Los maestros rebeldes combaten la reforma educativa en plena capital
El sindicato radical CNTE fuerza el pulso al Gobierno mexicano con marchas y plantones
La batalla se libra en la misma capital. La radical Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educaci¨®n (CNTE) ha llevado al centro de la Ciudad de M¨¦xico sus protestas contra el despido de 4.000 maestros por rechazar la reforma educativa. En un pulso que cada vez parece m¨¢s d¨¦bil, la anta?o todopoderosa central no ha dejado de marchar y acampar por la urbe. El resultado del pulso ha sido una ciudad colapsada y el recordatorio de que la ley educativa, respaldada por una mayor¨ªa de la ciudadan¨ªa, a¨²n genera f¨¦rreas resistencias en los sectores m¨¢s radicalizados.
La respuesta de la CNTE intent¨® ser una demostraci¨®n de fuerza. Cortaron autopistas, marcharon en Chiapas y desplegaron sus fuerzas por la capital. En otra ¨¦poca, su avance habr¨ªa terminado en violentas refriegas y puesto contra las cuerdas a los dispositivos policiales. Algo de eso ocurri¨® en Chiapas, pero no en la Ciudad de M¨¦xico. Posiblemente, porque la propia CNTE contuvo su rabia. En su recorrido entregaron pac¨ªficamente en el Senado un pliego de peticiones, entre las que se incluye la derogaci¨®n de la reforma educativa (aprobada por aplastante mayor¨ªa parlamentaria), la marcha atr¨¢s en los despidos y hasta la presentaci¨®n con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa. ¡°No estamos dispuestos a que la reforma imponga el miedo y la agresi¨®n a los trabajadores¡±, declar¨® un dirigente sindical, mientras sus huestes iban acampando por diferentes puntos de la capital en funci¨®n de la presi¨®n de las fuerzas de seguridad.
La presi¨®n sindical choc¨® contra un muro. La Secretar¨ªa de Educaci¨®n, al mando de Aurelio Nu?o, insisti¨® en que no ceder¨¢ al ¡°chantaje¡±. ¡°No tiene sentido persistir en una lucha en una lucha que s¨®lo busca recuperar privilegios perdidos. Nuestra mano ser¨¢ firme, no dura¡±, remach¨® Nu?o.
En el coraz¨®n de la batalla educativa la dial¨¦ctica entre el pasado y el futuro. La CNTE, una organizaci¨®n de izquierda radical, surgi¨® a finales de los setenta como una escisi¨®n del sindicato mayoritario de la ense?anza. Muy arraigada en los empobrecidos estados del sur, sobre todo, en Chiapas y Oaxaca, logr¨® una profunda penetraci¨®n en el tejido educativo y social gracias a sus redes clientelares y su control de la administraci¨®n estatal.
La reforma educativa impuso el fin de este modelo. La ley no s¨®lo acab¨® con la compra-venta de puestos y estableci¨® el concurso obligatorio; sino que impuso la evaluaci¨®n del profesorado. Un anatema para la coordinadora. Su respuesta fue lanzar una ofensiva para frenar la implantaci¨®n de la nueva norma. El resultado ha sido una progresiva p¨¦rdida de posiciones de la CNTE.
Las encuestas dan un apoyo mayoritario al Gobierno. La reforma, para un pa¨ªs que se sit¨²a en el ¨²ltimo lugar de la OCDE en resultado educativos, es vista como una puerta al futuro. Quiz¨¢ no la ¨®ptima, pero s¨ª mucho mejor que el antiguo modelo. Consciente de ello, el Gobierno ha decidido jugar en este terreno su ¨²ltima gran batalla pol¨ªtica del mandato.
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