El Gobierno de Brasil inicia una ofensiva internacional contra la crisis

Con un proceso de destituci¨®n a las puertas e influyentes medios internacionales sugiriendo su renuncia en sus editoriales, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, quiere contarle al mundo su versi¨®n. El mensaje llegar¨¢, entre otros, por medio de los corresponsales extranjeros en el pa¨ªs, a quienes se convocar¨¢ exclusivamente en encuentros con Rousseff, pero tambi¨¦n con el expresidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva.

La estrategia comenz¨® este mi¨¦rcoles. Mientras sus enemigos pol¨ªticos negociaban los cargos de un nuevo Gobierno, Rousseff envi¨® a R¨ªo de Janeiro a su jefe de gabinete, Jaques Wagner, para encontrarse con los medios internacionales. Se les prohibi¨® el acceso a los medios brasile?os. Durante las m¨¢s de dos horas que dur¨® la reuni¨®n, Wagner afirm¨® en varias ocasiones que Brasil carece de madurez y que hay una ¡°cobertura (medi¨¢tica) desacompasada¡± de la crisis pol¨ªtica. ¡°Es obvio que hay segmentos de la prensa nacional que militan por una tesis¡±, critic¨®.

Brasilia elev¨® el tono en los ¨²ltimos d¨ªas y ya califica abiertamente el proceso de destituci¨®n que se tramita en la C¨¢mara contra la presidenta como un ¡°golpe¡±. ¡°A pesar de ser fuerte la palabra ¡®golpe¡¯, es porque efectivamente es un golpe. No tiene por qu¨¦ ser militar, puede hasta ser sutil, como el que est¨¢n intentando dar ahora. Es un golpe porque es un mal uso del dispositivo constitucional¡±, dijo Wagner.

Para el Gobierno, una discusi¨®n ¡°m¨¢s leg¨ªtima¡± ser¨ªa la anticipaci¨®n de las elecciones mediante el llamado recall o revocaci¨®n del mandato, ¡°pues el Gobierno que se siente all¨ª no tendr¨¢ legitimidad" en el caso de que prospere el proceso de destituci¨®n. Esta herramienta no est¨¢ prevista en la legislaci¨®n brasile?a y, para que fuese una alternativa, ser¨ªa necesaria una enmienda constitucional; pero Wagner la calific¨® de ¡°m¨¢s saludable¡±. ¡°Se quiere instituir, cobardemente, en Brasil, una l¨®gica de que un Gobierno impopular puede ser objeto de una destituci¨®n. La destituci¨®n no es la soluci¨®n de nada, es un agravamiento de la crisis¡±, dijo Wagner.

Telegrama

En su intento de conquistar a los extranjeros, el propio Itamaraty (Ministerio de Asuntos Exteriores de Brasil) envi¨® el viernes pasado un telegrama a sus delegaciones en el extranjero, en la que denunciaba ¡°el proceso reaccionario que est¨¢ en marcha en el pa¨ªs contra el Estado Democr¨¢tico de Derecho¡±. La circular, que fue desautorizada el mismo d¨ªa por el secretario general del ministerio, S¨¦rgio Danese, ped¨ªa que cada delegaci¨®n designase a un interlocutor para dialogar con las organizaciones de la sociedad civil locales y conclu¨ªa con un "?No al golpe! ?Nuestra lucha contin¨²a!¡± Los telegramas fueron enviados por el ministro (cargo en la jerarqu¨ªa del Itamaraty) Milton Rond¨® Filho, conocido entre sus colegas por su defensa del Gobierno Dilma. La lectura de tres diplom¨¢ticos consultados por este diario es que Rond¨® pretend¨ªa, con esta acci¨®n, promoverse y conseguir alg¨²n cargo en el Gobierno. Sin embargo, Rond¨® fue amonestado y se le ha prohibido enviar telegramas, seg¨²n ha informado el Itamaraty. De todos modos, la polarizaci¨®n pol¨ªtica ya ha llegado al cuerpo diplom¨¢tico, considerado de excelencia dentro de la burocracia brasile?a. Incluso antes del episodio de Rond¨® era posible ver en las redes sociales declaraciones de diplom¨¢ticos en contra y a favor del Gobierno.

Tambi¨¦n se requiri¨® la presencia de diplom¨¢ticos internacionales en el acto de la presidenta con juristas que fueron a Brasilia a manifestar su apoyo a Rousseff, este martes. Al evento comparecieron 70 representantes de delegaciones extranjeras, incluyendo embajadores. El n¨²mero sorprendi¨® a los diplom¨¢ticos brasile?os, que suelen encontrar a sus colegas extranjeros solo en eventos de dimensi¨®n internacional.

La crisis vista por los pa¨ªses vecinos

La regi¨®n asiste preocupada a la crisis en Brasil. La defensa de la presidenta, por ahora, divide a los pa¨ªses vecinos. Uruguay, que actualmente detenta la presidencia rotatoria de Unasur y Mercosur, propuso el jueves pasado la divulgaci¨®n de un texto de apoyo a la presidenta en el que se criticaba la acci¨®n de la Justicia de Brasil, pero la nota no lleg¨® a divulgarse. Los pa¨ªses del bloque no est¨¢n de acuerdo sobre la posici¨®n que deben adoptar en relaci¨®n con la crisis que atraviesa Brasil. Paraguay, entre otros, ha alegado que la crisis es un asunto interno y que el bloque no debe intervenir.

En el Mercosur, despu¨¦s de que la canciller argentina, Susana Malcorra, mencionase la hip¨®tesis de que Brasil podr¨ªa ser suspendido del bloque en caso de que prosperase el proceso de destituci¨®n, est¨¢ planeada una reuni¨®n urgente para discutir la crisis en el pa¨ªs. Uruguay, que preside el bloque, debe programar el encuentro; pero el Ministerio de Asuntos Exteriores anunci¨® este mi¨¦rcoles que no hab¨ªa previsi¨®n para el encuentro. La posici¨®n del presidente, Mauricio Macri, es de cautela. A diferencia de sus hom¨®logos de Ecuador, Bolivia y Venezuela, evita hablar de golpe.