El cronista de Guant¨¢namo podr¨¢ salir de la prisi¨®n militar
Las autoridades dan el visto bueno para la liberaci¨®n de Mohamedou Ould Slahi
Mohamedou Ould Slahi podr¨¢ escribir pronto la palabra ¡°fin¡± en el cap¨ªtulo m¨¢s oscuro de su vida. Las autoridades estadounidenses han dado este mi¨¦rcoles el visto bueno a la puesta en libertad del mauritano convertido en cronista de Guant¨¢namo, que lleva 14 a?os encerrado en esa c¨¢rcel en la base militar en territorio cubano sin que jam¨¢s se le acusara de delito alguno. Pese a que buena parte del relato est¨¢ censurado, el diario de su cautiverio, Guantanamo Diary, que Slahi logr¨® publicar en 2015 tras a?os de batallas legales, constituye un espeluznante recuento de los aberrantes abusos que sufri¨® durante su estancia en la controvertida c¨¢rcel.
La organizaci¨®n de derechos civiles ACLU, que asumi¨® su defensa, celebr¨® la decisi¨®n, pero advirti¨® de que a¨²n queda camino por delante. ¡°El nuevo cap¨ªtulo en la vida de Slahi no podr¨¢ comenzar hasta que el Pent¨¢gono lo transfiera, y deber¨ªa comenzar ese proceso de inmediato¡±, reclam¨® Hina Shamsi, directora del Proyecto de Seguridad Nacional de ACLU.
Slahi naci¨® en Mauritania en 1970 y gan¨® una beca para estudiar en Alemania. A comienzos de los a?os 90, se entren¨® en un campo de Al Qaeda, en la ¨¦poca en que esta organizaci¨®n combat¨ªa al Gobierno comunista de Afganist¨¢n y era apoyada, como subrayaron sus abogados, por Estados Unidos. Slahi, que estudi¨® ingenier¨ªa electr¨®nica, trabaj¨® varios a?os en Alemania y Canad¨¢, antes de regresar a su pa¨ªs en 2000. Un a?o m¨¢s tarde, despu¨¦s del 11-S, fue detenido a petici¨®n de Estados Unidos, lo que supuso el inicio de un infierno que lo llev¨® a una prisi¨®n en Jordania, luego a la afgana de Bagram y, finalmente, a Guant¨¢namo, donde languidece desde 2002. El motivo de su detenci¨®n eran sus posibles lazos terroristas, pero las autoridades estadounidenses nunca llegaron a presentar cargos contra ¨¦l. Aun as¨ª, fue uno de los dos seleccionados para el programa de ¡°Proyectos Especiales¡± aprobado personalmente por el secretario de Defensa de George W. Bush, Donald Rumsfeld, record¨® ACLU. El propio Slahi explica en su libro en qu¨¦ consist¨ªa ese trato ¡°especial¡±: privaci¨®n de sue?o y alimentaci¨®n, le obligaban a escuchar toda la noche, de pie, canciones de heavy metal a todo volumen, le volcaban un cubo de agua sobre la cabeza y luego bajaban la temperatura de su celda al m¨¢ximo¡
En 2010, un juez federal valid¨® su petici¨®n de h¨¢beas corpus y decret¨® su liberaci¨®n, pero el Gobierno recurri¨® y paraliz¨® la decisi¨®n. Hasta ahora. Una junta revis¨® su solicitud de libertad provisional el 2 de junio. La decisi¨®n lleg¨® este mi¨¦rcoles. En el escrito, los responsables tuvieron en cuenta el ¡°comportamiento altamente obediente¡± de Slahi durante su detenci¨®n, as¨ª como ¡°claros indicios de un cambio de actitud¡± en el preso, seg¨²n The Washington Post.
Pero todav¨ªa falta una fecha para la salida definitiva del mauritano de Cuba. De los 76 detenidos que quedan en Guant¨¢namo, 31 han recibido el visto bueno para ser transferidos. ¡°Sigue habiendo decenas de hombres atrapados en la miseria que constituye la detenci¨®n indefinida en Guant¨¢namo¡±, record¨® ACLU. ¡°El tiempo se le est¨¢ acabando al presidente Barack Obama para cumplir su promesa de cerrar Guant¨¢namo y evitar que esta injusticia manche su legado¡±, advirti¨® la organizaci¨®n.
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