EE UU y Corea del Sur inician sus mayores maniobras militares
Entre amenazas de Corea del Norte, re¨²nen a 300.000 soldados del pa¨ªs asi¨¢tico y 15.000 del americano
Corea del Sur y Estados Unidos han iniciado este lunes sus mayores maniobras militares conjuntas, en medio de un aumento de la tensi¨®n con Pyongyang. Cerca de 300.000 soldados surcoreanos y 15.000 estadounidenses participan en los ejercicios ¡°Foal Eagle¡± y ¡°Key Resolve¡±, seg¨²n la agencia Yonhap. Aunque estas maniobras, las de mayores dimensiones entre ambos pa¨ªses, tienen car¨¢cter anual, este a?o han doblado su tama?o como advertencia tras la prueba nuclear norcoreana de enero y el lanzamiento de un cohete de larga distancia. El r¨¦gimen de Kim Jong-un ha respondido con amenazas de ¡°una ofensiva general¡±.
Las maniobras continuar¨¢n hasta el 30 de abril. Seg¨²n ha indicado Yonhap, incluir¨¢n el ensayo de planes para eliminar armas de destrucci¨®n masiva norcoreanas y para llevar a cabo un ataque preventivo en caso de que Corea del Norte se propusiera a su vez lanzar combates.
Cada a?o Pyongyang reacciona con amenazas ante estos ejercicios, que considera preparativos para una invasi¨®n de su territorio, y este no ha sido una excepci¨®n. Despu¨¦s de que la semana pasada Kim Jong-un diera ¨®rdenes de tener preparadas las armas nucleares de su pa¨ªs, en las ¨²ltimas horas la Comisi¨®n de Defensa norcoreana se ha declarado dispuesta a ¡°hacer realidad el gran sue?o de la naci¨®n coreana mediante una guerra sagrada de justicia para la reunificaci¨®n¡±.
¡°El Ej¨¦rcito y el pueblo de la Rep¨²blica Democr¨¢tica Popular de Corea lanzar¨¢n una ofensiva general para contrarrestar de manera decisiva los movimientos hist¨¦ricos para una guerra nuclear de EE. UU. y sus seguidores¡±, ha insistido la Comisi¨®n en un comunicado difundido por la agencia de noticias norcoreana, KCNA.
Se¨²l y Washington insisten en que las maniobras anuales tienen objetivos puramente defensivos. El Ministerio de Defensa surcoreano ha declarado que hasta el momento no ha detectado movimientos fuera de lo corriente entre las fuerzas de su vecino del norte.
Este a?o las maniobras llegan en una situaci¨®n especialmente crispada. A la prueba nuclear de enero, en la que Pyongyang asegura que emple¨® una bomba de hidr¨®geno pese al escepticismo de los analistas, se sum¨® el 7 de febrero el lanzamiento de un cohete de larga distancia. Se¨²l y Washington consideran que se trat¨® de una prueba encubierta de un misil de largo alcance. Y tras largas y complicadas negociaciones, la semana pasada el Consejo de Seguridad de la ONU impuso nuevas sanciones contra Corea del Norte como castigo a la prueba nuclear. El r¨¦gimen de Kim Jong-un replic¨® con el lanzamiento de seis misiles de corto alcance hacia el mar.
El viernes pasado Se¨²l y Washington empezaron sus conversaciones formales para el posible despliegue en territorio surcoreano del escudo antimisiles estadounidense conocido por el acr¨®nimo THAAD (¡°Terminal High Altitude Area Defence¡±). Estados Unidos considera que es necesario ese sistema de radares e interceptores para neutralizar posibles ataques de Corea del Norte contra su vecino del sur o contra su propio territorio. Hasta ahora, el Gobierno de Park Geun-hye hab¨ªa esquivado tomar una decisi¨®n, preocupado por la tajante oposici¨®n de China -su principal socio comercial- a ese dispositivo. Pero finalmente decidi¨® entablar negociaciones formales tras la prueba nuclear de enero.
China se opone al despliegue del THAAD en la pen¨ªnsula coreana al considerar que podr¨ªa utilizarse contra ella.
Corea del Sur, que el mes pasado cancel¨® las operaciones del parque industrial de Kaesong -la ¨²ltima iniciativa conjunta entre las dos Coreas que a¨²n se encontraba en marcha- ante lo que considera provocaciones de Pyongyang, tiene previsto anunciar nuevas sanciones unilaterales contra su vecino este martes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.