El debate sobre el futuro de la energ¨ªa nuclear divide a Europa
Alemania apuesta por el apag¨®n en 2022 y Francia por ampliar la vida de sus centrales Los partidos en Espa?a no consens¨²an una postura sobre esta tecnolog¨ªa
La tragedia de Fukushima de hace justo cinco a?os sacudi¨® el debate sobre la energ¨ªa nuclear tambi¨¦n en la Uni¨®n Europea, cuyos miembros no mantienen una posici¨®n ¨²nica sobre el futuro de esta tecnolog¨ªa. Alemania, la principal potencia econ¨®mica de la Uni¨®n Europea, se ha comprometido a suprimir esta tecnolog¨ªa dentro de su territorio en 2022. En Francia, sin embargo, el Gobierno propone ahora que las centrales puedan operar m¨¢s all¨¢ de los 40 a?os de vida ¨²til. En Espa?a ese debate tambi¨¦n est¨¢ sobre la mesa, pero solo el PP propone abiertamente que las centrales operen m¨¢s all¨¢ de las cuatro d¨¦cadas. ?
Alemania
El 11 de marzo de 2011 fue un d¨ªa extraordinario para el mundo y para la canciller alemana. Ese d¨ªa Angela Merkel se levant¨® como una apasionada defensora de la energ¨ªa nuclear y, tan solo 48 horas despu¨¦s, regres¨® a su cama convertida en la principal abanderada del movimiento ecologista de su pa¨ªs, despu¨¦s de anunciar que su Alemania revisar¨ªa su pol¨ªtica de energ¨ªa nuclear.
La cat¨¢strofe de Fukushima oblig¨® al gobierno que dirig¨ªa Merkel en mayo de 2011 a legislar por segunda vez para llevar a cabo el apag¨®n nuclear definitivo. Un a?o antes, su Gobierno hab¨ªa dejado sin vigencia la medida adoptada en 2000 por Gerhard Schr?der. Pero el accidente convenci¨® a Merkel para cambiar nuevamente de posici¨®n. "Los acontecimientos en Jap¨®n suponen un cambio radical en la historia del mundo tecnificado y las fugas radioactivas, como consecuencia del terremoto y posterior tsunami, demuestran que la energ¨ªa at¨®mica no est¨¢ preparada para hacer frente a la violencia natural. Por eso hemos tomado esta decisi¨®n", dijo entonces la canciller.
Durante una maratoniana reuni¨®n realizada en la sede del Gobierno federal que dur¨® m¨¢s de 12 horas, los socios de la coalici¨®n que gobernaba el pa¨ªs en mayo de 2011 aprobaron una medida que convertir¨¢ a Alemania, en un plazo de 11 a?os, en la primera gran potencia industrial del planeta en abandonar completamente la energ¨ªa at¨®mica. En el encuentro, la canciller Angela Merkel, como jefa de la Uni¨®n Cristiano-dem¨®crata (CDU), Horst Seehofer, el l¨ªder de la CSU de Baviera, y Philipp R?sler, el entonces presidente del partido Liberal (FDP) tambi¨¦n acordaron no volver a conectar las siete plantas nucleares que hab¨ªan sido clausuradas provisionalmente tras la cat¨¢strofe de Fukushima. El acuerdo, que fue aprobado por el Parlamento Federal en junio de 2011, estableci¨® que los tres reactores m¨¢s modernos pueden retrasar eventualmente su cierre hasta fines de 2022, en el caso de que surjan problemas con el suministro el¨¦ctrico.
En v¨ªsperas del quinto aniversario de la tragedia de Fukushima, el vicecanciller alem¨¢n y ministro de Econom¨ªa, Sigmar Gabriel, ha anunciado la decisi¨®n de continuar con la transformaci¨®n energ¨¦tica y apagar todas las centrales nucleares del pa¨ªs para 2022. "En 2022 la energ¨ªa nuclear comercial en Alemania ser¨¢ historia, y a pesar de que lo que sosten¨ªa el lobby at¨®mico, la luz a¨²n no se ha apagado", ha se?alado el ministro en un comunicado oficial de su dependencia.
Francia
La pol¨ªtica nuclear francesa est¨¢ originando problemas a nivel interno, pero tambi¨¦n con sus pa¨ªses vecinos. La ministra de Medio Ambiente, Energ¨ªa y Mar, S¨¦gol¨¨ne Royal, ha generado una ola de reproches por parte de las organizaciones ecologistas al asegurar estar dispuesta a prolongar la vida activa de las centrales nucleares 10 a?os m¨¢s, es decir, que puedan operar durante 50 a?os. "Es una nueva concesi¨®n al lobby nuclear", ha criticado Europa Ecolog¨ªa-Los Verdes. "La medida permitir¨¢ producir una electricidad m¨¢s barata", ha argumentado Royal.
Este debate interno ha coincidido con las protestas oficiales de Luxemburgo, Suiza y Alemania. El pasado 2 de marzo Ginebra ha interpuesto una demanda por considerar que la vieja central de Bugey, a 70 kil¨®metros de la capital helv¨¦tica, pone en peligro a terceros y contamina las aguas. En Bugey, Francia est¨¢ construyendo un cementerio de desechos nucleares. Al d¨ªa siguiente, Luxemburgo recurr¨ªa a la Comisi¨®n Europea contra los cuatro reactores de Cattenon, tambi¨¦n pr¨®ximos a su frontera.
La batalla alemana contra la vieja central de Fessenheim, situada a pocos kil¨®metros de su frontera, viene de lejos, pero justo despu¨¦s de las protestas de Suiza y Luxemburgo, los verdes alemanes destaparon un inquietante informe. El incidente de Fessenheim de 2014 fue m¨¢s grave de lo que se dijo en su momento, asegura el informe, que a?ade: "No cumple las normas post-Fukushima". La ministra germana de Medio Ambiente, Barbara Hendricks, ha pedido su cierre inmediato.
Treinta de los 58 reactores repartidos en las 19 centrales francesas (este es el pa¨ªs m¨¢s nuclearizado del mundo en relaci¨®n al n¨²mero de habitantes) tienen m¨¢s de 30 a?os. El proyecto de prolongar su vida activa es un importante capote a la empresa semi p¨²blica EDF, que mejorar¨ªa sustancialmente sus beneficios en m¨¢s de 600 millones de euros anuales en los pr¨®ximos cuatro a?os ahora que se le han disparado los costes de la construcci¨®n de la central de Flamanville. La ley francesa de Transici¨®n Energ¨¦tica, aprobado el pasado a?o, prev¨¦ reducir el peso de la energ¨ªa nuclear, pero no terminar con ella como se propone la vecina Alemania.
Espa?a
En Espa?a el debate nuclear no est¨¢ cerrado. Mientras el PP ha legislado durante los ¨²ltimos cuatro a?os para conseguir que las centrales del pa¨ªs puedan prolongar su actividad m¨¢s all¨¢ de los 40 a?os, una mayor¨ªa del nuevo Congreso se muestra contraria a esa extensi¨®n.
La central de Santa Mar¨ªa de Garo?a centra este debate. Esta instalaci¨®n burgalesa lleva tres a?os sin generar electricidad, aunque sus propietarios aspiran a reengancharla a la red. Nueve partidos (PSOE, Podemos, Ciudadanos, ERC, PNV, Bildu, IU, Comprom¨ªs y Democr¨¤cia i Llibertat), que suponen el 64% del Congreso, pidieron a principios de febrero al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que no siga con el procedimiento de reapertura de estas instalaciones.
El CSN se encarga de estudiar si es t¨¦cnicamente viable que esta central vuelva a operar a pesar de haber superado los 40 a?os de vida. Pero ser¨¢ el Ministerio de Industria el que deba dar la autorizaci¨®n, es decir, es una decisi¨®n pol¨ªtica que depender¨¢, tambi¨¦n, de la formaci¨®n del pr¨®ximo Gobierno en Espa?a.
Garo?a es solo la punta de lanza del sector. Si finalmente se decide que ninguna central opere en Espa?a m¨¢s de 40 a?os, el apag¨®n nuclear total en este pa¨ªs se producir¨ªa en 2028, cuando la m¨¢s moderna de estas instalaciones (la de Trillo) cumpla las cuatro d¨¦cadas de funcionamiento.?
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