Arranca el ¡®impeachment¡¯ de Dilma Rousseff en el Senado brasile?o

Tras varios forcejeos judiciales esta semana que parec¨ªan trabar el proceso (una anulaci¨®n del presidente interino del Congreso retirada despu¨¦s y un recurso del Gobierno que acaba de ser rechazado por el Supremo) el juicio pol¨ªtico a la presidenta Dilma Rousseff se adentra en su fase m¨¢s dram¨¢tica: la que apartar¨¢ a la actual jefa del Estado de Brasil del poder, por lo menos 180 d¨ªas. A las diez de la ma?ana ha comenzado la sesi¨®n del Senado. Cuando termine, si una mayor¨ªa simple de los 81 senadores as¨ª lo decide ¨Ccosa que todos los especialistas dan por hecho hoy en Brasilia- Rousseff deber¨¢ abandonar el Palacio del Planalto, sede de la jefatura del Gobierno. No de manera definitiva, pero casi.

Lo que los senadores deciden hoy, de facto, es la apertura formal del impeachment, del proceso de destituci¨®n, que durar¨¢, como m¨¢ximo y a partir de hoy, esos 180 d¨ªas. Lo determinante es que durante ese tiempo Rousseff no podr¨¢ ser presidenta y el poder lo asumir¨¢ el vicepresidente Michel Temer, hasta hace poco meses su aliado politico y ahora su peor enemigo. Durante ese tiempo, mientras uno desarma el gabinete existente, nombra ministros y muda el rumbo de la pol¨ªtica del pa¨ªs, Rousseff jugaba su ¨²ltima carta al recurrir al Tribunal Supremo para que anulase el proceso, liderado por un expresidente del Congreso imputado por corrupci¨®n. El Tribunal no lo ha aceptado, as¨ª que la presidenta vivir¨¢ una suerte de destierro en su propio Palacio de la Alborada, su residencia oficial, existiendo en un limbo judicial e institucional jam¨¢s visto en la historia de Brasil.

Rousseff vivir¨¢ una suerte de destierro y existir¨¢ un limbo judicial e institucional jam¨¢s visto en la historia de Brasil

A petici¨®n propia, m¨¢s de 65 senadores tomar¨¢n hoy la palabra, uno detr¨¢s de otro, para explicar su postura. Cada uno tendr¨¢ 15 minutos como m¨¢ximo. Si la mayor¨ªa agota su tiempo (cosa que es bastante posible), teniendo en cuenta que est¨¢ programada una pausa de una hora para la comida y otra de otra hora en la tarde, la extenuante sesi¨®n durar¨¢ 18 horas. Es decir, terminar¨¢ de madrugada en Brasil, con la votaci¨®n propiamente dicha.

A¨²n no se sabe qu¨¦ pasos concretos dar¨¢ Dilma Rousseff despu¨¦s de enterarse de su previsible derrota. Hasta hoy, se especulaba en que bajar¨ªa, el jueves por la ma?ana, acompa?ada de sus seguidores y un grupo de militantes, la rampa del Palacio presidencial del Planalto, en un acto simb¨®lico de despedida. Pero ese acto ha sido suspendido, debido a que daba a entender, seg¨²n integrantes del Partido de los Trabajadores (PT), formaci¨®n de la presidenta, que ella renunciaba a su cargo, cosa que ella no est¨¢ dispuesta a hacer.

El presidente del Senado, Renan Calheiros, asegur¨® antes de que comenzara la sesi¨®n, que no votar¨¢. Y a?adi¨®: ¡°Yo nunca quise que el impeachment llegara hasta aqu¨ª porque es un proceso traum¨¢tico para el pa¨ªs que trae, sobre todo, inestabilidad¡±. Calheiros precis¨® que despu¨¦s de que el Senado decida ¨Csi decide¨C apartar a Rousseff del poder, enviar¨¢ una notificaci¨®n a la presidencia de Brasil inform¨¢ndole del resultado. Y se comprometi¨® con la prensa a explicar en los pr¨®ximos d¨ªas en qu¨¦ condiciones pr¨¢cticas (sueldo, servidores, rutina diaria) queda la presidenta sin presidencia.