La Carta Democr¨¢tica, la OEA y Venezuela
Seguir un procedimiento previsto en la Constituci¨®n no es un golpe de Estado
¡°La OEA tiene que saber hoy si su Carta Democr¨¢tica es un instrumento fuerte, para defender los principios de la democracia, o si es para los archivos de la organizaci¨®n. Ustedes definitivamente tienen la palabra.¡±
As¨ª comenz¨® el Secretario General de la OEA, Luis Almagro, su presentaci¨®n sobre Venezuela el pasado jueves ante el Consejo Permanente. Lo hizo de acuerdo al art¨ªculo 20 de la Carta, que le autoriza convocar esta instancia para que realice una evaluaci¨®n de la situaci¨®n en esa naci¨®n y adopte las decisiones que estime conveniente.
Almagro actu¨® en defensa de la democracia, mandato central de la OEA. Los documentos fundacionales as¨ª lo confirman, incluyendo nuestra Carta Democr¨¢tica Interamericana. El Secretario General concluy¨®, a partir de la evidencia recogida en un detallado y sesudo informe, que existe una seria alteraci¨®n del orden constitucional en Venezuela.
Repetidamente se verifican intervenciones inconstitucionales orquestadas por el Poder Ejecutivo en contra del Congreso, con la connivencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, desde donde se bloquean todas las acciones legislativas o leyes aprobadas. Este a?o el Congreso opositor se ha visto impedido de legislar, designar, apropiar recursos o fiscalizar. As¨ª el Parlamento ha sido condenado por jueces oficialistas a quedar como un ente decorativo.
El Poder Judicial en Venezuela ha sido cooptado por el Ejecutivo y mecanismos perversos han minado tambi¨¦n la independencia de los funcionarios judiciales. M¨¢s del 60% de los jueces en tribunales de primera instancia pueden ser destituidos de sus cargos, sin el debido proceso, si una comisi¨®n del Tribunal Supremo as¨ª lo decide.
La ausencia de justicia independiente y la erosi¨®n del Estado de Derecho facilitan la persecuci¨®n pol¨ªtica. Los medios de comunicaci¨®n est¨¢n sujetos a procedimientos penales y administrativos sin garant¨ªas, a la censura previa y al acoso, si ejercen la sana cr¨ªtica y act¨²an con independencia del poder pol¨ªtico. Las licencias de difusi¨®n est¨¢n controladas por medio de un proceso opaco y discrecional, y el acceso al papel peri¨®dico est¨¢ controlado por el Estado.
Los opositores que han acudido a dar su testimonio ante la OEA acerca de los retos que enfrenta el pa¨ªs, son llamados por su Gobierno ¡°traidores de la patria¡±. Otros opositores, han corrido una suerte a¨²n peor, el encarcelamiento.
En 2013, cuando el Presidente Nicol¨¢s Maduro asumi¨® el cargo, seg¨²n datos del Foro Penal Venezolano hab¨ªa 11 presos pol¨ªticos en ese pa¨ªs. Entre enero de 2014 y el 31 de mayo de 2016 se denunciaron al Foro 4.253 detenciones, arrestos o encarcelamientos, todos ellos vinculados a protestas y cr¨ªticas contra el Gobierno. Actualmente hay 1.986 personas bajo alg¨²n tipo de medidas restrictivas y otras 94 est¨¢n en la c¨¢rcel, por haberse atrevido a manifestar su disidencia.
El deterioro institucional ha contribuido a agravar las condiciones econ¨®micas, sociales y humanitarias del pa¨ªs. La inflaci¨®n llegar¨¢ a 720%. El PIB disminuir¨¢ un 8% m¨¢s en 2016. La deuda externa equivale a casi seis a?os de exportaciones de petr¨®leo. Tres cuartas partes de los hogares y de los venezolanos vivieron en la pobreza en 2015. La poblaci¨®n enfrenta una escasez de alimentos y medicamentos sin precedentes. El sistema de salud ha pr¨¢cticamente colapsado. Los cortes de luz son recurrentes y la falta de agua potable es dram¨¢tica.
Ante la p¨¦rdida de legitimidad del Gobierno y su incapacidad para dar salida a la crisis multidimensional, la oposici¨®n pol¨ªtica gestiona la convocatoria a un refer¨¦ndum revocatorio, el cual fue consagrado en la Constituci¨®n Pol¨ªtica en 1999 por el Presidente Hugo Ch¨¢vez.
Seguir un procedimiento previsto en la Constituci¨®n no es un golpe de Estado. Por el contrario, negar, postergar u obstruir la convocatoria al refer¨¦ndum constituye, por parte del parcializado Consejo Nacional Electoral, un abuso de poder y un trastorno patente del orden democr¨¢tico. La celebraci¨®n del referendo revocatorio en 2016 es la ¨²nica manera constitucional de resolver la crisis pol¨ªtica en Venezuela.
Como miembros del sistema interamericano, todos debemos aspirar a lo mismo: una soluci¨®n pac¨ªfica a la crisis en Venezuela que permita la vuelta al orden democr¨¢tico y el fin de la crisis humanitaria.
Es por ello que estamos obligados a no ser neutrales ante la situaci¨®n de Venezuela y debemos apoyar las gestiones emprendidas por el Secretario General de la OEA, porque est¨¢n dirigidas no a castigar ni sancionar a Venezuela, sino a encauzar su crisis mediante un di¨¢logo con avances concretos, con reglas claras y transparentes, con plena validaci¨®n de los mediadores por todas las partes y con mecanismos de apreciaci¨®n colectiva, como los que contempla la Carta Democr¨¢tica.
Almagro asever¨® que dialogar no es s¨®lo sentarse a conversar. No es aceptable condicionar el respeto a los derechos humanos y a la Constituci¨®n, como la realizaci¨®n del refer¨¦ndum revocatorio, el reconocimiento a la voluntad popular expresada en el Congreso, la liberaci¨®n de los presos pol¨ªticos y la apertura de efectivos canales para recibir ayuda humanitaria.
La lucha emprendida por Luis Almagro ha rendido frutos. El proceso de la Carta Democr¨¢tica est¨¢ abierto. Veinte pa¨ªses miembros de la organizaci¨®n han aprobado iniciarlo, al autorizar el conocimiento y discusi¨®n del informe del Secretario General. Quedan pendientes la evaluaci¨®n del contenido de ese informe, por parte del Consejo Permanente, y su decisi¨®n respecto a qu¨¦ camino tomar para recomponer la institucionalidad democr¨¢tica en Venezuela.
Confiamos en que la mayor parte de las naciones de nuestro Hemisferio sabr¨¢n colocarse del lado correcto de la historia, apoyando condiciones de un di¨¢logo incluyente, abierto, eficaz y con los adecuados mecanismos de valoraci¨®n colectiva previstos por la Carta Democr¨¢tica de la OEA.
Solo volviendo a un ejercicio leg¨ªtimo y responsable del poder podr¨¢ Venezuela volver a la senda de la paz, de la prosperidad y de una democracia plena.
* Laura Chinchilla es expresidente de Costa Rica, Twitter @Laura_Ch
* Jorge-Tuto Quiroga es expresidente de Bolivia, Twitter @tutoquiroga
* Andr¨¦s Pastrana es expresidente de Colombia, Twitter @AndresPastrana_
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.