El Papa vuelve de Lesbos con 12 refugiados que acoger¨¢ en El Vaticano

El papa Francisco acoger¨¢ en el Vaticano a una docena de refugiados confinados hasta ahora en un campo de Lesbos, isla griega que ha visitado el Pont¨ªfice. Seg¨²n una nota difundida por la Santa Sede bajo la firma del portavoz Federico Lombardi, Jorge Mario Bergoglio viaja de vuelta a Italia con tres familias de sirios huidos de la guerra. "El Papa", dice el comunicado, "ha querido dar un signo de acogida a los refugiados". Entre la docena de refugiados que ser¨¢n acogidos por el Vaticano, hay seis menores de edad. Los miembros de las tres familias son musulmanes y provienen de Damasco, la capital del pa¨ªs, y Deir Ezzor, esta ¨²ltima provincia oriental controlada por el Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s). "Sus hogares", dice la nota, "han sido bombardeados".

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Bergoglio, ante miles de migrantes: ¡°No est¨¢is solos¡±

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Lombardi especifica en el comunicado que el acuerdo de acogida ha sido alcanzado con "las autoridades competentes, griegas e italianas". Seg¨²n el Vaticano, los doce sirios llegaron a la isla griega antes de que la Uni¨®n Europea alcanzase un acuerdo con Turqu¨ªa para la deportaci¨®n de los migrantes llegados a suelo griego. El pacto contempla echar a Turqu¨ªa todos los arribados a partir del 20 de marzo ilegalmente incluso si son solicitantes de asilo. A cambio, los Estados miembros ¡ªsalvo Hungr¨ªa y Eslovaquia¡ª acoger¨¢n a un n¨²mero de sirios equivalente al de los expulsados, con una cifra m¨¢xima de 72.000.

El gesto del Papa tal vez sea para dar ejemplo. O tal vez para situar la pelota en el tejado de una Uni¨®n Europa a la que, con una sola frase, situ¨® frente al espejo: ¡°Europa es la patria de los derechos humanos, y cualquiera que ponga pie en suelo europeo deber¨ªa poder experimentarlo¡±. Francisco quiso dejar claro durante el vuelo que se trata solo de una cuesti¨®n humanitaria: ¡°Todas las cosas se han hecho en regla. El Estado de la Ciudad del Vaticano, el Gobierno italiana y el griego han inspeccionado todo y han dado la autorizaci¨®n. Son acogidos por el Vaticano. Y ser¨¢ el Vaticano, con la colaboraci¨®n de la comunidad de San Egidio, los que le buscar¨¢n el puesto de trabajo, o la manutenci¨®n¡­¡±.

Desde que fue elegido hace ahora tres a?os, Jorge Mario Bergoglio ha insistido en que la Iglesia debe dar pasos concretos para la acogida e integraci¨®n de los que huyen del hambre o de la guerra. En septiembre de 2013, durante una visita a una organizaci¨®n de los jesuitas que presta ayuda a los refugiados, pidi¨® que la Iglesia se involucrara m¨¢s con el problema: ¡°Los conventos vac¨ªos no son nuestros, son para la carne de Cristo que son los refugiados¡±.

Justo dos a?os despu¨¦s, y ante la sordera de buena parte de la comunidad eclesi¨¢stica, volvi¨® a la carga. Pidi¨® a las ¡°parroquias, comunidades y religiosas y monasterios¡± de Europa que abrieran sus puertas a las familias de migrantes. Por el momento, todos sus llamamientos han ca¨ªdo en el vac¨ªo. No ser¨ªa de extra?ar que Francisco desee pasar a la acci¨®n a trav¨¦s del ejemplo.