡±. De hecho, en los ¨²ltimos meses varios l¨ªderes locales del grupo han sido asesinados; Al Nahhas lo atribuye a ataques del r¨¦gimen y del ISIS, contra el que lucha, pero otros expertos vinculan estas muertes al recelo de diversas facciones islamistas por la estrategia del grupo salafista. Una reciente reuni¨®n en la que Al Nusra, filial de Al Qaeda, ofreci¨® coaligarse con Ahrar al Sham acab¨® a tiros y con muertos en ambos bandos.
La reciente ofensiva del r¨¦gimen sirio tambi¨¦n podr¨ªa dar al traste con estos contactos, explica uno de los diplom¨¢ticos consultados: ¡°No nos hacemos ilusiones, pero creemos que hay que dar cierto espacio a grupos como Ahrar al Sham para que evolucionen hacia la pol¨ªtica. Y la intervenci¨®n rusa empuja en sentido contrario¡±. De hecho, el jefe de Relaciones Exteriores del grupo salafista avisa del peligro de mayor radicalizaci¨®n: ¡°La fallida pol¨ªtica internacional hacia Siria y el sufrimiento de nuestra gente ser¨¢ capitalizada por ciertas partes, especialmente el ISIS, para mantener el flujo de reclutamiento y expandir su ideolog¨ªa m¨¢s all¨¢ de Siria¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Revoluciones
- Relaciones internacionales
- Conflictos pol¨ªticos
- Islam
- Partidos pol¨ªticos
- Guerra
- Ideolog¨ªas
- Conflictos
- Religi¨®n
- Pol¨ªtica
- Salafismo
- Relaciones exteriores
- Diplomacia
- Guerra Siria
- Fundamentalismo
- Integrismo religioso
- Partidos islamistas
- Primavera ¨¢rabe
- Guerra civil
- Fanatismo
- Protestas sociales
- Malestar social
- Problemas sociales
- Sociedad