L¨®pez Obrador clama por un ¡°cambio de r¨¦gimen¡± en el acto de apoyo a los maestros

La oportunidad era ¨²nica. La arteria que a lo largo de un siglo ha visto desfilar la historia de M¨¦xico viv¨ªa una jornada excepcional. No s¨®lo L¨®pez Obrador ocupaba la calzada. Los padres de los normalistas de Iguala conmemoraban 21 meses de su oscura desaparici¨®n y los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educaci¨®n (CNTE)? se manifestaban por la matanza de Nochixtl¨¢n (Oaxaca). Un salvaje enfrentamiento entre la polic¨ªa y los docentes que acab¨® el domingo pasado con nueve muertos, ocho de ellos a tiros. El ba?o de sangre, ¨²ltimo y terrible cap¨ªtulo de un largo proceso de resistencia a la reforma educativa, ha supuesto un golpe al Ejecutivo de Enrique Pe?a Nieto (PRI) y ha forzado la apertura de una negociaci¨®n con el sindicato radical.

En este ambiente de alta volatilidad, con el recuerdo fresco de dos tragedias que dif¨ªcilmente ser¨¢n olvidadas, L¨®pez Obrador logr¨® acaparar la ma?ana. Convoc¨® a decenas de miles de seguidores en apoyo a los maestros. Por las muertes de Nochixtl¨¢n exigi¨® la dimisi¨®n del secretario de Gobernaci¨®n, Miguel ?ngel Osorio Chong, la libertad inmediata de los sindicalistas encarcelados y un di¨¢logo para forjar una ¡°reforma educativa con consenso de los maestros, padres y autoridades¡±. ¡°No se debe tratar as¨ª a los maestros; se les est¨¢ ultrajando y adem¨¢s se quiere imponer una reforma con el uso de la fuerza, con autoritarismo. Eso no se debe permitir¡±, dijo L¨®pez Obrador a EL PA?S.

Ese fue el gui?o que lanz¨® a la CNTE. Pero no fue m¨¢s que un ap¨¦ndice de su discurso. Camisa blanca y gesto adusto, el infatigable caudillo de la izquierda elev¨® el tono y dispar¨® directamente contra el ¡°corrupto y autoritario¡± presidente Enrique Pe?a Nieto, al que pidi¨® que abra ¡°un Gobierno de transici¨®n¡± para entregar el poder. ¡°No queremos violencia, no queremos reconstruir M¨¦xico desde escombros y amargos sufrimientos¡±, clam¨® en un tono ambiguamente amenazador.

Una y otra vez, en su discurso, puso el foco en los comicios presidenciales. Su gran ambici¨®n. El trono que ya dos veces se le ha escapado y por el que combatir¨¢ por tercera ocasi¨®n en 2018. ¡°Las elecciones ya est¨¢n cerca, siempre hemos actuado con responsabilidad y poniendo el inter¨¦s general por delante; no somos vulgares ambiciosos, no luchamos por cargos, luchamos por ideales, por principios, porque queremos la transformaci¨®n de M¨¦xico¡±, dijo. Acabada su intervenci¨®n, el acto se dio por concluido y sonaron las alegres notas del himno de Morena. El paseo de Reforma, poco a poco, se fue despejando. A la espera de otra ocasi¨®n.