Detenido el autor de la rapada p¨²blica a los maestros en Chiapas

El protagonista de la escena ya tiene nombre. Se llama N¨¦stor Caralampio L¨®pez Aguilar y fue detenido el domingo en Chiapas como supuesto autor de la humillante rapada a un grupo de maestros de Comit¨¢n (Chiapas). La agresi¨®n, que conmocion¨® a M¨¦xico a finales de mayo, puede acarrearle al detenido hasta 30 a?os de c¨¢rcel por los delitos de secuestro y de atentado a la dignidad de las personas. Los profesores, en una humillante exhibici¨®n de fuerza, fueron retenidos y vejados cuando acud¨ªan a su trabajo haciendo caso omiso a la huelga declarada por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educaci¨®n (CNTE) contra la reforma educativa.

Las im¨¢genes del escarnio dieron la vuelta al mundo. Ante la dimensi¨®n que cobr¨® el caso, la captura de L¨®pez Aguilar se convirti¨® en una prioridad policial. El Gobierno federal y el estatal unieron sus fuerzas en la persecuci¨®n. El domingo culmin¨® la b¨²squeda. El arresto, en un tono enf¨¢tico, fue anunciado en un v¨ªdeo por el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco: ¡°Ya est¨¢ entre rejas el autor de esta barbarie¡±.

En la grabaci¨®n que sacudi¨® al pa¨ªs se aprecia como el arrestado, con una camiseta amarilla, corta entre risas el pelo a dos profesoras de edad avanzada a las que se oblig¨® primero a andar descalzas por la poblaci¨®n con un letrero colgado al cuello que dec¨ªa: Soy un maestro vendido.

El escarnio fue atribuido en un principio a la CNTE. El sindicato radical, punta de la lanza de la oposici¨®n violenta a la reforma educativa, ya hab¨ªa rapado el a?o anterior a maestros y opositores que se hab¨ªan negado a secundar sus consignas. Esta vez, sin embargo, la tropel¨ªa no fue cometida por afiliados suyos, sino de la denominada Organizaci¨®n Popular Independiente Emiliano Zapata, un grup¨²sculo af¨ªn. El l¨ªder de este movimiento, Santiago Calvo L¨®pez, y otros dos integrantes, Juan Carlos L¨®pez Flores y Jos¨¦ Luis Calvo L¨®pez, tambi¨¦n han sido detenidos. Las v¨ªctimas les se?alan como los autores del ataque.

Parad¨®jicamente, al d¨ªa siguiente del escarnio, dos de los maestros rapados dijeron p¨²blicamente que defend¨ªan los enunciados de la CNTE y mostraron su oposici¨®n a la reforma. Fue un ejemplo triste de la enorme presi¨®n con que se vive en los paup¨¦rrimos estados del sur, sobre todo en Oaxaca y Chiapas, el desmantelamiento de una organizaci¨®n sindical que, en un universo de miseria, ha tejido una inmensa red clientelar y controlado durante d¨¦cadas los puestos de trabajo docente y sus ingresos.