Venezuela persigue a quienes piden el revocatorio
Las amenazas recuerdan a la ¡®lista Tasc¨®n¡¯, que se?alaron hace 12 a?os a los que apoyaban un revocatorio
El chavismo ha lanzado una seria advertencia a los venezolanos que firmaron la solicitud de refer¨¦ndum revocatorio de las consecuencias de ejercer sus derechos pol¨ªticos. El n¨²mero dos del oficialismo, Diosdado Cabello, ha sido el mascar¨®n de proa hasta ahora al solicitar la cancelaci¨®n de los contratos de los empresarios y el despido de los directores de las oficinas del Estado que respaldan la consulta popular.
El Gobierno, que busca de cualquier forma permanecer en el poder hasta el a?o que viene, cuando el plebiscito perder¨ªa toda efectividad pol¨ªtica, reedita la experiencia de la denominada lista Tasc¨®n. Hace 12 a?os, los adversarios del entonces presidente, Hugo Ch¨¢vez, participaron de un proceso organizado por la asociaci¨®n civil S¨²mate para recoger firmas y solicitar un refer¨¦ndum revocatorio. Con esos datos el parlamentario chavista Luis Tasc¨®n elabor¨® un listado que luego fue utilizado como un modo de medir la fidelidad pol¨ªtica de los empleados del Estado y de las personas que aspiraban a ser funcionarios.
Fue un modo de exclusi¨®n de tono macartista, tan comentado y rese?ado que, en diciembre de 2007, cuando Ch¨¢vez decret¨® la amnist¨ªa parcial para las personas enjuiciadas por el golpe de Estado en su contra de abril de 2002, pidi¨® que se "enterrara esa lista". No fue una orden cumplida a rajatabla. Muchos funcionarios continuaron consult¨¢ndola a medida que aumentaba el tama?o de la burocracia oficial.
A principios de aquel 2007 el Gobierno venezolano se hab¨ªa declarado socialista, y comenz¨® a expropiar las empresas privadas de los sectores que consideraba vitales para fortalecer el control social.
Cabello, cuyo poder se ha visto disminuido con la llegada de la oposici¨®n a la Asamblea Nacional, se ha convertido en el defensor m¨¢s radical del proceso bolivariano en un intento por recuperar el poder perdido. Ha propuesto tambi¨¦n que se nieguen los cr¨¦ditos de la banca p¨²blica a los firmantes. "Ese empresario jam¨¢s va a entregar los proyectos a tiempo. No se puede hacer una revoluci¨®n as¨ª", ha asegurado en su programa de televisi¨®n semanal.
En la l¨®gica del chavismo quien desee la salida de Maduro y sea empleado del Estado est¨¢ confabul¨¢ndose para sacar a su jefe del cargo. Con argumentos similares por emotivos otros voceros del Gobierno han apoyado lo expresado por Cabello. El diputado Ricardo Molina, exministro de la Vivienda, ha asegurado tambi¨¦n que es indigno no apoyar al Ejecutivo y trabajar en una instituci¨®n gubernamental.
Tasc¨®n muri¨® en 2008 a causa de un c¨¢ncer y su recuerdo ha quedado asociado al estigma que supuso instrumentalizar el m¨¦todo de exclusi¨®n m¨¢s renombrado de la era chavista. La Corte Interamericana de Derechos Humanos est¨¢ evaluando un caso que quiz¨¢ simbolice la exclusi¨®n que sufrieron muchos venezolanos impedidos de trabajar para el Estado desde 2003. En 2006 Roc¨ªo San Miguel, Magally Chang y Tha¨ªs Pe?a denunciaron al Estado por discriminaci¨®n pol¨ªtica. "Tenemos dos meses para presentar peritos y pruebas", dice a este diario San Miguel, quien hoy es directora de la organizaci¨®n no gubernamental Control Ciudadano. Pero en su criterio la prueba m¨¢s contundente de todo lo que le ocurri¨® hace diez a?os es el regreso de la exclusi¨®n que una vez le afect¨®. "Basta con ver lo que est¨¢ pasando en la Administraci¨®n p¨²blica para comprobar cu¨¢n cierto es todo lo que est¨¢ incluido en el informe de la CIDH sobre nuestro caso".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.