El ponzo?oso legado de la industrializaci¨®n en China
Las f¨¢bricas cierran, pero la contaminaci¨®n que han vertido contin¨²a da?ando el cielo y la tierra
¡°El cierre de la planta nos ha tra¨ªdo una cosa buena: al menos podemos respirar mejor¡±, dice Lao Zhang. Este jubilado vive en el pueblo de Tiejuzhai, en pleno cintur¨®n industrial a unos 200 kil¨®metros al noreste de Pek¨ªn, en la provincia de Hebei. La f¨¢brica de acero Tangshan Antai, que se instal¨® en el vecindario hace una d¨¦cada, dej¨® de producir en octubre. Es una de las 16 factor¨ªas del sector que echaron la llave en Hebei a lo largo del a?o pasado debido a la ralentizaci¨®n econ¨®mica y las medidas del Gobierno para reducir el exceso de capacidad. Pero su d¨¦cada de funcionamiento, aseguran los vecinos, ha dejado un legado de contaminaci¨®n que ser¨¢ complicado erradicar.
Un pa¨ªs arrasado por la poluci¨®n
El 60% del agua subterr¨¢nea en China contiene elementos nocivos, seg¨²n el Gobierno, que invertir¨¢ 28.600 millones de euros en combatir la contaminaci¨®n del agua.
La contaminaci¨®n en el tri¨¢ngulo industrial Pek¨ªn-Tianjin-Hebei cay¨® en 2015 un 25,6% respecto a 2013, seg¨²n Greenpeace.
De las 183 factor¨ªas de carb¨®n, hierro, acero y cemento de la provincia de Hebei, Greenpeace encontr¨® que solo dos cumplen los est¨¢ndares de emisiones.
El 19,4% de la tierra cultivable china est¨¢ contaminada, seg¨²n un informe del Ministerio de Recursos Naturales y de la Tierra. En 3,3 millones de hect¨¢reas est¨¢ prohibido sembrar.
¡°El pueblo est¨¢ lleno de polvo de hierro¡±, se lamenta el jubilado, dando una patada al suelo y haciendo levantar una peque?a nube. ¡°Mientras estuvo funcionando la f¨¢brica, el aire era negro. La porquer¨ªa se quedaba en la piel, en la ropa¡ ?Lo que nos habremos gastado en detergente! La contaminaci¨®n tambi¨¦n afect¨® a la lluvia. Ca¨ªa lluvia ¨¢cida, que perjudic¨® nuestros cultivos. Y nadie nos compens¨® nunca por eso¡±.
Xia Xuge, uno entre el centenar de parados que ha dejado la f¨¢brica en este pueblo de unos 4.000 habitantes, est¨¢ de acuerdo con ¨¦l. ¡°Los cultivos est¨¢n arruinados. Antes crec¨ªan ¨¢rboles frutales, pero la contaminaci¨®n de la f¨¢brica los ha matado. La tierra est¨¢ demasiado contaminada¡±.
¡°La poluci¨®n del aire puede afectar al suelo. Los elementos perjudiciales en el aire emitidos por las f¨¢bricas, como los sulfuros, los metales pesados y otras part¨ªculas t¨®xicas pueden asentarse directamente en las plantas y el suelo, contaminando el suelo y da?ando las cosechas¡±, explican desde el Institute of Public and Environmental Affairs (IPE), una ONG china que combate la contaminaci¨®n de las f¨¢bricas desde hace casi 10 a?os facilitando el acceso a datos e informaci¨®n p¨²blica.
¡°Indirectamente, los elementos contaminantes pueden verse absorbidos por la lluvia, la nieve o incluso la niebla, y resultar en lluvia ¨¢cida, que es tambi¨¦n perjudicial para las cosechas y las plantas ¡ªexplica IPE¡ª. Las f¨¢bricas de acero, en particular, son grandes emisoras de dioxinas, muy perjudiciales para la tierra¡±.
En la base de datos que mantiene IPE, Tangshan Antai aparece citada en siete casos de violaci¨®n de las reglas desde 2008, por emisiones contaminantes o equipamiento inadecuado. En el m¨¢s reciente, el a?o pasado, las autoridades provinciales le impusieron una multa de 32.000 yuanes (unos 4.500 euros) por superar el nivel permitido de part¨ªculas contaminantes arrojadas al aire.
Pero el fin de las operaciones de Antai no quiere decir que el aire de la zona vaya a ser mucho m¨¢s puro. En toda la comarca de Tansghan son ubicuas las f¨¢bricas de acero, muchas de ellas igualmente culpables de incumplir las reglas. Hebei tiene una de las peores calidades del aire de toda China: siete de las 10 ciudades m¨¢s contaminadas del pa¨ªs, incluida Tangshan, se encuentran en ella. La provincia acoge a 183 factor¨ªas de carb¨®n, hierro, acero y cemento, de las que la ONG Greenpeace encontr¨® en abril del a?o pasado que ¨²nicamente dos cumpl¨ªan los est¨¢ndares de emisiones.
Aunque los niveles de contaminaci¨®n del aire en la provincia han empezado a reducirse. Seg¨²n un estudio de Greenpeace publicado el mes pasado, la contaminaci¨®n en el tri¨¢ngulo Pek¨ªn-Tianjin-Hebei cay¨® en 2015 un 25,6% con respecto a los niveles de 2013. Ello puede explicarse en parte debido a unos est¨¢ndares medioambientales m¨¢s estrictos y en parte ante los cierres de factor¨ªas motivados por la debilidad econ¨®mica y las ¨®rdenes de Pek¨ªn para atajar el exceso de capacidad. Hebei ha prometido recortar una cuarta parte de su producci¨®n de acero? ¡ª60 millones de toneladas de un total de 240 millones¡ª y un 15% de la de carb¨®n ¡ª40 millones de toneladas y el principal contaminante en el pa¨ªs¡ª para 2017.
Aun con todo, seg¨²n el estudio, Hebei se mantiene en el tercer lugar por concentraci¨®n de las part¨ªculas contaminantes m¨¢s peligrosas, las PM2,5, de di¨¢metro inferior a 2,5 micras. La media diaria de la provincia es de 77,3 por metro c¨²bico de aire, solo por debajo de la provincia de Henan y de Pek¨ªn.
El departamento de inspecci¨®n medioambiental local ha prometido cerrar para finales de 2016 aquellas firmas de menor tama?o que incumplan los est¨¢ndares, seg¨²n la agencia Xinhua, y subvencionar¨¢ la inversi¨®n en instalaciones para la limpieza de desechos contaminantes de las f¨¢bricas en los sectores que causen mayor poluci¨®n. Tambi¨¦n ha prometido invertir cerca de 31.200 millones de d¨®lares para combatir la contaminaci¨®n del agua. Pek¨ªn calcula que cerca del 60% del agua subterr¨¢nea en toda China y el 70% en la llanura del norte ¡ªque incluye el cintur¨®n industrial de Hebei¡ª contiene elementos nocivos.
Aunque la contaminaci¨®n m¨¢s dif¨ªcil de erradicar puede ser la del suelo. Un informe del Ministerio de Recursos Naturales y de la Tierra elaborado durante cinco a?os y mantenido en secreto hasta su divulgaci¨®n parcial en 2014 ha encontrado que el 19,4% de la tierra cultivable china est¨¢ contaminada. En 3,3 millones de hect¨¢reas est¨¢ prohibido sembrar, por la cantidad de t¨®xicos en el suelo.
La r¨¢pida industrializaci¨®n en China ¡ªsumada a un uso excesivo de pesticidas¡ª es la gran causa de ello. Adem¨¢s de las part¨ªculas contaminantes que puedan llegar del aire ¡ªque no es el factor principal¡ª, los desechos t¨®xicos de las f¨¢bricas se filtran al suelo. En otros casos los agricultores emplean agua reciclada de la miner¨ªa para regar sus campos. Entre los metales pesados que identific¨® la investigaci¨®n se encontraban cobre, zinc, mercurio y cadmio.
Y una vez que llegan al suelo, si no se limpian, esos materiales ¡°quedan ah¨ª para siempre. Los metales pesados no son biodegradables¡±, apunta por tel¨¦fono Ada Kong, directora de la campa?a contra T¨®xicos de Greenpeace en el este de Asia.
Su eliminaci¨®n puede ser muy costosa. Seg¨²n Kong, limpiar un acre de terreno (4.046,86 metros cuadrados) puede llegar a costar en torno a los 14.000 euros.
Hasta ahora, el Gobierno chino se ha mostrado m¨¢s lento a la hora de hacer frente a este tipo de contaminaci¨®n que contra la poluci¨®n del aire o del agua, que ya cuentan con sus respectivos planes de acci¨®n. Se espera que el del suelo, apunta Kong, se publique finalmente este a?o y ¡°adopte medidas concretas para combatir el problema¡±.
Desde IPE apuntan que ¡°para reducir da?os a las cosechas y al suelo es fundamental reducir las emisiones industriales de contaminantes en el aire, y que las factor¨ªas cumplan los est¨¢ndares de eliminaci¨®n de desechos. Que las f¨¢bricas hagan p¨²blicos sus datos sobre eliminaci¨®n de desechos permite que el p¨²blico supervise su comportamiento medioambiental y contribuye a garantizar que se cumplen los est¨¢ndares¡±.
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