Salud Hern¨¢ndez-Mora, pol¨¦mica por sus opiniones y respetada por sus reportajes
La periodista llevaba dos semanas trabajando en Catatumbo, donde conviven las FARC y el ELN
"Yo s¨®lo quiero reportear, mancharme los zapatos de barro y venir con historias que a nadie m¨¢s le importan", suele ironizar Salud Hern¨¢ndez-Mora, la periodista espa?ola que se encuentra desaparecida desde el s¨¢bado en Colombia. Seg¨²n el ministro de Exteriores espa?ol, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, "todo apunta" a que ha sido secuestrada por el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN).
Normalmente, es dif¨ªcil localizarla en alg¨²n sitio con cobertura: Cauca, Nari?o, Buenaventura, Bol¨ªvar... Ni sus destinos son f¨¢ciles ni su rostro pasa desapercibido por muy profundo que sea el agujero en el que se encuentre. "Si pudiera, ahora mismo mandaba a la mierda las columnas de opini¨®n", bromeaba hace un par de semanas en su casa y con un vino delante. La corresponsal de El Mundo en Colombia y colaboradora del diario El Tiempo, se quejaba de que esos art¨ªculos le quitaban tiempo y provocaban un desgaste demasiado alto para su obsesi¨®n: reportear.
Sin embargo, es precisamente la opini¨®n, sus columnas dominicales en El Tiempo y su participaci¨®n como contertulia en infinidad de programas de radio y televisi¨®n, lo que la ha hecho popular a lo largo de todo el pa¨ªs. Para unos, la suya era la opini¨®n de la derecha y para otros, la ¨²nica que dice las cosas claras, sin lazos ni celof¨¢n, desde que lleg¨® a Colombia en 1999.
Cuando hace unos a?os irrumpi¨® en las ondas colombianas, muchos se sorprendieron al escuchar una voz extranjera y de mujer hablar con tanto conocimiento y compromiso sobre problemas que hasta entonces eran dom¨¦sticos. Su tono duro, claro y directo la convirti¨® pronto en una voz de referencia sobre la pol¨ªtica colombiana y el conflicto que vive el pa¨ªs desde hace m¨¢s de medio siglo.
Pero si las columnas la hicieron conocida, sus reportajes la hicieron respetada.
Menuda y con aspecto d¨¦bil, Salud Hern¨¢ndez-Mora, de 59 a?os, es tambi¨¦n autora de tres libros sobre la guerra, resultado de casi dos d¨¦cadas recorriendo cada esquina de Colombia con la libreta y la grabadora como ¨²nico equipo de seguridad.
En su perfil en el peri¨®dico El tiempo la describen as¨ª: "periodista espa?ola, fue gerente de la compa?¨ªa de asesor¨ªa de imagen y comunicaciones Burston Marsteller y corresponsal del diario El Mundo". Sin embargo, para los que convirtieron el hashtag #DondeestaSaludHernandez en tendencia del d¨ªa, ella es la voz con acento de Madrid m¨¢s dura y combativa contra los abusos de la guerrilla, el reclutamiento de ni?os, las violaciones, la miner¨ªa ilegal o el pago de extorsiones.
En los ¨²ltimos tiempos, ha sido visceral contra el acuerdo de paz que se negocia en La Habana entre la guerrilla de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y el Gobierno de Juan Manuel Santos, a quien dirige cada domingo gran parte de sus misiles. El presidente colombiano no tard¨® ni unas horas en anunciar por Twitter que hab¨ªa ordenado al Ej¨¦rcito y la polic¨ªa "prioridad y dedicaci¨®n" para localizar cuanto antes a la periodista m¨¢s cr¨ªtica con su Gobierno.
Otros de sus ataques m¨¢s recientes han ido contra el ELN (Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional), por no liberar a los secuestrados y por su escasa voluntad de di¨¢logo ante el posible inicio de unas conversaciones con la segunda guerrilla del pa¨ªs.
Catatumbo, la zona donde Salud Hern¨¢ndez-Mora llevaba dos semanas reporteando, no es cualquier lugar. Esta zona del Departamento Norte Santander, en la frontera con Venezuela, es la regi¨®n del pa¨ªs donde m¨¢s hect¨¢reas de coca se cultivan y una de las zonas m¨¢s duras y peligrosas del pa¨ªs. En esta ¨¢rea conviven la guerrilla de las FARC, del ELN y varias bandas criminales herederas del paramilitarismo que encuentran en esta remota regi¨®n de Colombia el lugar ideal para delinquir y escapar por la porosa frontera hacia el pa¨ªs vecino.
A punto de sellarse en La Habana un acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC, se est¨¢ produciendo un reacomodo de los c¨¢rteles que ha disparado la violencia ligada al narcotr¨¢fico, y organizaciones de derechos humanos como la Fundaci¨®n Progresar han alertado sobre el medio centenar de homicidios que se han producido en lo que va de a?o.
Precisamente el ¨²ltimo reportaje de Salud Hern¨¢ndez-Mora, publicado el jueves, es un recorrido por las poblaciones donde ejerci¨® su poder el sanguinario narcotraficante Megateo. El texto, datado en Norte Santander, es un paseo por la boca del lobo. Aunque en su peri¨®dico esperaban tambi¨¦n su habitual columna de opini¨®n del domingo, esta nunca lleg¨®. Las autoridades, sin embargo, conf¨ªan en que Salud est¨¦ haciendo lo que m¨¢s le gusta y s¨®lo haya perdido contacto temporal.
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