M¨¦xico concede la extradici¨®n de El Chapo Guzm¨¢n a Estados Unidos

La extradici¨®n de El Chapo ha dado un paso m¨¢s. La Secretaria de Exteriores ha autorizado su traslado a Estados Unidos. La decisi¨®n supone un nuevo avance en un proceso que, presumiblemente a¨²n tardar¨¢ meses en materializarse. Tras el visto bueno formal del Gobierno, que era previsible desde que el mismo presidente lo anunciara tras la captura de criminal en enero pasado,?se abre el juicio de amparo y su correspondiente recurso de revisi¨®n. Dos tr¨¢mites infestados de vericuetos jur¨ªdicos que pueden dilatarse durante meses.?

El principal escollo para la salida procede del propio Joaqu¨ªn Guzm¨¢n Loera. Consciente de que en una c¨¢rcel de Estados Unidos carece de todo poder, el l¨ªder del c¨¢rtel de Sinaloa ha puesto en marcha una catarata de amparos para retrasar al m¨¢ximo su traslado. Con el apoyo de 13 abogados,?esta estrategia judicial sigue la que marc¨® el bestial Edgar Vald¨¦s Villareal, alias La Barbie, cuya extradici¨®n, tras el recibir pl¨¢cet de Exteriores, tard¨® cuatro a?os en cumplirse.

El Chapo tiene en Estados Unidos al menos siete causas abiertas. Pero s¨®lo dos de ellas han sido, de momento, admitidas por la justicia mexicana. Una procede de un tribunal de San Diego (California) y se circunscribe al delito de asociaci¨®n delictiva para vender coca¨ªna. La segunda responde a una corte texana y es mucho m¨¢s grave. Ah¨ª se le persigue por homicidio, asociaci¨®n delictiva, delincuencia organizada, narcotr¨¢fico, lavado de dinero y posesi¨®n de armas de fuego. El mayor caso, con todo, est¨¢ radicado en Nueva York y fue investigado en su d¨ªa por la actual fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch.

El pronunciamiento de Exteriores?se refiere exclusivamente a las solicitudes de San Diego y de Texas. Aunque pueden llegar m¨¢s, estas dos causas act¨²an como avanzadilla. Cuando concluya su tr¨¢mite, se le enviar¨¢ a Estados Unidos y el resto de sumarios podr¨¢ centralizarse.

La extradici¨®n, que excluye la pena de muerte, se acelerar¨ªa si El Chapo diese su brazo a torcer. Fuentes de la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica se?alan a EL PA?S que si el narcotraficante la aprobase, se podr¨ªa efectuar en dos d¨ªas. Pero no parece que ese sea el caso. De momento, la defensa del mayor narcotraficante del planeta dispone de 30 d¨ªas para recurrir la decisi¨®n de Exteriores.

El manejo del tiempo se ha vuelto una cuesti¨®n vital. El Chapo no s¨®lo est¨¢ intentado retrasar su partida, sino que, a juicio de algunos medios mexicanos, tambi¨¦n quiere ganar tiempo para negociar con las autoridades estadounidenses un acuerdo favorable. En el campo del Gobierno mexicano, el reloj corre en contra. Tras su bochornosa fuga en julio pasado de la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad de El Altiplano, El Chapo se ha vuelto una cuesti¨®n de Estado. Otra huida supondr¨ªa un golpe de dimensiones hist¨®ricas para el prestigio del presidente Enrique Pe?a Nieto. Ante este terror¨ªfico horizonte, las autoridades han sometido al preso, encerrado en Ciudad Ju¨¢rez, a una vigilancia extraordinaria. Pero son conscientes de que cada d¨ªa que pasa aumentan las posibilidades de que trate de escapar. Por eso, un proceso corto les conviene.